Emilio Elegante y Los Disparos (Sala Rock-Ola) Madrid 05-05-18
Entradas casi agotadas para ver el concierto de presentación del single, editado por Subterfuge Records, de Emilio Elegante y Los Disparos. La renovada sala Rock-Ola, era, por segunda vez la encargada de acoger la feliz unión entre el cuarteto madrileño y el que fuera líder de Los Elegantes.
No es ningún secreto, Los Elegantes desaparecieron sin decir ni adiós dejando atrás mucho más que un cancionero atemporal a prueba de bombas. Una carrera truncada, destinada a convertirse en clásicos del rock & roll nacional o un nutrido grupo de fans, también toda una época. Cuando parecía que nunca más íbamos a volver a disfrutar de esas canciones en directo y lo que es mejor, del valor compositivo de Emilio J. López; llega Felipe Correa, de Los Disparos y le convence para que vuelva a colgarse la guitarra. Nos lo contaban los dos en esta entrevista.
El que conozca bien a Emilio, sabrá que no es un tipo al que le guste vivir de las rentas, que bien podría haber vuelto a tocar los clásicos y todos tan contentos. Pero no, ha preferido embarcarse en una aventura que parece tener continuidad (se espera un próximo EP) en la que las nuevas canciones, firmadas por Felipe y él, son auténticas píldoras de pop con más influencia “sixtie” que en los propios Elegantes y una indudable ascendencia soul.
Puede que la mayoría de los presentes en la sala Rock-Ola, hubieran ido por el Elegante, pero lo cierto es que: David (bajo), Oscar (batería), Miguel (voz) y Felipe (guitarra), conocidos por Los Disparos, dieron una primera parte de concierto impecable, repasando sus EPs y algunos temas que no tienen grabados -ocho en total-, entre los que destacaron: “Héroes de barrio”, “En las calles de tu ciudad”, “Luego estás tú” o su dos hits indiscutibles “Cinco balas” e “Historias mínimas”. Canciones que sin duda, nos metieron en un gozoso ejercicio de “flashback”, recordándonos a bandas tan queridas como Telegrama, Escándalos, Canguros o Los Agentes Secretos. Puro revival del revival, sin quitar los pies del suelo actual ni la mirada del camino presente.
Precisamente fue “Historias mínimas” la que dio paso al primer tema de Los Elegantes, “Apunten y fuego”, que comenzaría a cantar Miguel, para acabar uniéndose el propio Emilio, encendiendo la mecha de lo que vendría después. “Me debo marchar”, un clásico básico de Los Elegantes, incluido en su primer disco. Casi un himno de la parroquia mod madrileña de los ochenta, por lo que cuentan las crónicas de la época. La maquinaria de Los Disparos casa perfectamente con el “modfather” madrileño, eso no hay quien lo discuta y se notó en el resto del corto concierto.
Entre anécdotas de la época y agradecimientos, Emilio dio paso al primer tema del single “Pájaros en la cabeza”, muy sesentero que recuerda a grupos como Los Ángeles y de impecable ejecución también. “Tiempo perdido” y la versión de los Who, cuando ni siquiera se llamaban The Who; “Mangas cortas”, ambas del primer L.P de Los Elegantes, propiciaron: saltos y lágrimas de emoción, a partes iguales, entre un público mayoritariamente atraído por el recuerdo de aquellos años. “Dos minutos y un segundo” es el otro tema del citado single, otra nueva canción que nos devuelve a un Emilio en estado de gracia compositivo, en el tándem que completa Felipe.
Llegaba el final con un momento que recordaremos siempre, “En la calle del ritmo”, con un emotivo recuerdo por parte de Emilio a los diferentes grupos mods de Madrid y cercanías de los ochenta. Aunque el concierto no tuvo ni una trampa, Emilio y Los Disparos se guardaron un as ganador en la manga y arrancaron para finalizar con “Dos años atrás”, otro de esos momentos para enmarcar.
No era cuestión de dejar que esos cinco se bajasen del escenario, o eso debieron pensar los fans más aguerridos que estaban por primera fila y prácticamente obligaron a que la fiesta continuase con dos temas que no estaban incluidos en el repertorio, ni habían ensayado. Por una parte “Todo lo que quiero”, canción aun inédita, muy bailable y con aires muy soul y la versión del clásico de Richard Berry, «Louie Louie», que los Elegantes hicieron suya como “Luisa se va”.
Una noche memorable. Ya lo dijo Lemmy: “O eres de los del Louie Louie o eres de los otros”. Emilio y los Disparos son de los nuestros.