Bilbao Live BBK – Kobetamendi (Bilbao)

La cuarta edición del Bilbao Live no pasará a la historia por su cartel. Tres jornadas (9, 10 y 11 de julio) sin incidentes, con buen ambiente y con una parrilla de nombres que mantienen la tónica de un año triste. La crisis también afecta a la contratación y no hay mejor ejemplo que este festival.

El jueves se presentaba como un día fuerte con la presencia de Depeche Mode. Un terrible horario hizo que nos perdiéramos a una banda tan atractiva como The Gaslight Anthem. Es una lástima que los directos arrancaran tan temprano, sinceramente no comparto esa apuesta por empezar pronto para concluir pronto la programación de los dos escenarios existentes.  

The Ting Tings se presentaron en Bilbao aún bajo la estela de su primer y ya caduco álbum, We Started Nothing. Sin querer asumir demasiado riesgo y aderezando su actuación con poses y situaciones varias, se dedicaron a repasar en tono festivo y bailable canciones como «Impacilla Carpisung», «Great Dj» o «That´s no my name».

A Editors le tocaba hacer de telonero del plato fuerte del jueves, Depeche Mode. Solventes como pocos, los británicos combinaron sus mejores singles con el estreno de varias canciones de su próximo disco In This Light And On This Evening, en el que giran levemente su estilo para adoptar tintes electrónicos. Por momentos, sonaron a algo parecido a lo que iba a suceder a continuación

Depeche Mode congregó a sus fans norteños tras su apertura de gira en Valladolid la noche anterior. Una amplia primera parte del set estuvo compuesta por los nuevos temas de los británicos. A los menos seguidores les pillo sin escudo esta selección y terminó por matarlos. Gahan, Gore y Fletcher, en el formato de festival, deberían dedicarse a repasar sus singles.

El fin de la velada tenía como chefs a Basement Jaxx. Buenos ingredientes para una buena sesión de bailoteo masivo. Ideal para cerrar el primer día y, sobre todo, para recuperar la alegría tras DM.

La segunda jornada arrancó para nosotros con el final de Babyshambles (Supergrass ya había actuado a esas tempranas horas). Pete Doherty no termina de convencer ni a sus defensores, increíble. Quienes sí cumplieron con el pronóstico fueron Dave Matthews y su banda. Los norteamericanos apenas visitan Europa y la ocasión no era para desaprovechar. Motivados e inspirados, hicieron gala de su talento con intensidad y brillantez.

Afortunadamente, el día mantuvo esa tónica. Kaiser Chiefs ofrecieron el bolo más entretenido de todo el festival. Vino bien un poco de hooliganismo en prime-time. Para regocijo de sus fans, Jane´s Addiction fueron capaces de alcanzar un más que digno nivel. Perry Farrell se esforzó, las cosas como son. Otros que vuelven… ¿Haciendo caja para la jubilación?

Entre veteranos anduvo el juego. Echo & The Bunnymen sorprendieron muy positivamente. Treinta años después, Ian McCulloch se defiende con solvencia ante una parroquia cansada, pero no por ello menos exigente.

El cartel del sábado contaba con nombres menores (It Hugs Back, The Phenomenal Handclap, Baddies) y otros demasiado conocidos. Es el caso de Asian Dub Foundation y su propuesta agotada. A ciertas edades no estamos para aguantar turradas así, lo siento mucho.

Primal Scream, seguidamente, lo intentó y por momentos conectaron con el respetable. Algunos de sus hits (“Country girl”, “Swastika eyes” o “Rocks”) conservan todo el potencial, pero la valoración general es que han perdido atractivo.

Placebo llegaba con ganas de reivindicar la calidad de su último trabajo, Battle For The Sun. Cabeza de cartel de la última jornada, tenían una oportunidad única de demostrar que no han perdido un ápice de la fuerza que en su día les hizo imprescindibles. No la desaprovecharon. Rebosando potencia y desparpajo, un melenudo Molko y los suyos reventaron el Bilbao Live sin prácticamente recurrir a ningún hit del pasado. Aunque parezca difícil de creer, «Battle For The Sun» y otras novedades, sonaron casi tan bien como «Special K» o «Every You».

Completaron la velada los neoyorquinos Fischerspooner. El dúo yankee venía con “Entertainment”, su nuevo trabajo, listo para ser presentado en la madrugada que puso el cierre a la edición de 2009. 

El año que viene mejor, seguro.

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