Singles Supremos: “Sledgehammer” de Peter Gabriel

Nº1 en Estados Unidos y Canadá, nº3 en Australia y nº4 en Inglaterra son las más altas cifras cosechadas en las listas internacionales por Peter Gabriel, a través de un tema suelto, a lo largo de su trayectoria en solitario. Naturalmente, nos referimos a su single supremo “Sledgehammer”, de 1986; una inspirada, efectiva, amena y adherente mezcolanza de pop-rock, dance, funk y soul.

 

Fue este 86 un año fundamental para este icónico artista británico, el cual dejó a un lado su habitual rol de músico arriesgado, estrambótico y “de culto”; adoptando así entonces una línea de textos y sonidos relativamente más sencillos y más directos que en todas las ocasiones anteriores pero siempre con la singularidad, el esplendor y la clase que caracteriza al eminente Peter Gabriel. Aquella mutación concreta de tornar algo más accesible su arte, condujo a que se le considerase un “super-astro mundial del pop” pero Gabriel sintió que esa elevada posición otorgada fue solamente algo eventual y con lo que no se identificó del todo.

Por descontado, también hablaremos, al final, del celebérrimo y complejísimo video-clip que impulsó, decisivamente, a esta tonada del “mazo” pero antes, por ejemplo, demos un vistazo a la letra del tema; la cual es levemente más extensa en la versión original del sencillo que en la de la propia filmación.

Hey, hey, you, tell me how have you been? / Oye, oye, tú, dime ¿cómo te ha ido?

You could have a steam train / Podrías tener un tren de vapor
if you just lay down your tracks. / si solamente colocaras tus raíles.
You could have an aeroplane flying / Podrías tener un avión volando
if you bring your blue sky back. / si traes tu cielo azul de vuelta.

All you do is call me. / Todo lo que tienes que hacer es llamarme.
I’ll be anything you need. / Seré todo lo que necesites.

You could have a big dipper / Podrías tener una montaña rusa
going up and down, all around the bends. / subiendo y bajando por todas las curvas.
You could have a bumper car, bumping. / Podrías tener un auto de choque, chocando.
This amusement never ends. / Esta diversión nunca para.

I wanna be your sledgehammer. / Deseo ser tu mazo.
Why don’t you call my name? / ¿Por qué no me llamas por mi nombre?
Oh! let me be your sledgehammer. / ¡Oh! Déjame ser tu mazo.
This will be my testimony. / Esta será mi declaración.

Show me around your fruit cage / Déjame ver tu jaula de frutas
‘cause I will be your honey bee. / porque yo seré tu abeja recolectora.
Open up your fruit cage / Abre tu jaula de frutas
where the fruit is as sweet as can be. / donde la fruta tiene su máxima dulzura.

I wanna be your sledgehammer. / Deseo ser tu mazo.
Why don’t you call my name? /¿Por qué no me llamas por mi nombre?
You’d better call the sledgehammer / Mejor llámalo “el mazo”.
Put your mind at rest / Voy a hacer que te relajes.


I’m gonna be the sledgehammer. / Voy a ser tu mazo.
This can be my testimony. / Esta puede ser mi declaración.
I’m your sledgehammer. / Soy tu mazo.
Let there be no doubt about it. / No te quepa duda sobre ello.

Sledge… sledge… sledgehammer. / Ma…ma… mazo.

I get it right, I kicked the habit / Lo estoy haciendo bien, colgué los hábitos,
(kicked the habit), (kicked the habit). / (colgué los hábitos), (colgué los hábitos).
Shed my skin (shed my skin). / Mudé mi piel (mudé mi piel).
This is the new stuff (this is the new stuff). / Este es el nuevo tema (éste es el nuevo tema).
I go dancing in (we can go dancing in). / Voy a bailar (podemos ir a bailar
).

