Tardor regresan a las raíces en Patraix
Tardor es un grupo valenciano formado por Àlex Martínez (voz y guitarra), Cesc Domènech (batería), David García (guitarra) y Tono Hurtado (bajo). Recientemente se ha unido a ellos Yeray Calvo (teclados y la guitarra). En 2012 publicaron su primer álbum, Revolució de L’Estat Latent. Dos años después le dieron continuidad con un nuevo disco, La Ciutat Invisible. Eran discos de pop rock electrizante, impetuoso, muy en la onda del indie rock tan en boga. Pero los dos últimos años han sido de reflexión para Tardor, de cuestionamiento de su carrera y su personalidad. El resultado de dicha reflexión es Patraix, el nombre de su barrio en Valencia. Tras hablar en sus canciones del «Sena», o de «Ontario», parece que sintieron la necesidad de reducir su mundo y regresar a sus raíces. Quizás no tanto musicales como sentimentales y vitales, teniendo en cuenta que los miembros del grupo rondan todos los treinta años.
Patraix, el tercer álbum de Tardor, refleja esta vuelta a casa. No solo en la temática o el nombre de las canciones («Marjal», «Patraix», «Nevar a València») sino también musicalmente. El volumen y el ritmo, la electricidad intensa, ven rebajada su importancia, aunque hay temas donde el rock asoma la cabeza y, al escuchar la combinación de guitarras y teclados, uno puede intuir a Springsteen y la E Street Band entre las referencias que maneja el grupo. Las letras se vuelven más reflexivas, cuentan historias de la vida cotidiana («Vull que comprem una casa») y desvelan algunos detalles de las decisiones que ha tomado la banda («La corda»). La música se acerca a un folk-rock con incursiones en la electrónica. No son los únicos cambios: además de la ya mencionada incorporación de Yeray Calvo, la banda publica Patraix en su propio sello, Primavera d’Hivern.
Puedes escuchar Patraix, lo último de Tardor, en Spotify.