Deluxe
«Lo que hace original a «If Things Were To Go Wrong» es que sea tan variado, es algo que en España no se suele hacer. Aún estamos en el nivel de las ortodoxias»
Sin duda, en 2003 ha sido para ti un año muy completo, en el que te has consolidado como solista con tu segundo disco, has editado además otro singles y otro ep, todos ellos con una gran acogida, al igual que tus directos. ¿Qué balance harías?
Pues sin duda, sería un año 10. No me puedo quejar de nada. Todo ha ido mucho mejor de lo que nunca pude esperar. He conseguido vivir de la música, que es lo que de verdad me gusta. Y esto es mucho para un país como éste. Durante unos meses estuve trabajando en Mushroom Pillow, pero si quería dedicarme a la música al 100% no podía compaginar las dos cosas. Es una pena que en España, los grupos no puedan dedicarse a la música por completo.
Este año has editado hasta tres trabajos, un álbum, un ep y un single. ¿Estás atravesando un buen momento creativo?
Sí, yo creo que lo estoy desde que saqué el primer disco como Deluxe. Empezar una carrera en solitario ha sido el punto de inflexión a nivel artístico. Es cuando he encontrado mi fuerte como compositor, cuando más a gusto me he sentido. Yo me di cuenta que el formato de grupo no estaba hecho para mí. Prefiero trabajar solo. Si lo tienes todo demasiado claro es un poco antinatural trabajar en equipo. En un grupo siempre tienes que limitarte al punto en común que encuentras entre las diferentes personas que lo componen. Cuando quieres hacer algo que no le gusta a los otros miembros, empiezan los problemas y no lo puedes hacer. Te estás limitando y eso está condenado al fin.
En las primeras actuaciones de la gira de presentación de If things were to go wrong, utilizabas fragmentos de canciones de otros artistas (With or without you, personal Jesús…), mientras que en las últimas lo has aparcado un poco. ¿Hay algún motivo para eso?
Pues mira, lo hacía porque me salía, era una costumbre que había tomado. Después de haber tocado muchas veces mis canciones, empecé a improvisar y me pareció divertido. Luego con el tiempo me di cuenta que quizás era divertido para mí, pero un poco empalagoso para la gente, porque quizás quería escuchar mi canción tal y como es. Y dejé de hacerlo. Incluso podría parecer que no me tomaba mis canciones demasiado en serio.
Últimamente hemos podido escuchar un par de temas tuyos en anuncios de televisión. ¿Crees que es una buena manera para darse a conocer?
Me gustaría que ayudase más, pero tampoco hemos notado una influencia excesiva. Sí que lo notas en los directos, cuando tocas la canción en cuestión y la gente canta el estribillo. Yo creo que despierta la curiosidad en la gente que ya te conoce, pero no creo que haga que la gente se interese por un grupo, tampoco saben de quien es la canción. Fue un boom de hace tiempo, cuando Subterfuge empezó a sacar a sus grupos, pero eso ya pasó, y los anuncios ahora no tienen la fuerza que tenían.
Aunque ya casi tendríamos que hablar de tu próximo trabajo, mirando un poco hacia atrás, vemos una evolución desde el pop sesentero de tu primer álbum hacia una fórmula mucho menos cerrada y diversa: pop, electrónica, funky… ¿Es eso fruto de tus inquietudes como músico, o porque en Deluxe todo tiene cabida?
Pues por ambas cosas. A mi me gusta todo tipo de música, y los que nos dedicamos a esto tendemos a reflejar en nuestras canciones lo que escuchamos. Pero también es verdad que Deluxe me lo he planteado como algo totalmente abierto, y por eso caben diferentes estilos. Podría haber hecho un disco de un solo estilo, ya sea pop, música negra, rock… pero decidí escoger las canciones que más me gustaban, las que me apetecían.
