Jane’s Addiction – Strays (Capitol)
Trece años han pasado desde Ritual de Lo Habitual. Trece años en los que ha habido Porno For Pyros, disco en solitario de Perry Farrell, una aventura de Dave Navarro con los Red Hot Chilli Peppers como sustituto de John Frusciante (en el -quizá- su peor disco), Lollapaloozas… pero después de que hace un par de años Jane’s Addiction publicaran recopilatorio y salieran de gira, han decidido grabar un nuevo álbum.
Strays es el tercer álbum de estudio de una banda reformada al 75%, (ya que el bajista Eric Avery no ha querido reunirse a sus ex compañeros). En él aunque se nota el paso del tiempo, se advierte que la actitud y las canciones mantienen un reconocible halo que alegrará a sus devotos. Que nadie se olvide de que ellos justo desaparecieron cuando Mudhoney, Sonic Youth, Pixies o los antes mencionados Red Hot Chilli Peppers se consagraban y emergían bandas como Soundgarden, Pearl Jam o los mismísimos Nirvana.
Ahora simplemente han vuelto para demostrar quienes fueron los responsables del mejor rock contundente hecho en América en las dos últimas décadas y para poder mirar cara a cara a sus contemporáneos y por encima del hombro a muchos nuevos imberbes que no saben ni coger un micrófono. Aunque momentos deslumbrantes de su carrera como “Jane Says”, “Been Caught Stealing” o “Classic Girl” quedan lejos de sus nuevas composiciones, en estas se conservan las principales cualidades que nos enamoraron: la histriónica voz de Farrell, la base rítmica y sobre todo los acertados guitarreos de un Navarro que se mantiene en buena forma. Ahí tienen el comienzo incendiario de “True Nature” con sus cambios de ritmo, el acertado single “Just Because”, las pegadizas “The Riches” o “Superhero”, la ficticiamente reposada “Price I Pay” y sus ritmos funkys, o la acústica “Everybody’s Friend” con su ramalazo ledzeppeliano.
Strays es un más que digno regreso para una banda histórica que de haber continuado con su trayectoria a comienzos de los 90, quizá no hubiera llegado tan fresca a nuestros días.
Que les dure.