The Posies
Darnos el espacio necesario para ser nosotros mismos es la clave para estar en la banda desde hace mucho tiempo
Ken Strigfellow y Jon Auer reclutan a antiguos miembros de The Posies para girar por nuestro país estos días interpretando, con sus respectivas formaciones originales y de manera íntegra, los dos discos más alabados de su carrera: «Frosting On The Beater» (93) y «Amazing Disgrace» (96).
Aprovechamos la ocasión para entrevistar, por separado y en base a las mismas preguntas, a los dos líderes de la mítica banda de Seattle, en una circunstancia que, dado el carácter sincero de ambos, tiene como resultado un documento excepcionalmente interesante.
Una entrevista que capta con detalle la percepción de ambos artistas (y el propio contraste entre ellos) acerca de presente, pasado y futuro de la formación norteamericana, su discografía o la escena musical… además de indagar en la personal y en ocasiones tensa relación existente entre los dos músicos.
Puedes leer ambas conversaciones de manera íntegra a continuación.
Comencemos por el principio: vais a girar interpretando al completo «Frosting On The Beater» (93) y «Amazing Disgrace» (96)… ¿Cómo, cuándo y por qué surge este posibilidad?
Ken: Sí, vamos a tocar los dos discos y con las diferentes secciones rítmicas que tocaron en su momento en cada álbum: el bajista Dave Fox y el baterista Mike Musburger que tocaron en «Frosting On The Beater», y el bajista Joe Skyward y el batería Brian Young que grabaron «Amazing Disgrace». Estuve hablando con Jaime de Houston Party sobre este tema durante el último año. Él quería hacer algo con The Posies con motivo del quince aniversario de Houston Party, como ya sucediese en el décimo aniversario en el que giramos tocando «Frosting On The Beater». No queríamos repetir exactamente lo mismo, aunque parecía apropiado hacer algo «histórico» y esto fue lo que le propuse. No hemos tocado con estos músicos desde hace mucho tiempo… por ejemplo Dave no ha estado en España con nosotros desde 1993.
Jon: La idea surge de Jaime Hernández de Houston Party. Creo que fue él quien sugirió la idea y pensamos que la cosa sonaba bien. Ken compartió conmigo la propuesta de Jaime cuando ambos estábamos en México el pasado enero para tocar en el Todos Santos Music Festival organizado por Peter Buck.
¿Fue difícil convencer a los antiguos miembros?
Ken: No fue difícil en absoluto, están muy contentos de volver a tocar en España.
Jon: Desde el principio la premisa fue que sólo se llevaría a cabo si era con todos los miembros originales. Eso es lo que hace que esta gira sea realmente especial: son las personas que realmente tocaron en esos discos y ahora vamos a tocar juntos esas mismas canciones después de muchos años separados ¡Qué movida! (Risas) Nuestros ex compañeros respondieron muy favorablemente a la idea. Todo el mundo quería participar.
¿El repertorio de los conciertos incluirá algún añadido además de las canciones de ambos discos?
Ken: Pues, por ejemplo, tocaremos la versión europea completa de «Amazing Disgrace», que tiene catorce temas. Y probablemente también haremos algunas canciones de otros discos.
Jon: Estoy seguro de que habrá añadidos. Algunos ya los hemos planeado, pero tal vez exista la posibilidad de incluir alguna canción sorpresa o también podríamos aprendernos alguna una vez que estemos de gira y tocarla. Tendremos que esperar a ver…
Hace unos años ya hicisteis algo parecido versionando al completo «A Catholic Education» (90) de Teenage Fanclub ¿Por qué os decidisteis por ese disco? ¿Cómo recordáis la experiencia? ¿Qué tal funcionaron esos conciertos?
Ken: Ese disco fue muy importante para nosotros. En realidad lo escuchamos prácticamente a diario durante la gira americana de «Dear 23» (90). La mezcla de dulzura melódica y sensibilidad punk-rock junto a pop clásico de guitarras realmente allanó el camino para lo que haríamos en nuestro siguiente disco, «Frosting On The Beater». No fue ninguna casualidad que eligiésemos trabajar con Don Fleming en ese disco: él acababa de hacer «Bandwagonesque» (91) con Teenage Fanclub.
