The Breeders – All Nerve (4AD)
En la última edición del Primavera Club mi compañero Iñaki Espejo-Saavedra hablaba de la resurrección de The Breeders para el directo, gracias a un concierto en el que mostraban la fuerza y la frescura de unos debutantes. Esto nos hizo mantener la esperanza de cara a lo que sería su nuevo álbum, el primero en una década después del decepcionante Mountain Battles y su respectiva gira, de la que tampoco tenemos un buen recuerdo. Y es que la banda de Kim Deal había entrado en una peligrosa deriva desde el lanzamiento de Title TK (2002) de la que parecía imposible remontar el vuelo. Pero cosas de la madurez o de la química, fue recuperar para el directo la alineación con la que conformaron su álbum más exitoso, –un Last Splash (1993) aún no superado– y las musas volvieron de su lado.
The Breeders recuperan músculo y gran parte del crédito perdido en un notable regreso. All Nerve, nos devuelve los mejores juegos vocales de las hermanas Deal, aleja a nuestra querida Kim del bajo ahora en propiedad de Josephine Wiggs y nos la encontramos al frente de la guitarra y los teclados. El quinto trabajo de la banda de Boston tiene la virtud de funcionar por lo que es, lejos de emular viejos éxitos o fórmulas manidas. En él encajan a la perfección sus melodías y sus silencios, su intensidad contenida y los ecos post punk de algunas de sus piezas.
Concebido como si hubiera sido grabado en directo (la mano alargada de Steve Albini, uno de sus productores, se nota) viene envuelto en un oscuro aura que pasa de hacernos vibrar con el empuje de «Nervous Mary» y “Wait In The Car” o la melódica «All Nerve», a estremecernos con en “Spacewoman”, “Dawn: Making An Effort” o “Walking With a Killer”. Brillando igualmente con la densidad de «Metagoth» con una gloriosa base rítmica y la fuerza de “Archangel’s Thunderbird”.
Black Francis quedó dolido con el éxito de The Breeders en los 90, algo que se notó en el deterioro de la primera encarnación de Pixies. En los últimos tiempos se ha mostrado conciliador con su antigua compañera, quien parece ha preferido responder con un disco en el que reafirma que aún no había dicho su última palabra.