Entrevistas

Fangoria

Si Carlos Berlanga estuviera vivo, estaría trabajando con Guille Milkyway porque sería la evolución lógica de las cosas

Para un treintañero como el que firma estas líneas, tener concertada una entrevista con Alaska, posiblemente el personaje pop más icónico de España tras la desaparición de Tino Casal, es cuanto menos una montaña rusa de sensaciones. Por un lado he de enfrentarme a una entrevista lo más objetiva posible para acercar el personaje a Muzikalia, pero por otro lado se hace difícil aparcar toda pasión cuando quien contesta al otro lado es la reina de La Movida Madrileña y la artífice de tres de los mejores grupos de música española de las últimas décadas.
 
Alaska sigue siendo aquella bruja de La Bola de Cristal con la que me desayuné mi infancia y es la reina catódica de la MTV. Ante semejante estrella invitada, lo mejor que se me ocurrió fue calzarme zapatos de tacón para intentar estar a su altura y hablar sin tapujos  de su pasión por  Bowie, La Casa Azul, Hidrogenesse, sus fans, el reality, el futuro de Fangoria, la bipolaridad de sus seguidores, su forma de componer, sus colaboraciones etc. Con todos vosotros «Alaska, La Locuaz«… a corazón abierto.
 
Lo primero, de un géminis a otros dos géminis, felicidades por vuestros recientes cumpleaños.
 
Muchas gracias, ¿cuándo los cumples tú? (…) ¡Anda! Pues vamos los tres en fila, primero los cumple Nacho, luego tú y luego yo…
 
Los géminis siempre hemos tenido fama de lucir dos personalidades bien distintas, siempre hemos sido un poco bipolares, lo mismo se podría decir de vuestros seguidores, son capaces de defenderos hasta la extenuación pero también reconozco que son terriblemente duros a la hora de ser críticos con vuestras decisiones profesionales ¿cuál creéis que es la causa para que el público de Fangoria sea tan bipolar? ¿Un exceso de empatía, de cercanía emocional, tal vez de confianza podríamos decir…?
 
Yo eso no lo puedo saber, pero creo, sospecho, que cuando tienes fans siempre es así. Probablemente el seguidor se cree con ciertos derechos, yo eso nunca lo he entendido, porque yo nunca lo he sentido así. Cuando a mí un disco de Bowie no me gusta, no es un problema de Bowie básicamente, más bien es un problema mío, si acaso es un problema. Hay cierto talibanismo en el fan, y se demuestra de muchas formas, pasa por ejemplo cuando un grupo es minoritario y da un salto a lo mayoritario, la gente no está dispuesta a que su portera escuche lo mismo que uno escucha, o que el grupo no haga lo que uno espera, como si uno fuera un productor musical que pudiera tener una decisión. Esto es así. Es una cuestión de no saber tomar distancia, a tí te tiene que gustar algo por cómo es, no por cómo tu quieres que sea. Y en eso tenemos mucha suerte, siempre será mejor tener gente implicada a pesar de todo lo otro que pueda traer, que a tener gente que en el fondo le da igual lo que haces.

Esta pregunta iba dirigida a Nacho pero como no lo tenemos aquí … ¿qué crees que tiene Alaska para que a pesar de llevar desde los 14 años expuesta a los medios todavía siga siendo tan querida por todo el mundo,  desde los yonkis de las barranquillas hasta las señoronas del barrio de Salamanca? 
 
Yo esto creo que sí que es verdad en general, pero con matices, también hay gente que te detesta y no pasa nada. A veces es una afirmación, según quién te detesta dices… sí , sí, vamos bien. A veces es verdad que te detesta gente que tú no sabes por qué, que le gustan las mismas cosas que a ti. Tiene que ver mucho con la televisión, con escribir, no tiene que ver solo con la música. La gente se acostumbra a verte en la tele y se acostumbra a verte actuar, a opinar, se hace una cuenta del carácter que tienes. Yo llevo en la televisión más allá de la promoción de los grupos en los que he estado desde el año 82 y es más que nada porque la gente te conoce, no es más que eso…
 
… (interrumpo) sí, la gente te conoce, pero no me puedes negar que eres un personaje mayoritariamente querido y no sólo por estar constantemente en el foco…
 
