Lloyd Cole
Mantener mi carrera no ha sido fácil desde 1994 más o menos. A lo mejor esto cambia con Standards, quién sabe… Sería estupendo
Lloyd Cole es un músico que nos recuerda algunos de los mejores discos de los ochenta, un oasis lejos del pop de chicle y las producciones barrocas de la época. Un superviviente, en definitiva.
Sus lacónicas respuestas en esta entrevista no deben ocultar a un gran músico, meticuloso y ahora en plena resurrección con un disco fantástico, Standards, que lo vuelve a traer a España de gira. Si alguien no lo recuerda, está a tiempo de refrescar su memoria con estas y otras gloriosas canciones de su puño y letra.
Han pasado tres años desde tu última grabación, y vuelves con una fuerza inesperada en una colección de temas llenos de energía. ¿Esa es la idea tradicional, el «standard» del rock and roll?
Eso es lo que Fred, Matthew y yo hacemos cuando tocamos instrumentos eléctricos, parece ser. Y cuando les hago escuchar a Neu!
¿Es el resultado del paso por un largo período creativo?
No, ha sido corto y muy intenso. Solo «No truck» fue escrita antes del pasado septiembre. El resto se escribieron en diez semanas, escribiendo durante ocho o diez horas al día.
¿Cuáles son sus «standards» personales en la actualidad? ¿Debemos prestar atención al sonido del disco para extraer las claves de su bagaje como oyente?
No me importa cómo se escuche el disco. No pretendo dar instrucciones respecto a eso.
Si escuchamos sus primeras canciones en solitario allá por 1990, cuando dejó a The Commotions, y las comparamos con estas últimas, encontramos la misma base rítmica. Tal vez tenga mucho que ver que el bajista original, Matthew Sweet, ha vuelto a la banda.
La idea era esa. Me gusta la energía que teníamos entre 1989 y 1991. No puede ser lo mismo pero aún me siento feliz con la química que existe entre algunos músicos.
También colabora al piano y como corista Joan As Police Woman. Todo un privilegio, supongo.
Totalmente. Adoro la voz de Joan, su entrega y su forma de tocar el piano.
¿Es este un viaje ocasional a las raíces del rock and roll o podríamos pensar en un siguiente disco titulado «Standards II»?
Creo que podría ser divertido ver si podemos llevarlo un poco más allá. Quizás incluso más desnudo y rudo, ¿como si fuéramos los Television tal vez?
La única versión incluida, «California earthquake», está basada a su vez en la interpretación de Mama Cass, pero ¿llegó a escuchar el tema folk original?
Escuché ese tema con la voz de Mama Cass a mediados o últimos de los noventa y desde entonces pensé que me encantaría intentarlo, y grabar en Los Angeles parecía una idea divertida. Además, funciona bastante bien como experimento «krautrock».
Desde sus inicios, sus letras parecen funcionar como breves poemas. ¿Sigue buscando la manera perfecta de poner en palabras lo que mucha gente piensa pero no es capaz de expresar?
No lo creo así. No soy un poeta, yo hago canciones para que otra gente las escuche. Gente muy diferente, con suerte, que les encontrará sentidos muy diferentes. Quizás diferentes reflexiones.
Siempre ha escrito desde un punto de vista sentimental, hablando de sus propios sentimientos. Ahora parece identificar un terremoto como la forma ideal de describir una ruptura sentimental.
Así lo describe usted, no yo.
Me alegra no estar de acuerdo, y puede que en esto tampoco lo esté, pero es difícil olvidar la belleza y vigencia de algunas de sus grabaciones, como «Rattlesnakes».
Me alegra mucho que haya gente que lo crea así. Gracias.
Estará de gira por España durante el próximo mes de octubre. ¿Cómo ha sido su relación con nuestro público durante todos estos años?
Ha ido cambiando a través de los años. Al principio lo veía como una especie de sombra de Portugal porque éramos mucho más populares allí, pero la última vez que estuve en España fue maravilloso, y la respuesta a los dos últimos álbumes ha sido fantástica. Me encanta visitarles y adoro la comida española.
¿Es duro mantener una carrera sólida y conseguir un número mínimo de conciertos en las actuales circunstancias?
La cosa varía de año en año, pero no ha sido fácil en absoluto para mí desde 1994 más o menos. A lo mejor esto cambia con Standards, quién sabe… Sería estupendo.