Entonces no tenemos que entender el disco como una unidad, sino como un conjunto de unidades…
Yo lo concibo más como un disco de singles que como un disco homogéneo. Desde luego no es un disco temático ni mucho menos. Quizás las letras sí tienen una conexión, pero no la música. Aunque al final siempre la hay, la voz es el nexo común, pero realmente es un disco ecléctico y variado. Es algo que te puedes permitir si tienes una mente abierta. Lo que hace original al disco es que sea tan variado, es algo que es España no se suele hacer. Aún estamos en el nivel de las ortodoxias. Todavía funciona todo en pequeñas sectas, como digo yo, y espero que este panorama pueda cambiar. La gente es muy cerrada, y espero que se puedan abrir, porque hay muchas cosas que se pueden hacer mezclando.
Tu tema por excelencia es sin duda ‘Qué no’. ¿Cómo la debemos interpretar? ¿Cómo una declaración de intenciones musicales?
No, no tiene un significado tan concreto. Es una declaración de principios. Siempre se me hace difícil hablar del significado de las canciones, y prefiero que cada uno las interprete. Pero no va por ahí, no habla sobre una chica ni mucho menos, es algo más relacionado con los principios de la vida.
¿No te dio miedo en algún momento en convertirte en artista de una sola canción?
Nunca lo había pensado. Hay que reconocer que es la canción más conocida, pero no lo creo. Es el único single de momento, por lo que es lógico que sea la que a todo el mundo le suene. El segundo single será If things were to go wrong. A ver si tiene el mismo éxito.
Otra de las sorpresas de tu disco han sido los dos temas en castellano. ¿Te sientes igual de cómodo tanto en castellano como en inglés?
No, me siento mucho más cómodo en castellano. Y era algo que no me atrevía a hacer. Ya con la Elephant Band queríamos cantar en castellano, incluso cuando grabé el primer disco como Deluxe me lo planteé, pero da mucho miedo. Cada paso que das y supone un cambio, impone un poco. A mi me hubiera gustado cantar en castellano hace mucho, pero lo he retrasado un poco. El hecho de empezar un proyecto en solitario y abrir otras puertas me ha ayudado a hacerlo.
Entonces para el tercer disco, ¿incluirás más canciones en castellano?
Ahora mismo, tengo alguna canción en inglés, pero sobre todo canciones en castellano. Desde que empecé a cantar en castellano me siento un poco absurdo escribiendo en inglés. También es un poco la necesidad de sentirte un poco más autor. Al hacerlo en inglés parece que estás utilizando las palabras de otra persona.
¿Y musicalmente? ¿Tienes idea de cómo va a ir tu tercer disco? ¿Vas a continuar con la línea más electrónica de We create, we destroy (Mushroom Pillor 2003)?
No, en realidad para mí We create es una manera de cerrar una etapa. No es el principio de algo, más bien es un final. Esto es algo que la gente no sabe. Yo he hecho siempre electrónica en casa, temas que nunca han sido editados. El tercer disco no sé cómo va a ser, me da miedo decir nada porque como en mi cabeza todo está siempre en constante cambio, no sé muy bien lo que voy a hacer. Desde luego tengo canciones preparadas para grabar un disco. Lo que sí que tengo muy claro es que va a haber más canciones en castellano. Incluso podría ser todo en castellano. Pero como también tengo canciones en inglés que también me gustan, pues no sé… Quizás sea menos electrónico. Creo que va a ser más homogéneo.
¿Para cuando te vas a poner en serio?
Pues de hecho estoy ya en ello, estoy trabajando en casa con los arreglos y las letras. Estoy a la vez trabajando con un amigo, con Félix Arias, en el dúo Lovely Luna. Mushroom Pillow nos va a editar el álbum, un poco por placer y al margen de la industria musical. Me apetece mucho y me relaja. Al estar dedicado completamente a la música, puedo hacer varias cosas. Además, en Lovely Luna lo hacemos todo al 50%, por lo que es menos trabajo.
A raíz de todo este éxito, ¿has sido tentado por alguna multinacional?
Pues sí, desde luego. Por muchas. La idea es tratar de llegar a un acuerdo a través de Mushroom Pillow, aprovechar su infraestructura, pero siempre manteniendo no el pie, sino el cuerpo entero en Mushroom Pillow, que en realidad son como mi grupo.