New Order
Te mentiría si te dijera que cada vez que tocamos esos temas es como la primera vez. De hecho hay veces que por un momento piensas “¿otra vez?”. Pero luego te das cuenta de que es maravilloso que haya temas como “Blue Monday” o “Bizarre Love Triangle”
No sé cómo sería en 1980, pero actualmente al matrimonio formado por Stephen Morris y Gillian Gilbert te los imaginas cogidos del brazo y paseando por un bucólico parque londinense en un soleado domingo por la mañana. Y es que fuera del escenario, el una vez batería de Joy Division, y posteriormente de New Order, y su teclista, son la típica pareja británica con un pie y medio en la tercera edad: simpáticos, educados y habladores.
Charlamos con ellos horas antes de su actuación en el pasado Festival de Benicàssim y nos contaron lo mucho que les alucina que chavales que aún no habían nacido cuando ellos formaron New Order les sigan con la misma pasión que los fans de hace treinta años.
El año pasado decidisteis reformar New Order y salir de gira. ¿Cómo habéis encarado la vuelta a los escenarios después de cinco años de parón?
Stephen: De hecho no hemos “planeado” la gira. Básicamente lo que pasó es que el año pasado nuestro buen amigo Michael Shamberg (colaborador de la banda desde sus inicios) se puso muy enfermo y decidimos hacer dos conciertos benéficos en su honor. Y fueron muy bien. La gente los recibió muy bien y disfrutamos mucho. De ahí nos salió una gira por Sudamérica. Luego nos pidieron si queríamos girar por Australia. Y ahí estamos, con una gira en toda regla.
Gillian: De hecho sólo íbamos a hacer esos dos conciertos pero ya no hemos parado de girar desde entonces. ¡Y aún seguimos!
Stephen: Así que no es que nos sentamos con un mapa y planeáramos todo. Aunque de hecho siempre hemos hecho las cosas así. Nunca planeamos con demasiada antelación. Porque me da la sensación de que si planeas con demasiada antelación y te comprometes a demasiadas cosas, es horrible si llega el punto en que ya no disfrutas, porque tienes que hacer igualmente todas esas cosas a las que ya te has comprometido. Es realmente horrible.
¿Y cuál es el feedback que recibís de la gente durante esta gira?
Stephen: Muy bueno. La audiencia es fantástica y muy variada: gente muy joven, un montón de mujeres… ¡Un montón de mujeres jóvenes! No sé por qué… pero es así. Pero siempre tenemos un feedback muy positivo, la gente disfruta en nuestros conciertos.
¿Cómo afecta al hecho de estar de gira saber que tenéis otros asuntos extra-musicales entre manos (como la amenaza de denuncia de Peter Hook por usar el nombre New Order para esta gira)? (Muy educadamente, en todo momento de la conversación, y concretamente en esta respuesta, evitan mencionar el tema Hook).
Stephen: Procuramos que estas cosas no afecten a la gira, porque la verdad es que sólo se puede hacer bien una cosa a la vez. Deberíamos estar haciendo muchas cosas como New Order, grabar canciones, por ejemplo, pero hemos dejado de lado todo lo que no sea la gira para poder estar completamente centrados.
Gillian: Tenemos nuevos miembros en la banda ahora así que tenemos nuevos temas de conversación. Además, con esta gira hemos querido aprovechar la oportunidad para salir a tocar por ahí, que es lo que nos gusta.
Stephen: De hecho, cuando te vas haciendo mayor te das cuenta de que haces las cosas por motivos diferentes que cuando eres joven. Haces las cosas porque te divierten y no porque estás obligado a hacerlas.
Gillian, ¿cómo te sientes al volver a tocar con New Order después de todos estos años?
Gillian: Muy bien. La verdad es que no fue algo premeditado, fue natural, así que tampoco ha sido un estrés ni una preocupación excesiva.
Stephen: Para preparar los dos conciertos benéficos estuvimos ensayamos en casa… en nuestra casa… Y ella estaba siempre por ahí, claro… porque vive ahí me refiero (risas). Así que todo fue bastante natural. Un día se unió a nosotros a los teclados…
Gillian: … Empecé a tocar pero diciendo ´yo no voy a unirme a vosotros eh? Sólo estoy divirtiéndome un rato´. Y el segundo día de ensayo decidimos que sí que volvería a la banda (risas).
Es curioso que, treinta años después, la gente se siga emocionando con los temas más antiguos de la banda como “Blue Monday” o “Temptation”. ¿No os cansáis de tener que seguir tocando siempre esos temas?
Stephen y Gillian (al unísono): ¡No, es fantástico! De verdad, fantástico.
Stephen: Te mentiría si te dijera que cada vez que tocamos esos temas es como la primera vez. De hecho hay veces que por un momento piensas “¿otra vez?”. Pero luego te das cuenta de que es maravilloso que haya temas como “Blue Monday” o “Bizarre Love Triangle” que a la gente aún le emocionan cuando la tocamos en directo y se saben la letra y la cantan entera.
