Los Tiki Phantoms – Mueven el Esqueleto (B-Core)
La primera vez que escuché a estos cuatro catalanes de ultratumba, hace ahora unos cinco años, supe que me enfrentaba a uno de los grupos de Surf que más darían que hablar en nuestro país. Cierto es que no ha sido, este, un género muy cultivado por nuestras latitudes, pero también es verdad que de un tiempo a esta parte se está viviendo lo que podríamos llamar una pequeña edad de oro de este estilo menor. En buena medida, pese a quien pese, gracias al éxito de bandas como Los Coronas, que han llevado el Surf Rock a recintos, festivales y público que de ninguna manera habrían accedido a esta disciplina musical basada en las guitarras a tope de twang y reverb.
El tercer trabajo de estos cuatro calaveras, también grabado para el sello B-Core, nos muestra a unos Tiki Phantoms que, sin haber perdido ni un ápice de frescura y gamberrismo que les caracteriza, han madurado el sonido, y se muestran a la vez más variados en las influencias.
Siguen empeñados en no cantar en ni una sola de las canciones, haciendo bandera de un género difícil, y que puede cansar al receptor si no se hace bien. Nada por lo que preocuparse, Los Fantasmas Tiki vuelven a mostrarnos una colección de lo que podrían, perfectamente, ser bandas sonoras de films que muchos tenemos en nuestro imaginario. Así, por ejemplo, el corte que abre el disco, “Bala de Plata”, nos puede hacer imaginar un film del fallecido Paul Naschy, o “Rescate” bien podría evocar un film de espías de los setenta.
No se olvidan de sus influencias, nada disimuladas, punks, y no es difícil de imaginar que se pueden haber inspirado en The Dictators para el comienzo de “Tridente”, o que bien que se pueden haber encomendado a los Dead Kennedys para componer “Fuego”. Tampoco se olvidan del Soul más bailable en “Cuerpo que Explota”, demostrando su solvencia a la hora de componer y emplear los arreglos.
Lo dicho, de lo mejorcito del Surf Rock ahora mismo, tanto por España como a nivel internacional. Por cierto, sus directos son salvajes y marcianos, si pasan por tu ciudad no dejes de verlos.