… (me interrumpe) pero tiene que ver con el carácter,  con que muchas veces las cosas que dices pueden no ser del agrado de esa señora, pero las forma en que lo dices no es hiriente y no se sienten ofendidos. Yo te lo digo un poco por lo que me dice la gente por la calle (ríe) las señoras me paran y me dicen que aunque no piensan como tú ni como esos amigos que tienes que supongo que se referirán al mundo del travestismo y todo esto, pero sois muy majos y educados…yo que sé,…no es tan distinto a la primera vez que salí en televisión. Tú es que eres muy joven, no sé si vas a saber cuál era un programa que se llamaba «La Clave» de José Luis Balbin, cuando solo había una cadena de televisión que era La 1, los viernes por la noche se ponía una película y en torno a eso había un debate sobre el tema de la película, no sobre la película en sí. Por ejemplo si era el asesinato de Kennedy o yo que sé… pues el debate iba sobre los regicidios y yo iba ahí de ponente, luego la gente me decía (que esto supongo que ya estará superado), ¡ay! con lo rara que pareces y lo rara que vas vestida y luego hablas normal.
 

 
Sois grandes amantes de la música, y me consta, especialmente a través del blog de Nacho en spicnic.com que os mantenéis al día respecto a grupos nuevos. En la música española quién consideráis hoy en día dignos de elogio.  
 
Pues yo sigo pensando que los mismos, y ya sé que estamos al margen de cualquier tipo de corriente, pero sigo pensando que mientras exista La Prohibida, exista Hidrogenesse, exista Chico y Chica o existan Nancys Rubias, anquen sean muy cercanos no puedo dejar de mencionarlos, a mi el resto me interesan muchísimo menos.
 
Maravilloso el último de Hidrogenesse (afirmo)
 
Maravilloso, como todos (confirma)
 
Estos días compartís titulares en la prensa con uno de vuestros referentes. David Bowie ha vuelto a la vida y lo ha hecho de una manera tan inesperada que ha desencadenado una «tormenta solar perfecta» (en referencia al título de una de sus últimas canciones) en los medios de comunicación. ¿Habéis tenido la ocasión de escuchar su nuevo disco? ¿Sigue significando tanto para vosotros? ¿Veis a Fangoria con un «comeback» de esas características dentro de 15 años?
 
A lo último no sé contestar porque yo no tengo claro que nos vayamos a ir, así que nunca lo sabes. En el caso de Bowie él es solo, él probablemente tenga otro tipo de decisiones en su vida.  En el caso nuestro, Nacho y yo nos retroalimentamos el uno al otro y por tanto es diferente. El disco a mi me encantó, a Nacho doy fe que también y los dos pensamos que es un disco muy coherente con esa persona llamada David Bowie en el siglo XXI, una persona que tiene una edad, tiene una trayectoria y probablemente aunque ahora mismo hay un montón de fans de doce años que darían la vida porque hiciera un «Ziggy Stardust», él ya hizo un «Ziggy Stardust» hace cincuenta años como quien dice y probablemente esté en otra y está muy bien en esa otra en la que está. No es un disco que me haya cambiado la vida, no es un revulsivo pero es un disco bonito y muy coherente.
 
¿Lo dices por aquello de no volver al pasado…»una única concesión al pasado»..?
 
Pues yo no sé si es una cuestión tanto de volver… ¿a ti no te parecería un poco triste ver a Bowie haciendo «Ziggy Stardust»?, es cuestión de no dejarlo nunca. Por ejemplo, Iggy Pop seguirá siempre siendo Iggy, y no ha dejado nunca de serlo, de ir desnudo y de culebrerar como lo hacía entonces. Igual pasaría si siguiera vivo Lux Interior, que son ellos, son así, no son una cosa ni del pasado ni del presente, pero Bowie se ha reinventado muchas veces y lo lógico es que ahora esté en la situación en que está una persona de su edad.
 
¿Qué opinión os merece la reedición de algunos discos que el paso del tiempo ha convertido supuestamente en icónicos como «Una Semana En El Motor De Un Autobús»  de Los Planetas o la anunciada reedición en vinilo del disco de Family? ¿qué disco de Fangoria se merecería ese honor?
 
