En el jardín: La sociedad de la nieve
Una de las frases que más me repiten mis amigos es: “Yo de mayor quiero ser como tú”, en referencia a mi manera de compaginar el trabajo con mi tiempo libre.
Yo siempre les respondo lo mismo: “Ya eres mayor”.
Los que ya hemos pasado del medio siglo y tenemos claro que en el reloj de arena de la vida hay más granitos en la parte inferior que en la superior, sabemos que el tiempo es oro, y para que reluzca, tenemos que disfrutar de la vida al máximo, lo que no os óbice para trabajar también como si no hubiera mañana.
¿Y cómo se hace?
Como decían en La Bola de Cristal: “Solo no puedes. Con AMIGOS sí”.
Empiezo mis celebraciones navideñas quedando para comer el jueves, 21 de diciembre, con mi AMIGO Miki Camacho, antiguo jefe de sala del Joy Eslava y la Sala Heineken y promotor curtido en mil batallas.
Nos citamos en “El Comunista”, afamado restaurante de la calle Augusto Figueroa, abierto desde 1890, y centro neurálgico de la “gauche divine” madrileña, si es que alguna vez eso existió.
Entro en el local con puntualidad suiza (14:00 hrs) y me encuentro a Miki ya sentado junto a Nacho López, un colega suyo realizador, Alberto García-Alix, y una chica que se sienta a su lado y que por lo visto también es fotógrafa.
LA SOCIEDAD DE LA NIEVE (en Madrid hace un frío que Curtis Mayfield), promete, así que me siento a la verita del Maestro Alix, al que conozco vagamente de La Vía Láctea, y de modo natural, los allí presentes empezamos a hablar de VIAJES, que es lo que nos une y nos representa.
Hablar de VIAJES es como volver a VIAJAR, puesto que cada uno rememora sus mejores momentos y los comparte con el resto como queriendo que todos los comensales hayan vivido sucesos parecidos a los suyos.
La INDIA es la principal protagonista, pues es el VIAJE INICIÁTICO que todo GOURMET de la vida debería hacer, y coincide que hemos estado todos.
Coincidencias, MY ASS.
Las mejores anécdotas son las de Miki, pues estuvo allí en los ochenta, y claro, era una INDIA aún mucho más PURA que la de 2024. Por aquél entonces no había apenas turistas occidentales y el bueno de Miki casi se queda encerrado en Goa por tener un visado a punto de caducar.
El Maestro Alix también tiene un sinfín de anécdotas en el país de Ghandi, y cuando llega el tema de las drogas, todos salivamos, pues sabemos que van a ser las historias más jugosas.
Como ya dije en mi anterior crónica: “Como ya no nos drogamos, hablamos de drogas, que es más divertido y mucho más sano”.
La amiga de Alberto, de cuyo nombre no puedo acordarme, nos dice que se va tres meses a hacer fotos a Rajastán, y yo me pregunto, querido lector:
¿Eso es trabajo o es placer?
Yo había quedado con Miki para pergeñar un ciclo de conciertos en el Autocine de Madrid del 15 al 30 de julio (SUMMER MAD), pero de pronto me he visto imbuido de ARTE y CULTURA en una comida que promete ser antológica (de la zarzuela de pescado que me voy a meter entre pecho y espalda).
¿Estoy currando o me lo estoy pasando de puta madre?
¿Por qué no se pueden hacer las dos cosas a la vez de modo natural? ¿Es tan difícil?
LO IMPOSIBLE no existe en mi vocabulario.
El tema de los viajes llega a su fin, como todo en la vida, y de pronto, no sé quién saca el tema de la HISTORIA del DESCUBRIMIENTO de AMÉRICA.
Probablemente fuera la amiga de Alix, que es argentina, y le encanta picar al fotógrafo más grande de este país con el rollo “colonial”.
