Cala Vento – Balanceo (Montgrí)
Siempre me han gustado las cosas sencillas, sin pretensiones ni alardes de grandeza. El café con hielo, el olor a tierra mojada, las puestas de sol, una cerveza fresquita… Son las cosas simples las que hacen únicos los momentos, y es en ellas donde podemos encontrar el atractivo más complejo y difícil de entender. Por desgracia, creo que muchas veces hemos olvidado que son estos momentos donde encontramos la verdadera belleza.
En la música, me ocurre más o menos lo mismo, una guitarra y una voz profunda me llega mucho más que un videoclip de varios millones de euros o un concierto con media hora de pirotecnia. Y no digo que una cosa no quite la otra, no me malinterpretéis, solo digo que muchas veces con humildad y sinceridad puedes llegar más fácil al corazón del oyente.
Aleix y Joan son dos amigos que en 2015 deciden fundar Cala Vento. Ambos son originarios de la zona de Ampurdán (Gerona). El primero de Figueres y el segundo de Torroella. El alto Ampurdán y el bajo Ampurdán. Con la expresión de no siempre más es mejor, deciden fundar un grupo en Barcelona basándose en una mínima unidad indivisible: El dúo. Guitarra y Batería les basta para demostrarnos a qué suena el viento de la tramontana.
Cala Vento es el fiel reflejo en el panorama Indie español; de que en la sencillez esta la grandeza. Joan Delgado es la batería (y la voz) y Aleix Turon el guitarrista (y también voz). Este grupo catalán nos ha demostrado dos elementos muy importantes: El primero, que el pop puede ser tajante, energético e implacable. La segunda, que la reflexión y la espontaneidad pueden ir juntas de la mano, retroalimentarse la una a la otra, demostrándonos que la palabra música perdería su sentido si no se muestra sentimiento al trasmitirla.
Algunos, por su composición, les comparan con Japandroids; otros, por su sonido, a Nueva Vulcano. E incluso ellos mismos establecen que, en algunas partes, se han inspirado desde Prefab Sprout hasta Nirvana o Foo Fighters. Desde mi punto de vista son un ente aparte de difícil comparación, y el cual, en un presente y futuro cercano, lo tendríamos que utilizar como modelo a seguir.
Fue en 2016 cuando presentaron su primer disco de nombre homónimo: Cala Vento (Bcore Disc, 2016). Un disco desafiante y con mucha personalidad, demostrando las ganas que tenían de comerse el mundo. Solo tuvimos que esperar un año para que nos enseñaran su segundo álbum de estudio: Fruto Panorama (BCore Disc, 2017). En este álbum consiguen mantener su actitud y estilo provocador, y, además, son capaces de mejorar en una producción más cuidada y unas letras que destacan por una mayor profundidad y cercanía. Con estos dos discos fueron capaces de conquistar a un público entregado en sus conciertos y a una crítica que marca de intachable su sonido.
Como las flores en primavera, Cala Vento se renovó en abril sacando su tercer disco: Balanceo (Montgrí, 2019). Un disco editado por ellos mismo, que además acompañan con una película compuesta por una serie de cortos con diferentes escenografías donde van poniendo imagen a todas las canciones de Balanceo.
Este disco muestra lo que es capaz de producir este grupo catalán; la mejor de sus expresiones de momento, (y eso que era difícil). Es la confirmación de que se han convertido en uno de los mejores grupos de la escena música española, y que visto lo visto, no podemos hablar de una consagración como grupo ya que, desde mi opinión, no tienen techo.
Balanceo es un álbum que en cierta manera se aleja de su sonido primigenio pero es capaz de mantenerlo en ciertos detalles sin sonar repetitivo. Letras ingeniosas, sonidos cuidados, una capacidad expresiva impresionante tanto en directo como en formato digital o físico.
El disco conformado por 11 canciones comienza con un tono acústico representado en la canción “un buen año”. Tarda sólo 40 segundos en desaparecer y dejar paso a un sonido eléctrico y es incluso acompañado por una sección de vientos que nos remiten a una letra basada en una autoexploración de vivencias. Esta canción da paso a “la comunidad” un tema energético y adictivo que mezcla algunas frases con cierto tono político y un estribillo que esta creado para cantarlo a gritos. La siguiente canción titulada “Gente como tú” nos recuerda a los primeros Cala Vento, un tema que se ha convertido en una de las más famosas del disco y del propio grupo. Un combinado perfecto, una mezcla ganadora. Tras un redoble del batería comienza “do de pecho”, un tema con una estructura compleja, variaciones en el tempo de la canción e incluso diferentes formas de cantar que le dan un tono un tanto funk. En “solo ante el peligro” prevalece un tono melódico y una profunda crítica política frente a las instituciones y a favor de la libertad de expresión. Esa crítica no desaparecerá y la podremos encontrar en “remedio contra la soledad”, en la que, mediante la utilización de un bajo como instrumento principal, arremete contra el uso de las redes sociales. En la canción “todo”, esas referencias contestatarias se mantienen, aunque en esta ocasión nos la presentan con un tono más rapero. Es en la canción “Bienvenidos a la tierra” cuando ya la crítica y su carácter contestatario se hacen más claros y precisos, sin dar lugar a equívocos u otras interpretaciones, con un tono más punk nos llaman a la organización. El último tema del álbum vuelve a la autoexploración como banda, como conjunto de vivencias. Y es que, “fin de ciclo” es el broche perfecto para un disco que empieza como acaba: de manera contundente.
Este grupo sale de la comodidad de la normalidad, y es que hace falta gente como ellos en cada plaza. Paso a paso se están convirtiendo en los reyes de la pista, mostrando que la oportunidad que tenían era grande y los motivos importantes. Porque Balanceo es puro vicio, un juicio tan certero y letal que mantiene las constantes de la forma más vital. Los Cala Vento nos sedujeron en el 2016, nos cautivaron en el 2017, y ahora, con este nuevo disco, nos han enamorado definitivamente.
Escucha Cala Vento – Balanceo
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