Jon: Fue otra sugerencia de Jaime Hernández. Fue idea suya… otra buena. Es uno de nuestros discos favoritos de principios de los 90, y solíamos escucharlo en la furgoneta cuando giramos por primera vez por Estados Unidos. Tocar «Everybody´s Fool» and «Every Picture That I Paint» noche tras noche fue muy divertido. Y nos encima nos pagaban por ello… wow!
¿Cómo recuerdas la grabaciones de «Frosting On The Beater» (93) y «Amazing Disgrace» (96) respectivamente?
Ken: Bueno, «Frosting On The Beater» ocurrió en tres partes: primero tuvo lugar una sesión inicial a modo de «periodo de prueba» para ver si nos gustaba trabajar con Don, que resultó ser absolutamente acertado y divertido, además de producir algunas de las mejores partes del álbum («Burn & Shine», «Solar Sister», etc.). Luego fuimos a Nueva York para grabar con Don en su propio terreno. Esa fue una sesión muy oscura y difícil. Tuvimos un montón de problemas técnicos, otros emocionales, etc. Hicimos algunas cosas, pero todo en esta sesión fue complicado por alguna razón. Y finalmente volvimos a Seattle a finales de año, de nuevo con Don, para hacer algunas canciones más y es donde de nuevo surgieron algunas partes importantes del disco, como «Dream All Day» y «Flavor Of The Month». Dave Fox realmente entró sólo para las últimas sesiones, porque para las dos primeras aún no habíamos contratado a un nuevo bajista. Nuestro primer bajista Rick Roberts renunció porque no queríamos grabar sus canciones al igual que hacíamos con las de Jon y las mías. Para ser justos hay que decir que lo intentamos en otra sesión en 1991, en la que tratamos de hacer un disco rápido y sucio con nuestro ingeniero de sonido en los conciertos (quien había grabado algunas cosas con Nirvana, así que sabía lo que estaba haciendo). Se grabaron tres de las canciones de Rick, pero siendo sincero diré que no estaban al nivel de lo que estábamos haciendo Jon y yo, y ciertamente no encajaba en nuestro estilo. Él nos dio un ultimátum y lo mantuvo. Nuestra faceta artística era más importante que sus sentimientos en ese momento. Y no me arrepiento de ello. Por lo tanto, las sesiones para «Frosting On The Beater» fueron difíciles. También tuvimos un ingeniero de mezclas, John Hanlon, que estaba pasando por una época complicada, por lo que de las primeras sesiones de mezcla en Los Ángeles sólo salieron dos canciones («Buzones Love» y «Burn & Shine», si no recuerdo mal…). Tuvimos que despedirlo. Y tardamos un tiempo en encontrar a David Bianco, que mezcló el resto del álbum e hizo un trabajo maravilloso.
En «Amazing Disgrace» nos decantamos por Nick Launay, que había trabajado en una maravillosa variedad de discos que iban de XTC a The Birthday Party y de Midnight Oil a PiL. Tiene una mente experimental y muy musical. Con él hicimos una sesión larga: meses y meses de grabación y mezcla en Seattle. Le presentamos un desafío técnico, hasta el punto de que insistió en trabajar con consolas de mezclas SSL completamente automatizadas, pero fuimos a unos estudios en los que tenían consolas API vintage no automatizadas. En ese momento casi se negó a hacer el disco, pero nos mantuvimos firmes en nuestra decisión y teníamos un gran presupuesto… y él todavía no estaba en su época dorada (ahora trabaja con Yeah Yeah Yeahs o Nick Cave), así que al final aceptó. ¿Y sabes una cosa? Ahora él SÓLO trabaja con API. Pero después de tres meses estaba quemado. Necesitaba volver a casa (Australia en ese momento). Así que nos quedamos con el 85% de un álbum. Un muy buen disco, en todo caso. Entonces tuvimos que buscar a otra gente para terminarlo. Keith Cleversley (Flaming Lips, Hum, etc.) llegó a Seattle, hizo algo de la grabación y de la mezcla… ¡y quiso volver a grabar la batería en la mayoría de las canciones! Empleamos mucho tiempo en eso: recuerda que la grabación era analógica y no ProTools, así que hacer esto implicaba mucho riesgo. Jon también mezcló él mismo parte del álbum. También grabamos y mezclamos un poco con Steve Fisk. Por último necesitamos algo realmente profesional, alguna mezcla apta para la radio, porque queríamos dar a los singles «Ontario» y «Please Return It» un aspecto perfecto, así que contactamos con Brett Eliason, que es muy conocido como ingeniero de Pearl Jam y también estuvo de gira con R.E.M. como responsable de su sonido en directo. Es un gran tipo e hizo un trabajo maravilloso con los singles. Una vez más, fue un proceso largo y muy intenso, pero lo conseguimos.