Oh! won’t you show for me? Show for me. / ¿No me lo muestras? (Muéstramelo).
I will show for you (show for you). / Te lo mostraré (te lo mostraré).
Show for me (show for me). / Muéstramelo (muéstramelo)
I will show for you. / Te lo mostraré.
Yeah, yeah, yeah, yeah, yeah! I do mean you. / ¡Sí, sí, sí, sí, sí! Me refiero a ti.

(Show for me). Only you, you been coming through / (Muéstramelo). Solo tú te has hecho notar.
(Show for you). I’m gonna build that power, / (Te lo mostraré). Voy a construir ese poder,
build, build up that power, hey. / construir, construir ese poder, oye.
I’ve been feeding the rhythm. / He estado alimentando el ritmo.
I’ve been feeding the rhythm. / He estado alimentando el ritmo.
Gonna feel that power, hey, build in you / Voy a sentir ese poder, oye, construirlo dentro de ti.

Come on, come on, help me do. / Vamos, vamos, ayúdame a hacerlo.
Come on, come on, help me do. / Vamos, vamos, ayúdame a hacerlo.
¡Yeah, yeah, yeah, yeah, yeah, yeah! You. / ¡Sí, sí, sí, sí! Tú.

I’ve been feeding the rhythm. / He estado alimentando el ritmo.

I’ve been feeding the rhythm. / He estado alimentando el ritmo.
It’s what we’re doing, doing / Es lo que estamos haciendo, haciendo
all day and night / todo el día y toda la noche.

El repertorio del álbum So se hallaba finalizado. Los músicos tenían ya todo el equipo recogido y estaban abandonando ya el estudio cuando, de repente, Peter Gabriel les comunicó a dichos intérpretes auxiliares que ya podían desempaquetar las herramientas de trabajo, de nuevo, porque una última canción había nacido en su mente: se trataba de “Sledgehammer”.

Se estaba gestando una de las mejores composiciones de los años 80…

La grabación de dicho tema se consumó en Bath City, condado de Somerset, en los Ashcombe Studios, propiedad de Peter Gabriel; habiendo sido aquel taller musical un antiguo establo que pertenecía a una granja reconvertida. Ésto motivó las alabanzas pero también las quejas del productor Daniel Lanois (también trabajó con U2, Brian Eno o Bob Dylan; entre otros/as), el cual pensó que aquel era un emplazamiento fantástico y que el equipo de grabación en sí era óptimo (se presentaba como realmente sofisticado y abundante en aparatos) pero que, por contra, dichos medios técnicos no se hallaban muy bien instalados (por ejemplo, la sala de control y la de grabación no estaban conectadas visualmente); así que, en aquel momento, brotaron algunas dificultades técnicas que hubo que superar.

Aclarar que Lanois y Gabriel eran viejos conocidos debido la banda sonora de la película Birdy, de 1984.

Todo suena acertadamente en esta tonada ya desde su mística introducción, en este caso, a través de una flauta japonesa de bambú (una “shakuhachi”) con eco, lográndose este efecto específico con un sampler E-mu emulator II; el cual Peter Gabriel conservó, casualmente, después de una prueba de sonido.

En la interpretación de “Sledgehammer” intervinieron, como eje central, el propio productor Daniel Lanois, el cual rasgueó una guitarra eléctrica de 12 cuerdas, el músico de sesión David Rodhes que utilizó una guitarra normal Strat y lógicamente, Peter Gabriel tocando un sintetizador Prophet 5; al cual calificó, este último, de sonido de “órgano barato” y de “viejo caballo de guerra”. El caso es que estos tres instrumentos se grabaron juntos en una sola pista de la mesa de mezclas para tratar de ofrecer un artificio singular; consiguiéndose ésto a través de la magia del ingeniero Kevin Killen.

Por su parte, el prestigioso percusionista de estudio Manu Katché (el cual también tocó para Sting o Dire Straits) plasmó su vistosa y rotunda parte de batería en un sola toma porque estaba convencido de que sus posteriores intentos interpretativos no superarían el primero.