Pues sinceramente ninguno, porque odiamos profundamente esas reediciones y esas cajas de singles que sacan.  Todo eso nos parece horrible, nunca las hacen los artistas, siempre lo hacen los departamentos comerciales de las compañías con otro que pasaba por allí y aprovechan la ocasión. Me paree que no es necesario. Lo que no habría que hacer nunca es descatalogarlos. Lo que hablábamos de Bowie, no te hace falta volver si no te has ido, los discos deberían estar siempre ahí y hoy en día con mundo digital los discos están siempre ahí. Creo que es lo único que creo que puedo decir, que los discos estén siempre ahí. Pero hacer reediciones, yo no voy a hacer nunca una reedición de un disco que ya existe. Es como lo de tocar un LP en directo, hasta Primal Scream tocando «Screamadelica» en directo me horrorizaría.. que los vería porque me encantaría ver «Screamadelica» en directo, pero los tendría que haber oído en el 89 o en el 90 no ahora, eso no me hace demasiada gracia.
 
Mucho se ha hablado y rumoreado sobre vuestra implicación directa a la hora de componer ¿cómo se reparte Fangoria el trabajo? ¿Cuánto peso tienen los colaboradores externos como por ejemplo la micropoetisa Ajo que escribió parte de la letra de «Retorciendo Palabras» o «Lo tuyo no es normal»?
 
Primero viene la música siempre, nosotros no somos poetas, nosotros componemos sobre una melodía concreta, con una métrica concreta. Esa música siempre viene de mano de los colaboradores con los que estemos trabajando en ese momento, de Mauro Canut o Juan Carlos Aured, o Jaime, ahí sí que tenemos la manga más abierta. Luego las letras hemos sido siempre muy reacios, pero por cuestiones personales ha habido momentos donde ha habido colaboradores, pero básicamente las letras se dividen, cada uno hace su parte, nunca trabajamos juntos y luego se entrega y ya está. En «Cuatricromía» cada uno escribió la mitad.
 

 
Impagable la frase de «la inteligencia de las gambas», dicho sea de paso.
 
…(risas) sí, un ex estudiante de biología como Nacho sólo podía venir con eso.
 
Se os ha acusado, juzgado y condenado por trabajar siempre con gente de vuestro entorno ¿Es bueno trabajar siempre con «las amigas», no se corre el riesgo de encasillarse o acomodarse»?
 
Pues sí, se corre el riesgo pero para eso tienes más colaboradores aparte de los habituales, con cuanto más gente trabajes menos trabajo estas dando a cada persona, estás dividiendo el trabajo. Pero yo creo que ya a estas alturas todo el mundo sabe que Nacho y yo somos así y que cuando hicimos Fangoria teníamos muy claro que Fangoria éramos nosotros y precisamente nosotros dos significa que no íbamos a tener ninguna tiranía ni obligación de trabajar con nadie en concreto. Así que si no nos gusta lo que hay, cambiamos. Mauro es un referente desde el principio de Fangoria y casi desde el principio de Dinarama, pero no todas las canciones son de Mauro ni los singles son de Mauro. Y con los productores pasa lo mismo. Aunque parezca que trabajamos con la misma gente, no es así, siempre hay gente nueva.
 
Hace no mucho, antes de conocer vuestra colaboración para Cuatricromía escribía en la crónica de un concierto de La Casa Azul que Fangoria y Milkyway compartían el mismo concepto de espectáculo a la hora de concebir sus conciertos ¿para cuándo una colaboración en el escenario con Guille Milkyway?
 
Pues esa una posibilidad desde luego, pero no lo hemos planteado. Aunque parece lógico que ocurra teniendo en cuenta la poquísima gente que hay con la que compartamos una visión de lo que es el pop, de lo que es la música y el espectáculo no sería nada de extrañar que termináramos haciendo algo juntos. No te digo que ni que sí ni que no, porque no hay nada ahora. Pero parece algo obvio, siempre decimos que si Carlos Berlanga estuviera vivo estaría trabajando con Guille Milkyway, porque sería la evolución lógica de las cosas. Porque Guille tampoco es representativo de la música que se hace en este país, de la música que  va a los festivales. Somos personas extrañas, que no somos un gueto, nuestros fans no son un gueto, aunque no somos la típica música de los grupos que gustan a los heterosexuales, tenemos todo tipo de fans pero no son exactamente el típico estilo de seguidores de festival y camisas a cuadro, ya sabes lo que quiero decir…
 
Un lugar común entre los periodistas a la hora de definir a Fangoria es hablar de que estáis a medio camino entre el mainstream y la escena indie. ¿Cómo os véis vosotros mismos ahora en 2013?
 
