God is an astronaut + El altar del Holocausto – Sala Arena (Madrid)
Tras las recientes giras de Russian Circles y Mono por nuestras latitudes, tocaba el turno de nuestra tercera cita inexcusable con el mejor rock instrumental contemporáneo, la que nos reuniría, una vez más, con God is an Astronaut a su paso por Madrid.
La fórmula de los irlandeses es tremendamente efectiva y solvente; lejos de ejercicios recargados o de exhibiciones magistrales, la banda tira de recursos epiteliales que son pura energía, entrega y abnegación.
Esta vez, sin embargo, no estuvimos precisamente ante su mejor concierto. Un inicio algo desenfocado y opaco con «Reverse World» y «The End of the Beginning», pequeños parones y ajustes de sonido y, sobre todo, una actitud estúpidamente protagonista y narcisista de su fichaje hace tres años Jamie Dean, restaron puntos a un cancionero y formas que disponen de todas las capacidades para imponerse en circunstancias normales a este conjunto de contrariedades.
También es cierto que, pese a las virtudes de un cancionero deslumbrante, la capacidad de sorpresa tras las cuatro veces que les he disfrutado en directo, unido a una extraña sensación de frialdad que siempre acompaña los shows que he presenciado en la sala Arena, fueron otros contratiempos que restaron puntos a la banda.
Aun así, la gran sorpresa y motivo de expectación fue lo bien que sonaron los nuevos temas pertenecientes a su inminente lanzamiento Helios / Erebus, más metálicos y contundentes que nunca. Se presume algo así como un disco reacción a la bonita instrospección vaporosa del incomprendido y fabuloso Origins (13).
Fueron algunos de su temas como «The last march» o esa barbaridad llamada «Red moon lagoon» de los que mejor sonaron esa noche en la capital, junto al enlazado de la bella «Fragile» y la inapelable rotundidad de «Echoes».
Lógicamente, el grueso del tramo final se centró en los clásicos de su obra magna, All is violence, all is bright (05), destacando la bestial intensidad de «Suicide by a star» cerrando el show.
Antes, El Altar del Holocausto hicieron una demostración entregada y diestra de su doom/sludge metal instrumental, mezclando pasajes pesadísimos con destellos preciosistas post rock; algo derivativos y con un protagonismo mayor de contenido que de continente, hicieron, al menos, que tengamos el ojo puesto en los salmantinos ante futuros movimientos y nos lancemos a la escucha de su reciente álbum S H ? (15).