Por otro lado, “Sledgehammer” fue el tema de todo el LP So que tuvo más procesos de sobregrabación de detalles (sobre todo de la voz), además de que se redujo la versión original de 10 minutos a la mitad, es decir a 5, para que encajara, como fuese, en un razonable formato de single.

Anecdóticamente, el terceto que comandaba aquello, es decir, los mismos David Rhodes, Daniel Lanois y Peter Gabriel se presentaron a las sesiones del álbum So con unos cascos amarillos, de esos que se utilizan en las obras de la construcción, para así rebajar la tensión laboral si era necesario y de ese modo, tomarse la grabación de manera más distendida. Fue aquel detalle gracioso el que inspiró, finalmente, la melodía “Sledgehammer” porque los tres intérpretes citados imaginaban que asistían al trabajo como si fueran operarios de la construcción y en consecuencia, durante aquellas sesiones, los aludidos solían comparar sus sudorosos esfuerzos a la hora de tocar con el acto de “golpear con un mazo”.

Así pues, con esa idea girando en su inquieta cabeza, el genial Gabriel escribió unos versos que se hallan, todo el tiempo, navegando entre humorísticas y sutiles metáforas acerca del más puro acto sexual entre dos amantes y por lo tanto, esas expresiones de “tren de vapor” , “jaula de frutas”, “montaña rusa” (ésta sería la interpretación del término “big dipper”), “auto de choque”, “avión” o “he estado alimentando el ritmo” son alusiones indirectas a todo ello; resultando lo del propio “mazo”, el término central en torno a ese mismo tema de disimuladas proposiciones eróticas; claro está.

Y es que según manifestaciones del propio Peter Gabriel, cuando otras formas de comunicación no funcionan, el propio sexo puede romper esos bloqueos. Este lenguaje que desliza insinuaciones libidinosas, resulta muy típico del blues de los años 60; el cual es una de las influencias del propio músico británico, precisamente y por ese motivo, el mismo Gabriel lo utiliza en las frases de “Sledgehammer”, deliberadamente, como reflejo expresivo de aquella época y de ese género musical.

Al final, el productor Daniel Lanois sí que estuvo realmente satisfecho del resultado definitivo de la canción y del resto de piezas del histórico álbum So (LP , por cierto, que logró capturar el nº1 en Inglaterra y el nº2 en E.E.U.U.; entre otros países del mundo donde obtuvo esas mismas privilegiadas posiciones en las listas respectivas).

“Sledgehammer” fue nominada a dos Brit Awards y a tres Grammy pero lo que batió absolutamente todos los records fueron las 10 candidaturas del legendario video-clip a los premios MTV de 1987, venciendo en hasta 9 apartados: algo jamás superado nadie en toda la trayectoria de éstos galardones. Además, se ha comentado repetidamente que éste fue es el clip más emitido en toda la longeva trayectoria de esta cadena especializada. Como añadido, el video del “mazo” fue obteniendo durante los siguientes lustros una serie de reconocimientos como, por ejemplo, el de 1999, en la propia MTV, que le daba como 4º mejor video de la Historia y también se le consideraba más sobresaliente de siempre construido mediante técnicas de animación.

Así que es imprescindible hablar aquí de esta increíble filmación porque además el propio Peter Gabriel ha reconocido que este single, en concreto, le debe gran parte de su éxito comercial a la propia cinta audiovisual mencionada. De hecho, dicho músico se halla convencido de que gracias a los clips se llega a una audiencia más amplia.

Como se señaló antes, el texto y el sonido son, en 1986, más llanos que en otros periodos previos suyos pero en lo que nunca cambió Peter Gabriel es en la devoción por el impacto visual y la apuesta por la teatralidad. Si en su época al frente de Genesis, en los años 70, el vocalista inglés exhibió una colección de extraños disfraces en los conciertos; después en los 80, para video-clips como el de “Sledgehamer”, el propio Gabriel empujó ya hacia un nuevo nivel su propio carnaval estrafalario como cuando aparece con la cara hecha de frutas o transformada en hielo la misma; además de tener esta misma mascarada una lógica continuidad también en sus apariciones, en vivo, en la propia década ochentera y más allá en el tiempo.