Jon: Sinceramente, ambos discos nos llevaron mucho tiempo, pero no todo el tiempo estuvimos en el estudio… Para «Frosting On The Beater» seleccionamos canciones durante un largo período de tiempo, luego hubo varias sesiones de grabación y también un par de sesiones diferentes para las mezclas. Trabajamos un poco en Los Ángeles y Nueva York, así como en Seattle. «Amazing Disgrace» se hizo básicamente en Seattle, y fue un proceso largo porque las mezclas duraron una eternidad y tuvimos que tener a unas cuantas personas diferentes al cargo (incluido yo mismo) y trabajando en él para poder terminarlo adecuadamente.
Con la perspectiva que da el paso del tiempo… ¿Cómo percibes ahora ambos discos? ¿Cambiaríais algo al respecto?
Ken: Actualmente encuentro que «Amazing Disgrace» es más divertido a la hora de escucharlo, es un poco más aventurero y creo que está mejor escrito. Pero entiendo que «Frosting On The Beater» es un disco muy eficiente y amable, y técnicamente es perfecto para el oyente. Me gustan los dos y no me arrepiento de nada.
Jon: En realidad no cambiaría nada. Para mí ambos han aguantado bien el paso del tiempo. Hay un par de canciones que dejamos fuera de la edición americana de «Amazing Disgrace»: «Terrorized» y «Sad To Be Aware» que, quizás ahora con perspectiva, deberíamos haber incluido en el disco. Al menos «Terrorized» está en la edición europea…
En tu opinión… ¿Cuáles son las principales diferencias entre los dos discos? ¿Qué aportó cada disco a la carrera de The Posies?
Ken: Bueno, «Frosting On The Beater» fue el primer disco que grabamos después de haber hecho algunas giras serias, así que reflejó bastante bien nuestro sonido en directo. Por su parte «Amazing Disgrace» fue el álbum que siguió a un disco de éxito y con una banda aun mejor en directo, así que muestra a un grupo más confiado y que asume más riesgos. Ambos discos fueron exitosos, al menos hasta cierto punto, y «Amazing Disgrace» lo logró sobre todo en Europa. Realmente ganamos muchos seguidores con esos discos. Presentando nuestro segundo disco «Dear 23» en nuestra primera gira americana conseguimos tocar ocasionalmente en clubs llenos, incluso en algunos teatros, e hicimos una gira por Europa como teloneros, pero no llegamos a grandes festivales. «Amazing Disgrace» nos llevó a tocar a sitios aún más grandes en los EE.UU., y también a salas mayores y festivales más importantes en Europa, como el escenario principal de Reading y cosas así.
Jon: «Frosting On The Beater» es un disco más ágil, muy básico en muchos aspectos. Por su parte «Amazing Disgrace» es más diverso, incluso más experimental. Para mí «Amazing Disgrace » es también un disco muy «enfadado». Realmente puedes sentir lo furiosos que estábamos por algunas cosas que habían ocurrido en nuestras vidas después de publicar «Frosting On The Beater» y su posterior gira promocional. «Frosting On The Beater» fue el disco que realmente nos introdujo en Europa, y además el más vendido en los EE.UU., pero «Amazing Disgrace» también funcionó muy bien en Europa y ayudó a que nuestra reputación creciese positivamente.