Aquí, el que fuera cabeza visible de “El Canto de la Tripulación” y del “Mala Fama”, se desnuda en cuerpo y alma manifestándose como un HISTORIADOR a la altura de ANTONIO ESCOHOTADO. Su voz, tocada por una hipnótica afonía, nos encandila a todos, y por un momento dejamos de saborear las mejores lentejas de la capital y concentramos toda nuestra saliva en un “caer de baba torrencial”, que degusta sin parar las sabias palabras de Alberto García-Alix, EL POETA DE LA IMAGEN.
Entre el primer y el segundo plato, hacemos un pequeño parón para que los fumadores se den al único vicio que les queda, y yo me quedo solo en la mesa contestando emails de curro.
Antes de los postres se repite la operación y yo me quedo mascullando la que va a ser mi intervención “estelar” en esta preciosa comida de invierno. Les voy a leer mi crónica / homenaje a Almodóvar de viva voz.
Como también hemos hablado mucho de literatura, tengo la excusa perfecta para “hablar de mi libro”, y con ímpetu “umbraliano” les digo a mis colegas de mesa que presten atención porque tengo algo que leerles.
Además, les comento que me hace especial ilusión hacerlo delante de Alix y Miki, dos faros de Alejandría que me han servido de padres en EL ORFANATO de la vida cultural madrileña de los 80.
En el texto aparecen muchos de los amigos de ambos. Unos siguen existiendo, gracias a Dios, como Pedro Almodóvar (valga la redundancia), y otros se fueron ya, como Marcos López-Artigas (q.e.p.d), fundador de La Vía Láctea y, probablemente, el personaje de la crónica que más nos une a los allí presentes.
El texto es larguísimo (como este), así que a mitad de crónica, mis cuatro AMIGOS se van a fumar otro piti y yo sigo dándole a la tecla del móvil TRABAJANDO en día FESTIVO (todos mis días son una FIESTA, como el París de Hemingway).
Cuando vuelven, todos traen la sonrisa dibujada en el rostro, así que probablemente hayan estado hablando de mí, el tío más MODESTO de este país (léase como Rodríguez de la SORNA). Yo continúo con mi perorata, y al acabar, Alberto, que sigue a mi lado derecho degustando una tarta de manzana que ríete tú de la de La Mallorquina, me guiña un ojo y me dice que le ha encantado el escrito.
Le acabo de narrar el viaje de su VIDA resumido en tres folios y acaba de descubrir un NUEVO cómplice en el ARTE: Gerardo Cartón, para servirle.
¿Pero estamos trabajando o estamos currando, Alberto?
UN MONSTRUO VIENE A VERME, y se llama TRABAJO.
La expedición, que parecemos PARQUE (de atracciones) JURÁSICO, dejamos El Comunista, y nos dirigimos a algún café chulo y colorido de Chueca (que no es lo mismo que un chulo color-café de Chueca).
Llegamos al Válgame Dios, regentado por otro amigo de Miki, Santi Carbones (también capo del Carbones, 13 y de El Amante), que también es promotor y hace algunos de los mejores eventos de este país (googleénle, que yo llevo ya cuatro folios escritos y esto no es una bilbioteca).
España es el país que mejor sabe combinar el trabajo con el placer. Nos divertimos trabajando y trabajamos divirtiéndonos, así que, amigo lector, si quieres ser como yo, vuelve a ver La Bola de Cristal (going back to my roots) y repite en voz alta:
“Sólo no puedes. Con AMIGOS sí”
Texto dedicado a JA BAYONA, el tercer mejor director de este país después de Pedro Almodóvar y Alex de la Iglesia.
Lee todas las entregas de En el jardín de Gerardo Cartón.
Gerardo Cartón es una agitador de la escena musical española. Lo más probable es que estos últimos 20 años os hayáis cruzado con su nombre en algún lado, bien en alguna de sus sesiones como el chico biónico, como 2PIASdjs, con alguno de sus podcasts o en algún que otro concierto o festival. Él es uno de esos tipos de la industria que han estado en todos los frentes. Dirigiendo el sello [PIAS] en España en su momento más exitoso, tocando en bandas como Micromachines o escribiendo libros tan divertidos como los dos volúmenes del Manual del Perfecto Festivalero o Así se baila el siglo XX (Muzikalia).