The Dandy Warhols + Telegram (Sala Joy Eslava) Madrid 11/02/17
Live Nation nos traían a los de Portland a nuestros escenarios en una mini gira en dos únicas ciudades, Madrid y Barcelona. Una visita, además, novedosa en cuanto al hecho de poder ver a la banda en salas y no en festivales y es que The Dandy Warhols ya no despiertan el mismo entusiasmo, a pesar de haber editado el año pasado el disco Distortland (Caroline/Music as usual) un regreso muy por encima de lo que todos esperábamos.
Les están acompañando en esta gira internacional la interesantísima banda londinense Telegram, que editaron su primer L.P, Operator (GramGram) el año pasado, doce canciones que se mueven entre la Psicodelia el Glam y el Rock & Roll más sucio y que mantienen el tipo durante todo disco. Tal como hicieron sobre el escenario de Joy Eslava, mantenerse firmes y tratar de ofrecer un bues espectáculo a pesar de haber sido relegados a un extremo del escenario. Algo ridículo si tenemos en cuenta el tamaño del escenario de la sala y aún más sangrante si al estar atento al cambio de “backline” por parte de los técnicos, te das cuenta de que este tiene que ser todo sustituido. Vaya; que no hacía falta poner a los chavales en diez metros cuadrados. Deben ser cosas de compartir escenario con una banda que un día fueron reyes.
El caso es que el cuarteto se defendió como buenamente pudo y logró atraer la atención de los pocos que andábamos por allí a esa temprana hora, las 20:15, a base de riffs poderosos, cancionero contundente, estética y actitud, “Haircut & Attitude” que decían The Dictators. Finalizaban su corto show ante una ya nutrida sala y lograban meterse al personal en los bolsillos de sus raídos pantalones, con una versión del “Heroes” de Bowie.
Salían al escenario Courtney y los suyos y se colocaban en sus correspondientes lugares, algo ya hacía presagiar que no iba a ser un concierto en el que respetable y banda fuese a conectar de manera espectacular. ¿Colocarse en el escenario lo más lejos posible del público? No ayuda, desde luego. ¿Otra rémora de cuando su medio natural eran los grandes recintos? Se parapetaban los casi 1,90 de Courtney detrás de dos micros, junto al batería Brent Deboer, en una disposición de escenario algo inusual y comenzaban la actuación con un sonido paupérrimo digno de una barraca de feria.
A pesar de temas tan incontestables y reconocibles como: “Be-In”, “Get Off” y parte de los mejores cortes de su último trabajo, por ejemplo: “Catcher in the Rye” y “STYGGO”, el comienzo de actuación no acaba de cuajar, los problemas con uno de los teclados de Zia McCabe, la única (junto al batería) que parece estar pasándolo bien encima del escenario, también empañan una actuación ya de por sí tocada.
En el ecuador de actuación, Cortney se quedaría solo en el escenario para afrontar una chocante versión en formato acústico de otro de sus grandes éxitos, “Every Day Should be a Holyday”, cantada con el micro con el que se oía a medias, con el otro directamente la voz se diluía entre el resto de sonidos, bien podía haber estado recitando el menú del restaurante de su hotel, no nos hubiéramos enterado.
Cuando el resto de Warhols volvían a sus respectivos sitios y como si esa parada hubiera servido de poción mágica, la actuación despegaría por fin dando lugar a los momentos más intensos del concierto. Temas como: “Plan A”, “Holding me Up” u otro de sus nuevos temas, “You are Killing Me”, lograban conectar con un público que ya iba demandando algo más que escasa iluminación (a petición de la propia banda) y sonido descafeinado. “We Used to be Friends”, la archiconocida “Bohemian Like You” y “Boys Better” lograban salvar la actuación del descalabro total.
¿Quién sabe? Quizás The Dandy Warhols nunca fueron reyes y siempre han sido una banda de psicodelia oscura o quizás ahora hacen lo que siempre quisieron hacer, tocar, pasar desapercibidos y no dejar prácticamente huella de su paso.
Que pongan limitaciones al sonido me parece intolerable, ya lo manifestó Courtney Taylor, no podían sonar todo lo alto que ellos querían. Una putada para banda y público.