De La Soul – Cabin In The Sky (Mass Appeal)
David “Trugoy the Dove” Jolicoeur nos dejaba prematuramente, con tan sólo 54 años, en 2023. Quedaba un tremendo vacío no sólo en el corazón de sus compañeros de fatigas en De La Soul, banda fundamental para entender el Hip Hop y la evolución de la música negra, sino también en toda la comunidad de un género, que sin su presencia pierde una de sus piedras fundacionales.
Junto a sus compañeros, Vincent “Maseo” Mason y Kevin “Posdnous” Mercer, así como con su pertenencia al colectivo Native Tongues, Trugoy edificó los cimientos de gran parte de todo lo que se escucha hoy. Una fuerza creativa llena de imaginación, efervescencia e impulso que señaló el camino a recorrer y despertó conciencias. Su importancia fue tal, que sus compinches, y muchos otros colegas, decidieron que tenían que rendir un último homenaje.
De La Soul llevaban hibernando desde que en 2016 se publicara And The Anonymous Nobody…, un disco que les valió la nominación a un Grammy, pero a partir del cual se embarcaron en una larguísima y amarga disputa con el sello Tommy Boy para lograr tener los derechos de sus seis primeros discos. Lo consiguieron, pero por el camino perdieron a Trugoy y eso amargó enormemente el sabor de la victoria. No obstante, no era su estilo hundirse en la miseria.
Por eso este Cabin In The Sky es tanto una homilía por el amigo perdido, como una celebración de toda la música que hicieron juntos y que contribuyó enormemente a construir toda una cultura. Como bien dicen en el texto de su canción titular: “perdí a mi hermano Dave, pero lo que me mantiene cuerdo del dolor es permanecer arraigado”. Así que la solución era clara: aprovechar algunos de los retazos que había dejado grabados e inéditos Dave, pedir la ayuda de amigos y aprovechar las series Legend Has Hit de Mass Appeal Records, para hacer su tributo al viejo estilo, pero sin dejar de vivir el momento.
Es imposible no emocionarse cuando en la intro del disco el actor Giancarlo Exposito pasa lista a los participantes. Están todos, o casi todos: Q-Tip, Nas, Common, Slick Rick, Killer Mike, Dj Premier, Black Thought, Bilal, Gina Loring, Yummy Bingham, Yukimi, incluso Prince Paul, que vuelve a colaborar con ellos… es abrumador. Y claro, al final, pregunta por Dave. Dave no contesta, pero está: lo escuchamos en “YUHDONTSTOP”, una genialidad producida por él mismo que suena pletórica, llena de vida. Una especie de mensaje de ultratumba para sus colegas: no paréis, no paréis.
Y no paran. El disco quizás no esté totalmente a la altura de los más grandes de la banda. Pero sin duda De La Soul Is Dead, Stakes Is High o el mítico 3 Feet High están presentes en espíritu aquí. Un disco con un argumento claro: buscar luz en la tristeza y continuar esparciendo el mensaje lleno de humor y positividad que esta banda ha desplegado siempre. Su estilo continúa siendo poliédrico, lleno de color, como en aquellos días del Daisy Age. Hay el característico boom-bap (“Good health” o la enorme “The package”), pero también instrumentaciones más orgánicas no tan propias del hip hop clásico y, como siempre, sacan oro de los samplers: desde The Impressions, Roy Ayers o Jermaine Jackson a Bananarama o The Police, todo usado con la elegancia de siempre.
Ojo, son nada menos que 20 cortes. 70 minutos de música. Hay quien ha acusado a la banda de excederse. Quizás algo más de economía narrativa hubiera sido preferible para algunos, pero, qué quieren que les diga, tratándose probablemente del canto del cisne de una de las bandas básicas para entender el tránsito del siglo XX hacia el siglo XXI me parece que merecían explayarse. Y la cosa funciona: es un disco que requiere escuchas, pero cada tema contiene sus detalles, producto de una meticulosidad a la producción (al fin y al cabo aquí están metidos gigantes como Dj Premier, Pete Rock, Supa Dave West) que hace de su escucha una verdadera delicia.
Es contemplar la grandeza de un legado en todo su esplendor. Por eso este disco no es sólo la despedida de un amigo o una profunda reflexión, hecha sin dramatismo, sobre la vida y la desaparición. Es también la necesaria y pletórica celebración de una de las trayectorias más ejemplares en la historia de la música negra. Demuestra que lo que De La Soul consiguió como trío continúa perfectamente vivo y vigente, incluso con la presencia sólo en espíritu de uno de sus miembros. Y es impresionante cómo han logrado que Dave esté en cada uno de sus surcos. Por eso, de largo no tiene nada, aquí todo es importante, tenía que estar y es altamente disfrutable hasta el punto de poder considerarlo, al menos el que esto suscribe, uno de los mayores logros de este año. Porque De La Soul no sólo son leyendas, siguen siendo referentes.

