The Decemberists – I’ll Be Your Girl (Rough Trade/Popstock!)
Tras más de quince años de carrera, parece que en el seno de The Decemberists ha tenido lugar una conjura en firme para escalar un par de peldaños en cuanto a aceptación popular se refiere. El asunto está fuera de sospechas, porque la banda de Portland acomete la aventura con talento y bastante buen gusto, además de respetar las bases de su personalidad artística.
El octavo disco de estudio del grupo incluye por tanto nuevos y convencidos elementos, y resuena así más accesible que entregas previas. Los norteamericanos se abren definitivamente y sin tapujos a un pop colorido y luminoso, que en la mayoría de los casos tiende a favorecerles. El lado melancólico del grupo permanece vigente en algunos momentos, pero ya no luce en exclusividad y se reduce a “Cutting Stone” y la propia “I’ll Be Your Girl” que titula y cierra el elepé. La americana ha cedido mayoría de espacio a esa tendencia vistosa y algo grandilocuente que es motivo principal de la referencia, y queda confinada a piezas como “Tripping Along” o “Sucker’s Payer”. Sintetizadores, coros, teclados o ‘lalalas’… cualquier adorno es apto para realzar la canción y tornarla pegadiza, tal y como sucede con “Once In My Life”, “Severed”, “Your Ghost” o la vacilona “We All Die Young”. El disco está producido a conciencia por John Congleton (conocido por su trabajo para Future Islands o St. Vincent) quién, en plena obsesión por alcanzar el novedoso aspecto global, sobrecarga ocasionalmente unas composiciones que en cualquier caso evidencian su calidad.
The Decemberists se desmarcan así ligeramente de compañeros estilísticos como Okkervil River o Band Of Horses, y alcanzan el objetivo pretendido. Porque “I’ll Be Your Girl” (Rough Trade, 18) es un trabajo que entra bien, se disfruta sin complicación y deja un agradable regusto, además de presentar virtudes con luminosidad y refrescar el sonido de sus autores sin traicionar principios.