Morrissey – Ringleader Of The Tormentors (PIAS)
Parece que Morrissey ha vuelto al redil. Ya no hay parones de siete años sin noticias suyas, y la regularidad, algo a lo que nos tenía acostumbrados desde que pusiera en marcha a los Smiths a principio de los 80, ha vuelto a la normalidad. Así, dos años después de su triunfal regreso con You Are The Quarry, nos llega Ringleader Of The Tormentors un trabajo que quizá no llegue a deslumbrarnos de la forma en que lo hizo su antecesor, pero que posee algunos momentos que pasarán a engrosar su particular lista para el recuerdo.
Grabado en Roma, en los estudios habituales del gran Ennio Morricone y con la producción de Tony Visconti (Bowie, T Rex), el nuevo disco de Mozz cuenta como principal novedad con la composición de Jesse Tobias en cinco de los temas, en detrimento de los fieles White/Boorer. El resultado ha sido un álbum más ecléctico y menos homogéneo de lo habitual, en el que recupera el glam de guitarras de Your Arsenal (92) y en el que podremos encontrar dos caras muy distintas de la misma moneda.
Por un lado, la energía con toques arábigos -más concebida para el directo que para otra cosa- de “I Will See You In Far Off Places”, un single resultón sin más (“You Have Killed Me”) o un par de piezas que podrían haber ido destinadas directamente a una cara B (“On The Streets I Ran”, “I Just Want To See The Boy Happy”) no terminan de enganchar del todo y en parte nos dejan fríos. Pero por otro, la calidad indiscutible de canciones como “Dear God Please Help Me” y su aura casi religiosa, arropada por los arreglos de Morricone, el trío de pop contundente que forman “The Youngest Was The Most Loved”, “In The Future When Alls Well” y “The Father Who Must Be Killed”, el pasaje desolador y absolutamente magistral de “Life Is A Pigsty”, la declaración de intenciones “Ill Never Be Anybodys Hero Now” o la romántica y arrebatadora “To Me You Are A Work Of Art”, dotan a su nuevo trabajo de la maestría a la que nos tiene acostumbrados.
Bienvenido de nuevo.