Pues es que ese es nuestro límite, pero no lo veo un límite, es nuestro estado. En otros países ese límite, esa zona, no es tan solitaria como en España, el resto de nuestros compañeros de viajes están en un underground más underground todavía. Y siempre estaremos ahí porque independientemente del número de discos que vendas o de conciertos que hagas, siempre estarás ahí. Es igual que cuando Dinarama vendíamos un montón de discos y no pertenecíamos a Mecano,  igual que tampoco encajaremos con «las indies, indies, indies» porque no, porque tampoco. Es un punto en que no encajaras por la forma de ser.
 
¿No veremos a Nacho Canut vestido de hypster?
 
Pues no. Porque lo que hoy es ser hypster, antes era el grunge y antes era no sé qué y son como posturas condenadas a desaparecer. Si te fijas toda la otra gente de la que estamos hablando es inclasificable. Tú no puedes decir que  Genís (de Hidrogenesse) sea un hypster ni sea nada, ni lo era, ni lo fue, ni lo será, porque es un señor individual, con una personalidad arrolladora muy grande que son la gente que a nosotros nos interesa.
 
Este año tampoco habéis aparecido en el Orgullo Gay en Madrid aunque vuestra presencia en la manifestación ha sido un clásico durante muchos años ¿seguís siendo tan reivindicativos con el colectivo gay como antes o no lo consideráis ya tan necesario?
 
No hemos estado porque nos costaba dieciocho mil euros y hemos decidido destinarlo a otras cosas. Hemos estado encantados de hacerlo durante muchos años, pero ese dinero este año lo hemos destinado a grabar nuestro disco, a grabar los vídeos. Nos encanta estar en la manifestación de una forma muy presencial, pero en el fondo es un capricho, en el sentido económico quiero decir, porque estar de otra forma menos visible aunque estés nadie se entera…
 
¿Os planteáis un disco más orgánico menos electrónico en un futuro?
 
No se me ocurre ninguna razón por la que lo vayamos a hacer, sinceramente. Ni creo que lo hagamos, sólo hicimos…
 
…¿En «El Extraño Viaje» con la colaboración del bajista de Placebo y un batería?…
 
..sí pero eso tampoco lo convierte en algo más orgánico. Depeche Mode son el grupo electrónico por excelencia y todas sus baterías son grabadas. Esa no es la diferencia para llamar a algo por eso electrónico. Lo más orgánico que hicimos fueron unos conciertos especiales en Madrid, que Eric de Los Planetas tocó con nosotros, la primera parte del concierto fue sin ningún tipo de secuenciador, fue todo batería, teclado, bajo, y violín y sí, fue muy divertido hacerlo una semana, pero no más.
 
¿En qué está influyendo a Fangoria la decisión de Alaska de hacer el reality «Alaska y Mario» en la MTV?
 
En la adolescencia. Nosotros nunca, y cuando digo nunca hablo desde Kaka de Luxe a Fangoria hemos tenido público adolescente. Hemos tenido público infantil y adulto. Hemos tenido niños seguramente desde Pegamoides y por supuesto con Dinarama y La Bola de Cristal. Por mi imagen yo les gusto mucho a los niños, y me encanta. Luego hemos tenido publico de veintiún años para arriba, pero adolescentes no habíamos tenido nunca y a mí me resulta muy fascinante porque claro es una edad muy total, muy maleable, en que estas descubriéndolo todo, porque a un niño le gusta porque le gustas, no se está planteando nada, no está descubriendo a Bowie, le gustas porque le gustas tú y punto, que eso también es muy total porque es muy de verdad. Pero también me encantan esas niñas que llegan con sus camisetas de Bowie o han descubierto a los Cramps, o yo que sé a Elvira, van descubriendo cosas a través del reality por las cosas que tú tienes y a raíz de ahí se forman y van descubriendo por ejemplo a Fabio McNamara….eso me resulta muy fascinante.
 
Gracias por la entrevista y todos esos buenos momentos musicales que nos has dado y las grandes tardes de concierto con «Las amigas». Sé que esto no debería decirse para terminar una entrevista por aquello de la objetividad.
 
No, al contrario, eso lo debes decir siempre, en una entrevista y fuera de ella. Siempre gusta. Gracias a vosotros.
 

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