Kirin J. Callinan – Embracism (Popstock)

Si hubiera que definir a Kirin J. Callinan en una sola palabra, esta sería provocador. Su primer álbum de estudio, Embracism, es una bizarra mezcla entre su voz gutural, propia del black o death metal, y la música enlatada.

Algunos temas -como «Embracism» o «Halo»-, tienen una base instrumental muy pobre y dejan todo el protagonismo a la voz de Callinan, quien prácticamente habla entre susurros de ultratumba. Su timbre recuerda mucho al de Marilyn Manson -en «Way II War» el parecido es impresionante- o al de Till Lindemann de Rammstein, enmarcado en una especie de neo rock industrial con una potente tendencia electrónica. Esta combinación antagónica aparece también en «Come On USA» o en «Strecht It Out»: voz de metal, música de discoteca. Definitivamente original.

El afán de Callinan por abarcar todo tipo de estilos le lleva a crear cuasi baladas como «Lanslide», «Chardonnay» o «Love Delay», en las que demuestra que es un hombre de lo más polifacético: canta con una profundísima, aunque, a la vez, dulce y sentida voz, haciéndonos olvidar, por completo, sus otras caras. Luego está «Scraps», oscura, misteriosa, muy cercana al love metal que HIM inauguró allá por 1992. «Victoria M.» simboliza el arcoíris dentro de la gran tormenta que es Embracism; es refrescante y, sobre todo, esperanzadora, tanto en sonido como en contenido. No tiene nada que ver con el resto de las canciones del CD.

Así que todo lo que se le puede recomendar a este artista australiano es que siga por este camino. La comunidad melómana necesita que alguien como Callinan arriesgue y combine, de modo imposible, estos estilos opuestos. Tal vez muchos de estos amateurs se darán cuenta de que han terminado por adorar un sonido que ni siquiera sabían que buscaban.

Deja una respuesta

WP-Backgrounds Lite by InoPlugs Web Design and Juwelier Schönmann 1010 Wien