Howe Gelb (Giant Sand)
Cada disco describe su propia independencia respecto al resto
Al tiempo de cumplir 25 años de carrera desde la publicación del primerizo Valley Of Rain (1985), el incombustible Howe Gelb entrega nuevo disco, Blurry Blue Mountain (Fire Records, 2010), al frente de Giant Sand.
En todo ese tiempo el artista ha evitado siempre corsés y limitaciones de cualquier tipo, por lo que no debe extrañar que mantenga en las entrevistas ese espíritu inquieto, indomable y algo surrealista. Mientras que la mayoría de artistas gustan de comentar los detalles de su último trabajo, el músico de Arizona parece bastante más motivado hablando de sus admirados Johhny Cash o Raimundo Amador que de su propia obra.
En cualquier caso, Blurry Blue Mountain (Fire Records, 2010) es un disco más extenso que las respuestas proporcionadas en esta entrevista… aunque ciertamente menos lisérgico ¿Serán las consecuencias del peyote?
¿Por qué “Blurry Blue Mountain” como título del disco?
Es la forma en que aparece la montaña gigante al despertar… o al quedarse dormida.
A lo largo de 14 canciones hay excepciones, pero la sensación generalizada es que este nuevo disco de Giant Sand es menos furioso, por momentos incluso muy melódico ¿Es ahora Howe Gelb una persona más calmada y en paz?
Sí. Dos veces al día. Como un reloj roto.
También encuentro una especial diversidad estilística entre las distintas canciones del álbum ¿Hay alguna explicación para ello?
El por qué´ es lo que´ hemos sido siempre durante los últimos veinticinco años.
¿Crees que “Blurry Blue Mountain” puede ser uno de los discos más “accesibles” de Giant Sand?
Parece gustarle a la gente mayor de 39 años, así que cuidado. Podrías tener que acceder a él por detrás.
¿Qué tiene este disco que no tengan los anteriores trabajos de Giant Sand?
Eso es algo que sólo el sonido de la música puede describir. Cada disco describe su propia independencia respecto al resto”.
¿Qué colaboraciones podemos encontrar en “Blurry Blue Mountain”?
La desaparición del mundo totalmente despierto.
(Hace un juego de palabras con los términos “appearance” –colaboración- y “disappearance” –desaparición-)
¿Habrá gira por España? ¿Cómo pensáis enfocarla y qué podremos encontrar sobre el escenario?
Siempre hay una gira por España y probablemente nos verás muy borrosos en el escenario.
La última vez que pudimos ver a Giant Sand en directo en España fue haciendo At San Quentin de Johnny Cash ¿Qué tal fue la experiencia de girar interpretando las canciones de otro artista? ¿Has redescubierto de alguna forma el disco de Cash tras interpretarlo?
Cash no es simplemente otro artista. Es un ingeniero que construyó su propia vía de tren para que todos podamos viajar. Fue un auténtico placer viajar por esa vía y pasar un rato en ella. Algunos dicen que Cash es el rey, pero yo creo que nunca ha sido otra cosa que el director de orquesta de sus propias canciones.
Recuerdo que me llamó la atención la forma en que hasta imitabas algunos movimientos de Cash… ¿Te metiste de lleno en el papel al modo de los actores clásicos?
Sólo actuaba como si me supiera bien las canciones… y vistiendo de negro ya tenía la mitad del trabajo hecho.
¿En algún momento barajasteis alguna la opción de elegir otro disco para versionar?
Sticky Fingers´ (1971) de los Stones y Live at Town Hall´ (1964) de Thelonious Monk.
La canción “Raid The Rail” del nuevo álbum parece precisamente un homenaje a Cash…
Gracias… y además la escribí en un tren… en Dinamarca.
¿Cómo ves la actual escena musical americana? ¿Cómo ha ido cambiado la industria musical desde tus inicios hace ya veinticinco años? ¿Qué es lo qué más echas de menos de los viejos tiempos y lo mejor de la era actual?
Aquí la escena musical aquí se quedó estancada en 1972. No sabe salir de los 70. Estaba tomando una dirección horrible en los ochenta, y luego en los noventa volvió a dirigirse hacia los primeros setenta. Y ya se quedó allí.
Lo que más echo de menos de los viejos tiempos es ser más joven. Y lo delicioso que era no tener teléfonos móviles o Internet. Había una cantidad maravillosa de tiempo que llenar con peyote.
Pudimos verte como espectador del Primavera Sound en Barcelona ¿Qué tal fue la experiencia? ¿Cuáles fueron tus conciertos favoritos?
Fue divertido no tener que trabajar en un festival. Me gustaron mucho Scout Niblett, Wilco y también los Pixies.
Aún está muy reciente la colaboración con Raimundo Amador en el proyecto Howe Gelb & A Band of Gypsies ¿Cómo te ha enriquecido la experiencia? ¿Ha influido esa experiencia de alguna forma en la elaboración del nuevo álbum de Giant Sand?
Toqué este disco para Raimundo y fue muy amable. Lo que más me gusta de él y los gitanos es lo alentadores que son, especialmente tocando cuando estamos en plena canción. Se ponen a vocear cuando les gusta alguna virguería que alguien canta o toca con la guitarra. Es una manera increíble de hacer música. Reacción inmediata de la gente en quién más confías para esa canción. Luego Raimundo me puso su disco y me dejó alucinado. Es El Maestro´ (“El Maestro” lo dice en castellano). Capaz de tocar más notas de las la mayoría de humanos pueden entender, pero aún así tan conmovedor… y siempre con una sonrisa.
Parece que entre unas cosas y otras estás en permanente contacto con nuestro país ¿En qué punto está tu relación con España?
Creo que está en mi sangre. Se dice que puedo tener algún antepasado, pero es tan misterioso que nadie tiene los detalles. Cuando me voy a dormir en Tucson, me despierto en Córdoba. Y cuando finalmente me voy a dormir allí, abro los ojos aquí en Arizona. Creo que Dalí lo aprobaría.
Muchas gracias por la entrevista
“De nada”.
(Responde en castellano)