 

Dicho video fue una revolución total en su momento y estuvo dirigido por el especialista estadounidense Stephen R. Johnson. Éste arribó a Inglaterra, en 1985, y para edificar dicho clip reclutó a sus compatriotas, los hermanos Stephen y Timothy Quay y también a los denominados Aardman Animations, un nutrido equipo británico de expertos en esas técnicas de “plastilina animada”, encabezados por el técnico Nick Park; el cual aplicó todos estos montajes a la popular serie Wallace y Grommit o a la película Evasión en la granja, pocos años después.

El caso es que a Stephen Johnson ni siquiera le agradaba el planteamiento sonoro de “Sledgehammer” porque pensaba que era otro chico blanco intentando hacer música negra pero en medio de una borrachera de vino junto a Peter Gabriel, este segundo aprovechó para convencer a Johnson sobre elaborar un video de ese estilo, es decir, a través de la pixelación, una variante aplicada a personas de la técnica general de “stop-motion” (“fotograma a fotograma”). Éste mismo método ya lo había empleado el mismo director americano con Talking Heads y su video del tema “Road to nowhere”, en dicho año 85 y eso mismo atrajo al propio Peter.

El caso es que Gabriel y Johnson, aunque se gastaron la friolera de 120.000 libras (unos 24 millones de pesetas al cambio, en 1986) en la confección del clip, incluso se vieron obligados a recortar alguna cosa del guión por falta de más dinero. Matizar que, a mediados de los años 80, solo hubo alguien por delante de ellos en presupuesto para ese tipo de videos mastodónticos y ese era Michael Jackson (por ejemplo, el clip de “Thriller” costó entre 500.000 y 1 millón de dólares, según las versiones). 

Expresó Peter Gabriel que le llevó muchísimo trabajo rodar el video-single de “Sledgehammer” ya que, en total, se calcula que tuvo que posar nada menos que ¡12 veces para cada segundo de filmación!, lo que supone un total de unas 4100 ocasiones, aproximadamente, en los 5 minutos 45 segundos que dura el video; así que el mismo Gabriel manifestó que si alguien quería copiar la cinta le deseaba muy buena suerte. Tras una intensa odisea de rodaje y edición final, fue algo más de una semana lo que se tardó en preparar tan costoso espectáculo, con 16 horas de agotadora labor en cada una de las jornadas.

Desgranaremos, por orden, algunas partes del propio clip y aportaremos más datos parciales sobre el mismo.

Para la secuencia del tren que gira alrededor de su rostro, Peter Gabriel tuvo que permanecer 6 horas siendo retratado, pacientemente, por la cámara para obtener un resultado final que dura solamente 10 segundos. Sumando a esto anterior, fueron 6 segundos más los que transcurrieron durante la escena del cielo azul, sin embargo, resultó ésta la parte de todo el clip de más extrema dificultad para Gabriel porque el equipo de maquillaje tuvo que pintarle y despintarle la cara ¡en 72 ocasiones! (otras 6 horas de faena) como base para poder montarse luego el efecto de “animación” y debido a este sufrido y prolongado proceso, incluso el propio artista inglés sufrió molestias en su piel facial por las diversas irritaciones.

Por otro lado, la escena de los pollos bailarines tuvo que abreviarse más de lo previsto porque los cadáveres reales de éstos animales se ensuciaron rápidamente, además de pudrirse; así que la cómica coreografía “polluna” se redujo a unos pocos pasos de danza.

Como guinda, para el acto final en que que representa el cosmos hubo que cubrir el cuerpo de Peter Gabriel con tiras reflectantes (y lo mismo se hizo con todo el set de rodaje), como alternativa, porque el traje lleno de bombillas que portaba el artista al principio, como si fuera un árbol de Navidad, daba algunas pequeñas descargas eléctricas y era muy molesto.

