Klaus & Kinski – Tierra Trágalos (Jabalina)
Aparecieron con Tu Hoguera Está Ardiendo (Jabalina) a finales de 2008 para revolucionar el panorama indie nacional, y tras el impulso que supuso su EP Por Qué No Me Das Tu Dinero (Jabalina) hace ya casi un año, vuelven al mercado Marina y Alex para presentarnos su nuevo trabajo: Tierra Trágalos, y qué más se pude decir que… ¡vaya discazo les ha salido a los murcianos!
Catorce canciones (quince si te compras el vinilo) en los que la banda emplea de nuevo todo su arsenal creativo y musical, para mostrar toda una inmensa variedad de sonidos, estilos, ritmos y efectos con tal descaro y personalidad, que te hacen enmudecer. Desde el shock producido por el impactante y escalofriante comienzo de “ya estaba así cuando llegué” con guitarras, y electrónica cercanas a Placebo o al shoegaze, a los sonidos pacificadores y melancólicos onda Smiths de “Mamá, no quiero al colegio” donde el papel protagonista pasa a las agudas melodías de violines y ukelele. Cambios drásticos que se siguen produciendo a lo largo de todo el disco, donde no es difícil de distinguir más de diez estilos o temáticas diferentes. Pop electrónico, donosti-sound, post-rock, o incluso el reflejo de la música más tradicional española de la mano de “el rey del mambo y la reina de seba” con una banda con guitarra acústica, bandurrias, flautas, y una trompeta solista tan características de las bandas municipales del levante español, que sin embargo viene precedida por una rápida, electrónica y feliz “brilla como una estrella”.
Contraposiciones constantes con el único denominador común de la dulzura de la voz de Marina Gómez, y que a través de una producción excelente, (a cargo del propio Alejandro Martínez) consiguen crear una atmósfera diferente para cada canción, en un universo conjunto en el que conviven y compiten entre ellas por ver si cada canción es mejor que la anterior, o al menos por ver cuál es la más original, la más orquestada, la más electrónica o la más irónica. Una sana competición en la que es más que difícil proclamar a los campeones, pero entre los que se podrían destacar la sureña “adiós al capital”, la absurda y a la vez tan genial “”forma, sentido y realidad” o el poliédrico, sesentero y divertido “Sobria y Serena”
Un nuevo reto para los adjetivos de todo crítico musical, y una escucha obligatoria, sean cuales sean tus preferencias. En definitiva, 60 minutos de sorpresas y canciones, sencillamente indescriptibles.