En cualquier caso, ambos discos están considerados por la mayoría de fans de The Posies como las mejores obras del grupo ¿Estás de acuerdo? ¿Cuál es el mejor elepé de The Posies en tu opinión y por qué?
Ken: Estos discos son como marcas de agua, eso seguro. Pero yo diría que en términos de creatividad y composición de las canciones, nuestro último disco «Blood / Candy» (10) es tan bueno como esos álbumes. Y más interesante para ser escuchado… Si la gente le diese una oportunidad y lo probase, quedaría gratamente sorprendida.
Jon: He de decir que tengo una lista personal con «Los Mejores Tres Discos de The Posies» y que, tanto «Frosting On The Beater» como «Amazing Disgrace» están en ella, junto con nuestro disco anterior «Blood / Candy». Es difícil elegir un favorito de entre de los favoritos: los tres me gustan por diferentes razones y en diferentes momentos.
¿Cómo es compartir banda con la misma persona durante veinticinco años? ¿En qué momento se encuentra tu relación con Jon Auer/Ken Strigfellow?
Ken: Bueno, en realidad durante los últimos quince años hemos estado más tiempo separados que juntos… durante los diez primeros años todo fue mucho más conjunto. Yo diría que, por necesidad, he estado la mayor parte de mi vida musical y extramusical fuera de la banda. Pero está bien probar a ver qué pasa de vez en cuando. Con este espaciamiento todo va bien. Hay veces que estoy enfadado con Jon por cosas del pasado, incluso por cosas del pasado reciente. No soy una persona tan fácil como debería con respecto al perdón, pero lo intento y afrontó cada día como un nuevo día. ¿Prefiero trabajar por mi cuenta? Por supuesto ¿Hay algo grande y mágico en trabajar con los Posies? Por supuesto.
Jon: Sinceramente, en este momento Ken y yo estamos siempre tan ocupados que las únicas veces en las que realmente nos vemos durante períodos largos de tiempo es cuando trabajamos juntos. Cuando lo hacemos sabemos cómo dar al otro el espacio necesario para ser nosotros mismos, y ésa es la clave para estar en la banda desde hace mucho tiempo. No siempre tuvimos ese espacio y creo que eso a largo plazo no fue positivo. Sin embargo nos conocemos el uno al otro desde hace muchos, muchos años, así que hay momentos en los que podemos hablar el uno con el otro muy profundamente, de la manera en que sólo las personas que tienen unas largas historias conjuntas son capaces de hacer. Y a veces también podemos reírnos de chorradas y chistes estúpidos que sólo él y yo entendemos… y eso puede ser muy divertido.
¿Os sentís como unas de las bandas claves del indie-rock y el power-pop norteamericano de los 90?
Ken: Si pensase así sería inevitablemente un imbécil. Pero sí que creo que tuvimos cierta influencia, especialmente en Seattle. Hicimos música sensible, acústica y pop literario en los 90, cuando la música era ruidosa, nihilista y primaria. Diez años más tarde empezamos a ver a bandas como Death Cab for Cutie, The Long Winters y cosas así que eran… sensibles, acústicas y literarias. No es una coincidencia. En realidad éramos más de esa generación de lo que lo fue el grunge. Sencillamente llegamos primero. Pero las bandas clásicas de Seattle (Pearl Jam, Alice In Chains, Mudhoney, Soundgarden…) son varios años mayores que nosotros. Éramos REALMENTE jóvenes cuando empezamos, sólo adolescentes, así que estábamos más cerca de lo que vendría después, si es que eso tiene sentido.
Jon: Puede ser. Nunca soy muy bueno juzgando este tipo de cosas, pero parece que tuvimos un impacto y dejamos una influencia. En casi todas las partes a las que voy me encuentro con alguien a quien le gustan The Posies, incluso en lugares inesperados.
¿Cómo ha cambiado la industria musical desde entonces? ¿Qué echas de menos de la época gloriosa de The Posies?
