Broken Social Scene
Hemos perdido la inocencia
Broken Social Scene hacen bueno aquel dicho de ”donde comen dos comen tres” sólo que ellos lo amplían hasta diecisiete. Y es que hasta un total de diecisiete músicos han participado en el tercer homónimo trabajo de un proyecto cuyo núcleo central está formado por Kevin Drew y Brendan Canning. Con ambos departimos en Barcelona sobre su singular proyecto.
La última vez que os vimos por aquí fue durante el Primavera Sound, en el mes de mayo. ¿Qué tal os fue?
(Brendan): Pues estuvo muy bien, compartimos escenario con grandes bandas como Iggy Pop & The Stooges, New Order, Human League… Aunque hemos visitado España unas cuantas veces, en gira y en otro festival, el AV en Málaga.
Desde luego, no se puede afirmar que seáis una banda tradicional. A partir de una base de dos miembros, podéis llegar a ser 17 personas tocando juntas. ¿Es muy difícil el trabajo?
(B): La verdad es que es bastante difícil, y en ocasiones, muy duro.
(Kevin): No creo que sea tan difícil! (Risas). Trabajamos con gente con la que llevamos en el grupo desde hace varios años. A estas alturas, nos entendemos bastante bien, y todos los miembros son siempre bienvenidos, cuando están disponibles. Muchos de ellos están en otras formaciones, y no siempre cuentan con suficiente tiempo (The Stars, Feist, Do May Say Think, Apostle of Hustle). Por eso no resulta fácil ponerse de acuerdo a la hora de escribir canciones, no todos nos podemos implicar de la misma manera si ya tenemos otros compromisos.
Aceptáis las colaboraciones de los miembros externos a la banda cuando estáis componiendo?
(K): Aceptamos las colaboraciones de cualquier persona que tenga algo que aportar.
(B): Nos gusta ir probando con las aportaciones que nos pueden hacer, y Dave Newfield, nuestro productor, nos echa una mano a la hora de dar el toque final a los temas. Se convirtió en el capitán de toda la operación, y era el que decidía quién entraba y cuándo, con un gran criterio. Además se portó de forma diplomática durante todo el proceso, con la idea de que escucháramos a todo el mundo. Algunas veces nos preguntábamos cómo podían estar pasando tantas cosas a la vez, pero cuando tocábamos todos juntos y veíamos que todo encajaba, sabíamos que era porque él se había encargado de que cada uno estuviéramos en nuestro sitio.
¿Cómo es una grabación de Broken Social Scene?
(B): No creo que nadie haga discos de la manera en que nosotros los hacemos. En el estudio, es imposible que diecisiete personas trabajen juntas. Como mucho, tres, porque es un lugar bastante pequeño, sin ventanas. Trabajar toda la banda junta, como se suele hacer, no va con nosotros, por los horarios, la gente…
(K): Hemos estado grabando durante mucho tiempo, debido a nuestros compromisos. Después de estar en el estudio durante unos días, hemos estado dos meses fuera, y al volver nuestra opinión ha cambiado completamente sobre lo que hemos hecho. Un día, una cosa te puede parecer increíble, y al siguiente, puede haber cambiado completamente. Somos mucha gente muy diferente, con opiniones también muy diferentes, y si no estabas allí mientras estaba pasando algo, puede que no seas muy objetivo, o al contrario, serlo demasiado.
(B): Cuando compones un disco, tienes que sentirte parte de él, no puedes sentirte aislado. Y esto pasa mucho en nuestro disco, nos sentimos parte de él. Newfield trabajó muy duro en el disco. Si paraba, era porque realmente estaba muy cansado. Me encantaría poder tener el álbum que hubiéramos hecho hace un año. Durante este último año, parece como si nos hubiera estado guiando un conductor borracho. No teníamos claro donde íbamos
Y quizás las expectativas que el público tenía en vuestro siguiente álbum os pudieron afectar de alguna manera, ¿no?
