Greg Ashley – Medicine Fuck Dream (Birdman Records)
Medicine Fuck Dream es el primer disco en solitario de Greg Ashley, líder de The Gris Gris, y comienza con un inquietante prólogo de risas femeninas y free-jazz. Y de un modo extraño aunque extrañamente coherente, la introducción deja paso a “Karen Loves Candy”, una balada de ritmo solemne en la que piano y violín intentan alcanzarse a cámara lenta y en la que Ashley canta con voz particularmente trémula unos versos perdidos de la generación beat: “and lady lady lady lady lungs / lipstick sticks thick lips and tongue”.
Al igual que ésta, las nueve canciones restantes hablan de amor, sexo, soledad y muerte, usando la baja fidelidad y el stream-of-conciousness para crear una atmósfera densa y ominosa. La voz de Greg Ashley, simultáneamente ingenua y provocativa, permanece a lo largo de todo el disco envuelta en una espesa nube de opio, apenas despertando en “Apple Pie And Genocide”, un macabro psychobilly que parece sacado del repertorio del primer Nick Cave.
Las referencias a la psicodelia de los 60 son inevitables, pero la personal visión de Greg Ashley ahonda igualmente en la mitología del folk y el country más oscuro. En este contexto, la versión de Hank Williams (“Lost Highway”) deja de ser un mero ejercicio de estilo para convertirse en auténtica declaración (“I’m a rollin’ stone / all alone and lost / for this life of sin / I have paid the cost”). El disco se cierra con “Lisa Lisa”, una especie de The End en clave acústica que sustituye el drama edípico de Jim Morrison por el lamento anestesiado y febril de un amor perdido.
Como las mejores películas de David Lynch, Medicine Fuck Dream se revela a la vez más sincero y más inescrutable a cada nueva escucha, siguiendo una lógica interna tan enigmática como fascinante. Pesadilla y ensueño.