Doctor Music denuncia a las plataformas revendedoras de entradas, Ticketmaster y Ticketbis dan su versión
La pasada semana se armó un revuelo con la venta de entradas del concierto de Bruce Springsteen, multitud de acusaciones hacia los principales canales de venta. Tras agotarse en poco menos de 3 horas las 60.000 entradas, empezaron a salir nuevas en otros canales con precios hinchados, para malestar de los miles de usuarios que se quedaron sin ellas.
Ante esta situación, Doctor Music, promotor de la gira ha interpuesto una denuncia a las plataformas revendedoras. Os dejamos con su comunicado:
Desde Doctor Music queremos manifestar nuestro total rechazo a la reventa de entradas de los conciertos que organizamos. La reventa es una práctica que encarece las entradas de los conciertos de más demanda en beneficio de unos especuladores sin escrúpulos, ajenos al artista y a Doctor Music, que se lucran a costa de los aficionados a la música, los cuales ven como se agotan las entradas en los canales de venta legales, mientras su precio se dispara en las plataformas de reventa hasta niveles a los que muchos no pueden acceder a comprar.
La inundación de ofertas de reventa para los conciertos de Bruce Springsteen y Adele ha indignado a los aficionados, a los artistas y a los promotores musicales que, como Doctor Music, queremos que las entradas lleguen al público a precios de mercado. Por ello hemos decidido denunciar a las plataformas de reventa (SEATWAVE, TENGOENTRADAS, TICKETBIS, VIAGOGO, ENTRADAS365, TICKETNETWORK, TICKETLIQUIDATOR y WORLDTICKETSHOP) ante los organismos reguladores de espectáculos y de protección al consumidor en las comunidades autónomas donde se celebran los conciertos (Madrid, Catalunya y País Vasco).
Además, las condiciones generales de la compra de entradas (que se encuentran en la página web de Ticketmaster) prohíben la reventa de las entradas y advierten que a los compradores en reventa se les podrá impedir el acceso al concierto. En consecuencia, quienes adquieren sus entradas en estas plataformas creyendo que están haciendo una compra lícita que les da derecho a acceder al concierto son víctimas de un engaño orquestado por las plataformas que podría ser constitutivo de un presunto delito de estafa. Por este motivo, Doctor Music está en estos momentos estudiando presentar una denuncia contra las referidas plataformas también ante la Audiencia Nacional.
En cuanto a la reventa de entradas de Bruce Springsteen en la plataforma Seatwave (empresa perteneciente a Ticketmaster), en Doctor Music creemos que es un sinsentido que Ticketmaster, agente autorizado para la venta legítima de entradas de nuestros conciertos, sea al mismo tiempo la propietaria de Seatwave, una de las plataformas que más indignación ha despertado con la reventa de entradas de Bruce Springsteen. Esta coincidencia ha provocado la comprensible sospecha de que Seatwave se haya nutrido de entradas desviadas fraudulentamente desde Ticketmaster. No obstante, estamos en situación de afirmar con absoluta certeza que esta suposición es totalmente errónea. Por tanto, las entradas que se ofrecen en Seatwave, al igual que en las demás plataformas, solo pueden proceder de particulares que las han adquirido legalmente, si bien con la ilegítima intención de revenderlas.
Doctor Music ha pedido en diversas ocasiones a Ticketmaster España que se desvincule de Seatwave o que, por lo menos, evite que Seatwave promueva la reventa de entradas de nuestros conciertos (Bruce Springsteen, Adele, Justin Bieber, etc.). Pero lamentablemente, y a pesar de que tenemos constancia de que el Director General de Ticketmaster España ha insistido para que se atendieran nuestras demandas, Seatwave –aún y siendo una empresa 100% propiedad de Ticketmaster- ha hecho caso omiso de nuestras reiteradas peticiones, lo cual nos resulta del todo incomprensible.
Confiamos que las denuncias que hoy hemos puesto en marcha contribuyan a poner fin a la actividad ilegal de todas estas plataformas de reventa de entradas, tan perniciosas para el mundo de la música.
IMPORTANTE: Aprovechamos esta ocasión para recordar, una vez más, que las entradas no adquiridas en puntos oficiales carecen de toda validez legal y no dan derecho a asistir al concierto. Doctor Music utilizará todos los medios tecnológicos a su alcance para verificar el origen de las entradas y establecerá controles aleatorios en las puertas de los recintos en donde se celebren los conciertos. Por lo tanto, recomendamos a todos los aficionados que se abstengan de adquirir entradas en webs de reventa u otros canales no oficiales pues corren un serio riesgo de no poder acceder al concierto y perder el dinero desembolsado en la compra de su entrada.
Por su parte, la empresa de venta de tickets Ticketmaster lanza un comunicado comentando la mecánica de estos canales:
Con motivo de la información aparecida en diversos medios de comunicación en los últimos días sobre la venta de entradas de los conciertos de Bruce Springsteen, Ticketmaster aclara que: •
Ticketbis acaba de sumar su versión de los hechos.
Carta abierta de Jon Uriarte y Ander Michelena, CEOs de Ticketbis
A la luz de la aparición de artículos que indican una posible denuncia a plataformas de compra y venta de entradas como la nuestra por lo ocurrido durante la venta de localidades para los conciertos de Bruce Springsteen, creemos que es importante explicar, en primer lugar, que Ticketbis no ha recibido ninguna denuncia o notificación al respecto. Si se recibiese, adoptaremos las medidas oportunas en defensa de nuestra actividad.