(K): No creo que pensáramos en eso mientras estábamos preparando el disco…
(B): Lo cierto es que no ha habido ningún equipo de marketing que nos haya presionado ni nada por el estilo. Estoy contento del resultado de este disco. No es tan fluido como You forgot it people. Este disco ya lo hicimos, y de momento no queremos repetirlo. Queríamos hacer un álbum dislocado e incómodo. No tuvimos tiempo de parar y pensar en la masterización, el secuenciado. Me gusta la idea de que está muy saturado o sobreproducido, que parece que no fluye, pero en ocasiones sí lo hace. No he conocido a nadie a quien le haya gustado tras la primera escucha. Era importante para nosotros sacar este disco en este momento. Se suponía que iba a ser nuestro gran álbum, nuestra gran oportunidad, y que teníamos que hacer las cosas bien, y lo que te encuentras es que hay mucha batería, muchas guitarras, voces rugosas…
(K): Para nosotros es muy importante disfrutar, pasarlo bien. Intentamos crecer, y en este disco lo que hemos hecho ha sido redefinir un poco nuestro sonido. Estábamos bastante interesados en hacer ruido, en redefinir nuestras coordenadas dentro de la música pop.
¿Consideráis éste como vuestro álbum más maduro? ¿O con un sonido más sofisticado?
(B): Creo que en este álbum hemos perdido la inocencia que teníamos cuando grabamos You forgot it in people. Estábamos muy ilusionados con ese álbum y queríamos compartirlo con todos nuestros amigos. Pero es una sensación que no se puede repetir. Se puede decir que es más maduro porque ya hace más de dos años que somos un grupo profesional (cosa que no deja de ser ridícula, añade Kevin). Y que hemos pasado muchas noches apasionantes sin dormir.
Cuando te ganas la vida con una canción, la música te cambia. Por eso estoy muy orgulloso del disco. Podríamos haber cogido la vía del dinero y portarnos mejor… Pero eso sólo consigue hacer un disco que la gente olvidará en un año. Queríamos hacer un álbum que durara, que fuera diferente, sobre el que la gente pudiera hablar. Es importante que de tanto en tanto encuentres un disco que te vaya gustando con el tiempo. No me interesa la gratificación instantánea porque al final no perdura. Y lo que buscamos es algo a largo plazo.
Parece que las sesiones de la grabación han sido muy productivas, ya que habéis necesitado en esta ocasión dos discos para incluir buena parte del material que habéis grabado.
(B): Grabamos muchas canciones. Nuestro sello, Arts & Crafts, nos propusieron incluir algo más en el cd, porque hay tantísimas bandas ahora que sería una buena manera de que la gente se interesara más por el disco.
(K): Tenemos mucho material, si estamos en un estudio en el que nos sentimos cómodos, y en el que trabajamos bien, los temas van saliendo. Y queríamos aprovechar este material, podríamos incluso haber sacado dos discos más. Cuando hay tanta gente trabajando junta es normal que salgan tantas cosas. Tenemos tantas grabaciones que nos gustaría sacar otro álbum para el verano del año que viene.
Para este trabajo, habéis contado nuevamente con la producción de Dave Newfield. ¿Se puede decir que es también una parte importante de la banda?
(K): Éste es en buena parte su disco.
(B): Él ha sido el que siempre ha tomado las decisiones, el que ha solucionado los problemas, se ha involucrado como un miembro más de la banda, era el que afrontaba las dificultados… de hecho, ha dejado de hacer muchas cosas por este trabajo. Es un gran productor, reconozco que le ha resultado muy duro trabajar con una banda como nosotros. Trataba a todo el mundo por igual, intentaba que todos nos sintiéramos igual de involucrados en el trabajo. Hicimos el anterior trabajo con él y fue muy bien, ¿por qué cambiar? Son en gran medida sus canciones, es su sonido. Es un miembro más de la banda, y no sólo eso, sino que es un miembro clave.
Hay gente que prefiere vuestros directos a vuestros discos. ¿Pensáis en el directo cuando estáis en el estudio de grabación?
(K): Cuando damos con el sonido que buscamos en el estudio, no pensamos en cómo lo haremos para que suene exactamente igual en el escenario. Cuando tocamos en directo, interpretamos nuestros temas lo mejor que podemos, muchas veces intentando olvidar lo que ya tenemos grabado, para que suene más fresco.
¿Por qué el título del álbum?
(B): Así, puedes titularlo como tú quieras. Al final, el disco trata de nosotros, de tres años de ir y venir, algo heridos, algo alegres. Decidimos dejarlo sin título porque no teníamos ninguno que nos gustara a todos. Pensamos que era muy personal basarlo todo en América, y llamarlo Windsurfing nation. Después pensamos que era demasiado dramático llamarlo It’s all gonna break, y se nos ocurrió Adventures in fear. Ahora tú puedes titularlo como prefieras. Tienes tu espacio para la creatividad en el cd.