Gillian: Por suerte la gira tampoco es muy larga. Estaremos sólo 6 semanas, y eso permite mantener la emoción en cada concierto sin correr el riesgo de que te aburras de los temas.
Stephen: Sí, ese es el riesgo de planear cosas con demasiado tiempo. Si llevas muicho tiempo tocando siempre lo mismo al final no lo disfrutas y eso lo trasladas al público, que tampoco lo disfruta. Tienes que disfrutarlo. Esta vez la gira no es tan larga, así que seguimos pasándolo bien sobre el escenario en cada concierto.
¡Tiene que ser raro el hecho de que una buena parte de vuestros fans sean jóvenes que ni siquiera habían nacido cuando vosotros empezasteis a tocar! Y no es sólo que les gusten vuestras canciones sino que sois su grupo preferido.
Stephen: Pues sí, es algo que nos sigue pareciendo alucinante. Increíblemente alucinante.
Gillian: Ves gente en los conciertos y piensas ”¿pero dónde están vuestros padres y madres? Ah, ¡venís solos! ¡Y venís a vernos a nosotros!!!”. Y te sientes halagado.
Stephen: Fue muy divertido porque tocamos en un festival y un chaval de una de las bandas del cartel se nos acercó y nos dijo que era de Milán y que era muy fan de nuestra música y que nos había visto varias veces en directo pero nunca en Milán. Y yo le dije “estuvimos tocando en Milan en 1982 ¿no te acuerdas de ese concierto?”. Y me contestó “en 1982 ni siquiera había nacido!” (risas). Fue muy divertido. Ahora hablando en serio, es un honor que nuestra música, incluso la más vieja, siga gustando a la gente joven. Y es un honor que haya bandas que nos digan que hacen música gracias a nosotros. Igual que nosotros hace treinta y pico años empezamos a hacer música gracias a otras bandas que nos gustaban.
¿Asi que no os molesta que haya tantas bandas últimamente con un sonido tomado directamente del vuestro?
Stephen: ¡No! ¡Que va! No voy a ser uno de esos viejos músicos que se pasan el día diciendo “esto es un robo de mi música”, “aquello es un robo de mi música”. Es fantástico que la gente tome cosas de nuestro sonido. De hecho nuestra propia música es un 90% “robo” (risas).
Gillian: Nooo, no es robo ¡es inspiración! (carcajada)
Stephen: Eso quería decir, inspiración (ríen mientras se miran con complicidad).
¿Cómo se planea el setlist para un concierto sin tener un disco nuevo que promocionar? Con una carrera tan dilatada como la vuestra, ¿sentís la presión de no dejar fuera ninguno de los temas famosos o después de tantos años haciendo conciertos ya sabéis qué es lo que la gente quiere escuchar?
Stephen: Hmmm… lo que hacemos cuando preparamos una gira como esta es escuchar todos los discos desde el primero al último. Los escuchamos todos seguidos, por orden, y de cada disco vamos seleccionando los temas que tenemos ganas de tocar y creemos que funcionan bien en directo. Y una vez que tenemos una lista de temas seleccionados nos sentamos y decidimos cuáles vamos a tocar en la gira. Algunos son demasiado técnicos, otros simplemente no encajan con el resto de temas… Antes teníamos fama de no repetir nunca un setlist, y eso mola, pero tiene el problema de que haces un concierto fantástico y el siguiente puede ser de pena. Así que actualmente para decidir el setlist literalmente nos sentamos todos con un papel y preparamos. Y la verdad es que nos ceñimos bastante a ese setlist. Luego tenemos un puñado de canciones “extra” que en algunas ocasiones, normalmente cuando disponemos de tiempo, aprovechamos para tocar.
Gillian: La cosa es que ahora en nuestros conciertos llevamos proyecciones audiovisuales. Son vídeos que Michael Shamberg preparó para nosotros y que nos parecía bonito llevar como otra manera de hacerle un homenaje. Además son un complemento muy bueno a nuestros temas. Pero eso implica tener un setlist bastante fijo. Aunque de hecho como toda esta gira ha salido un poco casi sin querer, tampoco hemos tenido demasiado tiempo para pensar mucho el setlist. No le hemos dado demasiadas vueltas.
Por supuesto no podemos despedirnos sin haceros la pregunta clave ¿podemos esperar disco nuevo de New Order en un futuro próximo?
Stephen: De hecho a principio de 2013, cuando acabemos esta gira, lo que queremos hacer es sentarnos y terminar de perfilar algunos temas nuevos y grabarlos. Y ver cómo va. No creo que vaya a ser un álbum completo porque el problema es que cuando te sientas y planeas un cd completo, se hace todo cuesta arriba. Y queremos que sea algo rápido, grabarlo y publicarlo rápido para aprovechar que tenemos la dinámica de la gira de tocar juntos. Seguramente será un ep, pero estas cosas nunca se saben: te pones a trabajar en algo y cuando te das cuentas igual tienes un montón de canciones. Veremos. De momento lo que toca es seguir con esta gira.