Agregaremos que como “extras” moviéndose a toda velocidad, para la segunda parte del video, aparecieron seis mujeres en el papel de coristas soul; además de las hijas del propio Gabriel, el propio equipo de animación y hasta la novia del director Stephen R. Johnson.

Peter Gabriel también opinó que al mismo personal de rodaje le impactó trabajar de aquella manera. De hecho, los citados Aardman Animation pensaron que al utilizar esos métodos caseros, sin recurrir a la digitalización, todo ofreció una sensación fresca y diferente. Ya el año 2018, la propia empresa Aardman remasterizó, con la moderna y potentísima tecnología de pixelado 4K, los nada menos que 2.000 metros de película que se utilizaron para “Sledgehammer”; todo ello para conseguir una mucho más alta definición de las tan valiosas imágenes.

En definitiva, un video-clip por siempre antológico e inolvidable.

Proseguiremos comentando que otro sonido que también constituyó siempre una considerable fuente de inspiración para Peter Gabriel fue el soul. Así que los “replicadores” coros de este género entonados, de modo tan atrayente, en la propia “Sledgehammer” por las cantantes afroamericanas Dee Lewis, P.P. Arnold y Coral Gordon, refuerzan toda esa intención de desprender resonancias del mítico sello Stax.

Debido a éste mismo espíritu soul, el músico de Surrey también introdujo grandilocuentes metales de fondo y para dirigir este área de “Sledgehammer” fichó, en concreto, al trompetista Wayne Jackson. El motivo de la inclusión de éste último es que había tocado con Otis Redding, en un club de Londres, en 1967 y un jovencísimo Peter Gabriel estuvo de espectador de aquella misma actuación, 20 años atrás; provocándole aquello un honda impresión al vocalista británico. Casualidad o no, justo después Gabriel co-fundaría la banda Genesis, ese mismo año 67; la cual abandonaría luego, en 1975.

Por esto mismo de incorporar una pomposa sección de viento en este single de 1986, le criticaron a Peter Gabriel en alusión a que su ex-compañero en los propios Genesis, Phil Collins, ya lo había estado haciendo antes en varias canciones en solitario de este último como con, por ejemplo, “Sussudio” (1985); logrando, de ese modo, acceder a las radiofórmulas. Como respuesta a ésto, Gabriel negó la validez de estos altisonantes reproches y declaró que eso era más cosa de Collins que de él mismo. Lo anecdótico es que “Sledgehammer” le arrebató el nº1 en Estados Unidos al single “Invisible touch”, de Genesis y manifestó el mismo Phil Collins que no se enteró de esto mismo hasta muchos años más tarde pero que si hubiera poseído conocimiento de ello en aquel preciso instante de 1986, le hubiera enviado un telegrama a Gabriel que dijera: “Felicidades, bastardo”.

En definitiva, “Sledgehammer” se erige, sin duda, como uno de los descomunales singles con los que Peter Gabriel ha hecho historia, en solitario, dentro del pop-rock; como también lo logró cuando lanzó “Solsbury hill” (1977), “Biko”(1980), “Shock the monkey” (1982), “Big time” (1986), “Don’t give up” (1986) “Red Rain” (1987) , “Digging in the dirt” (1992), “Steam” (1993), “Kiss that frog” (1993); e infinidad más.

Recordemos que Peter Gabriel lanzará su nuevo álbum titulado i/o, a lo largo de este 2023; y del cual se han publicado ya tres sencillos.

Un comentario en «Singles Supremos: “Sledgehammer” de Peter Gabriel»

  • el 23 marzo, 2023 a las 9:37 pm
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    Fantástico y colosal artículo de Txus Iglesias. Un mito como Peter Gabriel merece una excelente exposición y sobre todo una excepcional mención a esta grandiosa canción y su videoclip el cual supuso un antes y después en la creación visual de la época.
    Más Singles Supremos como este.
    Bravo Txus y Bravo MZK.

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