Astrid
Nuestra música es un escape de la vida de cada día, pretendemos que la gente se sienta feliz
Tres adolescentes -Willie Campbell, Charlie Clark y Gereth Russell- de la pequeña isla de Lewis, al norte de Escocia, decidieron un buen día trasladarse a Glasgow y probar suerte en el mundo de la música. Allí, conocieron a Gary Thom, que se convirtió en el batería del grupo hasta hace unos meses, cuando Neil Payne ocupó su lugar. Gary tenía otro proyecto con Stevie Jackson de Belle&Sebastian, lo que hizo que éstos conocieran la música de Astrid, se enamoraran de ella y les invitaran a irse de gira con ellos. Fue el inicio de una bonita amistad y de la historia de una banda de preciosas melodías pop.
Muzikalia charló con los compositores y vocalistas de Astrid en los instantes previos a su actuación en la madrileña sala El Sol. Una conversación distendida en unos cómodos sillones y con una luz tenue. Charlie a mi derecha y Willie arrodillado en el suelo. Les doy mi enhorabuena por su último disco y comenzamos una charla entre adolescentes (allí nadie superaba los 22 años)…….
-MZK: Astrid surgió como un grupo de amigos con gustos similares, ¿cuáles son esas influencias?
-Charlie: Nos gustan cosas diferentes, aunque crecimos escuchando música similar.
-Willie: Cuando era pequeño escuchaba mucha música que tenían mis padres, muchos discos de los 60, que se quedan en la cabeza, y cuando crecí escuchaba muchas bandas de indie-rock como REM, Lemonheads o alguna más. Pero nuestras influencias van cambiando, cuanto más escuches, más descubres. Bueno, y por supuesto, los Beatles.
-Ch: Sí, de jóvenes nos gustaban mucho los Lemonheads, pero cuando tocas con otras bandas, como Teenage Fanclub, las influencias aumentan. Y ahora escuchamos mucho, por ejemplo grupos que causan expectación como At The Drive-In, o bandas escocesas como Snow Patrol y Mogwai.
-MZK: ¿Qué diferencia a “Play Dead” (2001), vuestro segundo álbum, de “Strange Weather Lately” (1999)?
-Ch: El segundo es más maduro, éramos muy jóvenes cuando grabamos SWL. Hemos aprendido bastantes cosas desde entonces, corregimos errores, metemos más instrumentos, tocamos mejor. “Play Dead” es una variedad de canciones diferentes, canciones pop, canciones más oscuras, canciones lentas, melancólicas, con letras más abiertas a nuestros sentimientos, la música es mejor.
-MZK: Además, está marcado por el cambio de batería…
-Ch: Sí, el verano del año pasado, en la mitad de la grabación de nuestro segundo álbum, teníamos diferencias con el batería, se fue y buscamos un sustituto. Neil fue uno de los primeros que probamos, tocaba ya en un grupo de Glasgow, así que era el hombre perfecto.
-MZK: ¿Y qué ha supuesto este cambio musicalmente hablando?
-Ch: Neil es más enérgico, más duro, más poderoso en directo. La gente se va a sorprender con el cambio.
-MZK: Mogwai, Belle&Sebastian, Teenage Fanclub, Astrid,…¿qué tiene Escocia?
-Ch: No creo que sea el país, llueve mucho, quizá por eso hagamos muchas canciones alegres. Cada grupo es individualmente diferente, puedes oír y decir “es Belle&Sebastian o es Teenage Fanclub”, porque cada banda tiene su propio sonido.
-MZK: Hablando de Belle&Sebastian, ¿cómo surge la amistad con vuestros compatriotas?
-Ch: Nuestra primera gira fue con ellos, nuestro antiguo batería es muy amigo de Stevie Jackson, bebemos en el mismo pub. Gary (el antiguo batería) tocaba en un grupo con Stevie, y le dijo que estábamos iniciando un grupo, nos vinieron a ver y les gustamos.
Al contrario que sobre el escenario, Charlie, con un acento escocés muy marcado, lleva el peso de las respuestas, mientras que Willie simplemente puntualiza y escucha atentamente. Han teloneado a Belle&Sebastian, Teenage Fanclub o Bluetones, algo que consideran importante para llegar a más gente; sin embargo, se decantan por actuar en solitario. Prefieren el directo al estudio de grabación: disfrutan mucho en los conciertos, tanto que les encanta charlar con el público al finalizar cada actuación.
-MZK: ¿Qué pretendéis transmitir a través de vuestra música?