Ticketbis es una plataforma online para la compra y venta de entradas entre usuarios particulares. Nuestro portal actúa como intermediario entre personas que quieren vender y otras que quieren comprar entradas para un determinado evento deportivo o musical. Nuestro rol consiste en asegurar la transparencia, seguridad y legalidad de toda transacción que tenga lugar a través de nuestra plataforma, salvaguardando en todo momento la privacidad de los usuarios involucrados. Ticketbis no interfiere ni resta cuota de mercado a los players tradicionales como promotores o plataformas de venta de entradas.
Este modelo de negocio nace de una necesidad real que está presente en la sociedad. Ofrece una solución a los usuarios que no pueden acudir a un evento para el que han adquirido una entrada y beneficiar a otro interesado en asistir. Los promotores no suelen admitir la devolución de las entradas, salvo por cancelación del evento, y actualmente no existe ninguna alternativa legal y segura que solvente este problema salvo la que ofrecen plataformas como la nuestra. Al no facilitar esa opción tampoco deberían tener el derecho de limitar la venta de la entrada a la persona que ha pagado por ella. Por otro lado, contribuimos a generar transparencia en un mercado que, de otra forma, se desarrollaría en la calle, sin control y sin pagar tributos al estado. Ticketbis abona los impuestos correspondientes a toda y cada una de las transacciones que tienen lugar en el site.
Hace unos meses llevamos a cabo una encuesta a 500 usuarios residentes en España precisamente con el objetivo de cuantificar esta necesidad a la que Ticketbis responde y los resultados son contundentes: 3 de cada 10 personas que compran una entrada acaba por no poder asistir al evento y el 80% de estos usuarios pierde completamente el dinero. Las respuestas apuntan a que el desconocimiento es el principal motivo de esta realidad ya que a la pregunta de si estarían dispuestos a vender su entrada si conocieran una forma segura y legal más del 76% de los usuarios responde que sí.
Fluctuación de los precios
Muchas veces se nos critica por los elevados precios con los que se publican entradas en nuestra plataforma, sin tener en cuenta muchos factores: por un lado, que cada usuario es libre de fijar el precio al que quiere vender su entrada, lo que no significa que esta se vaya a vender por el valor establecido. La decisión última es siempre del comprador, por lo cual si este no acepta pagar un determinado precio el vendedor tiene dos opciones: quedarse con la entrada o bajar el precio de la misma, acción que puede llevar a cabo en cualquier momento antes de que se confirme la venta.
Por otro lado, para nosotros el precio de venta de una entrada en nuestro site equivale al valor real de mercado que los usuarios otorgan a un evento, equipo, banda o artista. Lo que hemos creado es un mercado libre en el que la demanda y la oferta fluctúan y se influencian constantemente. No somos el único caso: hasta las aerolíneas tienen precios dinámicos online, en respuesta a la demanda frente a plazas disponibles en un vuelo, con la diferencia de que, en su caso, son ellas mismas las que deciden el precio de venta, sin que los usuarios puedan mediar en el proceso.
De la misma manera que nadie se plantea poner en discusión la compra y venta entre particulares de cualquier otro bien – como camisetas, bolsos o coches – la compra y venta de entradas, gracias a Internet, se puede realizar de la misma manera en un contexto seguro. La economía actual tiende cada vez más hacia modelos de negocio como el nuestro, que abarcan ya todos los sectores. BlaBlaCar, Wallapop, Airbnb son solo unos actores más que proponen soluciones para el intercambio entre particulares. Ticketbis no sólo se encarga de tutelar a vendedores y compradores sino además de operar dentro del marco normativo y financiero de nuestro país.
La legalidad de la compra y venta de entradas en Internet a día de hoy no es discutible y así lo han constatado todas las fuentes jurídicas que hemos consultado. Nuestra trayectoria como empresa nos avala: en 2015 facturamos 85 millones de euros, lo que supone un 57% más que el año anterior y estamos más orgullosos que nunca. Ticketbis es una plataforma internacional con operaciones en más de 40 países y 400 empleados.
Pego lo mismo que he dicho en el FB de la web:
Vamos a suponer que los sitios «legales» de reventa tienen sentido, destinada a gente que compra y que no podrá ir finalmente al concierto. El concierto es en mayo, así que no tiene sentido que aparezcan en esas webs apenas minutos u horas después, cuando faltan muchas semanas para la celebración del evento. Sería sencillo (repito, si y sólo si damos por válida la premisa, cosa harto discutible) y cuestión de voluntad limitar la reventa de esas entradas a unos pocos días antes del concierto y a un precio igual al original. O sea, que la argumentación de Ticketmaster no tiene sentido alguno. Y lo que ya es la repanocha es defender el alza de precios por la ley de la oferta y la demanda (ni Esperanza Superliberalstar Aguirre, oigan).
Totalmente de acuerdo. Menos mal que las promotoras no siguen esa «ley de la oferta y la demanda» que defienden las revendedoras, porque entonces lo que harían Doctor Music y las demás sería subastar las entradas directamente (para que se forren otros que no se juegan nada, ya se lo quedaban directamente ellos mismos).