Yann Tiersen – All (Mute/[PIAS])
Que Yann Tiersen es un músico tremendamente plural y dotado con un inventivo creativo especial es, a estas alturas, una evidencia incontestable. Tanto que siempre es complicado adivinar hacia dónde apuntará el francés en su siguiente movimiento, y si éste se concretará en un disco clásico, tendente al pop, protagonizado por post-punk oscuro o será una banda sonora, sin duda su faceta más popular tras firmar la música para películas como Goodbye Lenin! (Virgin, 03), Tabarly (EMI, 08) y, por supuesto, Amélie (Virgin, 01). Porque todo eso, y alguna cosa más, ha dejado hasta el momento la fructífera carrera de este bretón universal.
En su nueva entrega (difícil enumerarla dado lo nutrido y complejo del catálogo) Tiersen se decanta mayoritariamente por el clasicismo, otorgando prioridad (que no exclusividad) al piano. Sin embargo, el músico no está solo en los once temas que componen el lanzamiento, y cuenta con colaboraciones vocales a cargo de su esposa Emilie Quinquis, Denez Prigent, la sueca Anna Von Hausswolff o Emilie Tiersen. De este modo entrega un disco basado en ese tipo de melancolía que solo él parece capaz de concretar, describiendo pasajes nostálgicos, naturales y, ante todo, cargados de gran belleza. Piezas de alma orgánica que parecen extenderse hacia el horizonte vislumbrado desde esa Isla de Ushant en la que el autor vive y graba desde hace años, la misma a la que dedicó el elepé Eusa (Mute, 16).
All (Mute, 19) es un compendio ambicioso que se distribuye entre composiciones destacadas y sugestivas y otras que no rechinan en la misión conjunta. Todo solvente, agradable y en orden, en lo que supone un nuevo aporte del firmante. Otro acierto del pianista que, a buen seguro, multiplicará emociones exponencialmente al contacto con el directo. Algo que podrá comprobarse cuando visite los escenarios españoles en esa gira que, durante los próximos meses de septiembre y octubre, tendrá paradas en las ciudades de Valencia, Valladolid, Sevilla, Madrid y Barcelona.
Escucha Yann Tiersen – All
no está nada mal