Ken: Todo está más fragmentado, hay muchas más formas y también más tecnología para hacer las cosas por cuenta propia. El poder está descentralizado, mientas que antes las grandes discográficas eran el único camino a seguir si querías tener éxito. Ahora hay más maneras de conseguir llegar al público siguiendo tu propio camino. No echo de menos nada de aquellos tiempos. Yo ya los viví y los disfruté, al menos en su mayor parte. Ahora nos encontramos en una nueva época y es muy emocionante estar aquí en este momento.
Jon: Te pagaban más por tocar y había mucho más dinero para grabar, eso seguro… había grandes presupuestos para la grabación. MUCHÍSIMO MÁS. A veces echo de menos eso.
¿Y qué dirías que es mejor y qué peor en la actualidad con respecto a esa época dorada del grupo?
Ken: No veo las cosas de esa manera. El pasado no fue una época dorada para mí. Cualquier tiempo es igual de bueno para mí.
Jon: Como comentaba antes, hay lugares en los que pudimos trabajar, estudios en los que hicimos música… y todo fue posible gracias a los grandes presupuestos. Aquellos que ahora ya no existen. Al menos no para nosotros…
Quizás no para ti pero… ¿Crees que existe cierta nostalgia hacia los 90, tanto desde un punto de vista artístico como social? Y de ser así… ¿Cuáles podrían ser los motivos?
Ken: Yo no lo veo demasiado. Con el tiempo se coge perspectiva de las cosas, y luego está la curiosidad de los más jóvenes por entender el pasado. Por el momento no percibo una enorme ola de nostalgia hacia los 90. Parece que la música está viviendo un revival de los años 80. Diría que sobre todo del synth pop de los 80 y del sello 4AD, de donde aún hoy se copian muchos elementos en la música. Me aburre un poco. Me gusta inventar cosas, no rehacerlas.
Ya hace tres años desde «Blood/Candy» (10), el último disco hasta la fecha de The Posies que antes mencionabas, en lo que incuestionablemente fue un buen disco ¿Estáis trabajando en nuevo material? ¿Para cuándo un nuevo disco de The Posies?
Ken: Por el momento no tenemos planes ni nuevo material. No hemos tocado en directo juntos en dos años así que… no tengo ni idea de en qué punto están las cosas. Será interesante ver si este tiempo que pasemos juntos desembocará en entusiasmo por hacer un nuevo disco, pero no puedo garantizar que ése vaya a ser el caso.
Jon: Ahora no puedo decirte que tengamos nuevo material, pero sería bonito que pasase en algún momento. Creo que «Blood / Candy» es una de las mejores cosas que he hecho, y algunas de esas canciones son LO MEJOR que hemos hecho, así que sería interesante tratar de hacer un disco aun mejor y más aventurero en el futuro. Mientras tanto vamos a reeditar nuestros discos anteriores en formato de lujo, incluyendo «Frosting On The Beater» y «Amazing Disgrace».
¿Cómo compaginas la actividad en The Posies con tu carrera en solitario, las diferentes colaboraciones con otras bandas o tu faceta como productor?
Ken: En realidad The Posies no han hecho nada desde hace un par de años, así que no es tan difícil. Sigo muy ocupado y haciendo muchas cosas… para mí vivir intensamente, trabajando en discos cada día y tocando en directo, es la manera de sentirme lo más vivo posible.
Jon: En realidad es muy fácil: sólo hacemos cosas con The Posies cuando realmente las sentimos, como ahora. Tan simple como eso. Además de The Posies los dos tenemos muchas, muchas otras cosas que están pasando en nuestras vidas, y eso es bueno. Mi principal objetivo en este momento es terminar el disco de un nuevo proyecto en formato dúo que se llama Dynamo Royale. Actualmente, cuando no estoy tocando en directo ni produciendo o mezclando discos de otros artistas, eso me ocupa la mayor parte del tiempo.
Gracias de nuevo y suerte con la gira.
Ken: Gracias. Nos vemos pronto.
Jon: ¡Gracias!