-Ch: Es un escape de la vida de cada día, una música que haga que la gente se sienta feliz y les guste, huir de la rutina.
-MZK: Los dos cantáis las canciones que ambos componéis. ¿Tenéis algún método o costumbre a la hora de componer?
-Wi: No tengo reglas, normalmente tengo unas pocas líneas en mi cabeza que suenan bien, y entonces cojo la guitarra para ver que pasa. Algunas veces va antes la letra, pero habitualmente la música va primero, pero repito que no tengo reglas.
-Ch: Hay algo que contar, escribes algunas palabras primero para tener una idea y buscas una música que describa la atmósfera que quieres o algo que suene bien en la guitarra. Entonces, ya cuentas la historia.
-MZK: Astrid viene del nombre de la fotógrafa alemana novia del quinto Beatle (Stuart Sutcliffe). ¿Por qué esa elección?
-Ch: Estábamos todos juntos buscando un nombre y la habitación tenía una foto original del quinto Beatle, Stuart Sutcliffe, y Paul McCartney. Todos amamos a los Beatles, así que nos pareció un nombre genial, que además suena bien.
-MZK: Cada día aumenta vuestro prestigio, ¿cómo véis la fama?
-Ch: Es gratificante, agradable, te hace sentir bien, que escuchen tu música. Pero de momento, no nos asusta nada, vamos muy despacio, lo tomamos como viene. Nosotros solemos hablar con la gente tras los conciertos para que nos den su opinión, es interesante. No nos sentimos famosos o especiales, somos músicos y disfrutamos mucho con nuestro trabajo.
-MZK: ¿Qué canción os hubiese gustado componer?
-Wi: “Strawberry Fields Forever” (Beatles), “Losing My Religion” (REM) o “Feeling” de los La’s.
-Ch: Black&Black de AC/DC, realmente me gusta. O alguna del primer álbum de los Beatles.
-MZK: Y si únicamente pudiéseis escuchar una canción en el resto de vuestras vidas, ¿cuál sería?
-Ch: Una feliz, supongo. Quizá “He Loves The Sun” de la Velvet Underground.
-Wi: “Wichita Lineman” de Glen Campbell, un cantante de country.
-MZK: Supongo que no fue fácil comentarle a vuestras familias que, siendo tan jóvenes, dejábais los estudios a un lado para dedicaros por completo a la música, ¿no?
-Ch: Al principio estaban preocupados, pero creyeron en nosotros y nos apoyaron. Están felices de que hagamos algo que nos gusta.
-MZK: Es la primera visita a nuestro país y la gira está a punto de concluir. ¿Qué se siente actuando en el extranjero?
-Ch: Es asombroso, está siendo muy especial y grandioso, con una respuesta muy buena del público. No se parece nada al de Glasgow, son más amistosos, gritan y saltan más.
-MZK: Una curiosidad, ¿escucháis vuestros propios discos?
-Ch: Sólo al acabar la grabación, y alguna vez si estamos muy borrachos podemos escuchar una canción.
-MZK: Mp3, Napster, piratería… ¿Qué opináis?
-Ch: Es malo para las bandas, afecta a las compañías, aunque llegas a más gente. Pueden escuchar cosas y si les gusta, comprar el álbum. Hay que hacer un balance.
-MZK: Está bien, te doy diez segundos para convencerme y que compre tu disco.
-Ch: Somos un grupo de música pop, gran música, muy poderoso y lleno de energía en directo, y es un disco que la gente necesita tener.
-MZK: Tras repasar el pasado y el presente, solo nos queda vuestro futuro…
-Ch: Cuando volvamos a Escocia, acabaremos de escribir el nuevo material antes de diciembre, empezaremos a grabar a principios de año y el álbum estará, espero, en mayo o junio.
-MZK: Os dejo escoger la última pregunta…
-Ch: Una que nos hicieron en la radio el otro día y nunca nos la habían preguntado. ¿Qué significa el título “Redground”?
-MZK: Veamos lo que significa el título de este tema incluido en su álbum de début (“Strange Weather Lately”), que por cierto publica estos días en nuestro país Mushroom Pillow.
-Ch: Es el nombre del párking que veíamos desde la ventana de nuestra casa cuando escribimos la canción.
-MZK: Un placer, feliz viaje de regreso a casa.
Astrid, un nombre que hay que recordar a partir de ahora. Una banda formada por cuatro jóvenes sencillos y cuya música no tardará en conquistar a los seguidores de las melodías pop exquisitas. De hecho, a mí ya me han conquistado, como músicos y como personas. Esperemos que vuelvan pronto.