Pilot To Gunner – Get Saved (Arena rock recording co.)
Si hay un género musical que ha perdido la vigencia y la intensidad que poseía antaño es, sin duda alguna, el denominado movimiento emo-core. Estamos asistiendo en los últimos tiempos a un continuo deterioro de todo lo acertado que habíamos encontrado en los discos de este estilo, e, incluso, valores seguros como J. Robbins (productor del disco que hoy comentamos) parecen haber perdido el norte y sus producciones carecen en estos momentos de la rotundidad que poseían antes.
El cuarteto neoyorquino Pilot to Gunner nos presentan su nuevo disco en el tramo postrero del movimiento, y, por lo tanto, se balancean peligrosamente en la cuerda floja del desengaño y del cliché. Sin embargo, hemos de decir que consiguen mantenerse en pie con cierta dignidad y que su disco es una de las últimas muestras dignas que puedan adscribirse a dicha tendencia emo-core.
Su segundo trabajo, Get Saved, es un último – y quizá anacrónico – intento por recuperar los riffs infalibles de Jawbox y de Jawbreaker, mezclado con los aciertos de los omnipresentes AC/DC y algunos toques del rock inteligentemente comercial de Foo Fighters. El resultado de esta suma de valores seguros es satisfactorio y de eso es, en definitiva, de lo que se trata. No obstante, las acertadas canciones están lastradas por una producción ineficaz, perdida, centrada exclusivamente en las voces y las guitarras y que se olvida de las bases rítmicas, con lo que tenemos un disco indolente y sin la tensión necesaria para impactar.
Está claro entonces que lo único que salva a Pilot to Gunner son sus canciones, porque la mayoría de las incluidas en este álbum son de una gran calidad. Por ejemplo, la dinámica y furibunda “Metropolitans”; o la sorprendentemente tarareable y embriagadora “Barrio Superstarrio”; o las fornidas y sinceras “Hey Carrier”, “Get saved” y “No-blooded”; o las reposadas y meditativas “Dry ice & strobe lights”, “Sorry names” y “Hot circuitry”. Lástima que el tratamiento sonoro que reciben no esté a la altura de su perfección formal.
Para terminar diremos que el canto del cisne del emo-core está siendo entonado en discos como este Get Saved. Lp’s que vienen a poner fin a un fecundo movimiento que se ha desintegrado por el abuso de unas fórmulas y por la aparición de multitud de imitadores sin genio que han ocupado las estanterías de nuestras tiendas de discos y las pantallas de nuestros televisores. Una pena.