Orenda Fink – Invisible Ones (Everlasting)
Una de las razones por las que Orenda Fink decidió hacer un disco en solitario fue porque tras su experiencia con Azure Ray creyó conveniente y necesaria una aproximación más personal a la composición. Según confiesa en su propia web www.orendafink.com sus viajes por la India, Camboya o Haití la ayudaron a enfocar sus verdaderas preocupaciones y a exteriorizar unos sentimientos que con Azure Ray se quedaban un poco fuera de juego. La espiritualidad, lo místico y lo indeterminable son variables de la condición humana, e Invisible Ones, no es más que una colección de canciones donde estas variables han dado como resultado la expresión personal (o la revelación) de una artista sensible y comprometida.
El debut en solitario de Orenda Fink se empapa de músicas ancestrales, a veces de un tono épico que recuerdan a Enya, melodías exóticas y/o místicas que captan el relato de un viaje interior donde busca reconciliación consigo misma y por ende, con todos los pecados capitales.
A pesar de sonar un tanto pretencioso, Invisible Ones encaja con la imaginería neo folk de la familia Saddle Creek, y cuando no hace gala de la nueva misticidad adquirida aún resuenan ecos del Brigth Eyes inditrónico, como en “Dirty South” único corte con base rock y matices electrónicos. En cualquier caso, un tanto aburrido y decepcionante, demasiado olor a incieso barato.