Caroline & The Treats – Wurlitzer Ballroom (Madrid)
Caroline & The Treats es el prácticamente recién estrenado proyecto del guitarrista noruego, Morten Henriksen, (The Yum Yums, The Twistaroos…) junto a su pareja, la ex estrella del porno noruego, Caroline Andersen. Acaban de editar su primer disco larga duración, titulado Bad All Over, qué pasaría con notable alto cualquier examen de Rock & Roll. Sus influencias no pueden ser más claras: Ramones, Blondie, Dictators, The Runaways… y no disimulan ni un ápice a la hora de enfrentarse a la audiencia esgrimiendo sus gustos y rindiendo pleitesía a sus ídolos.
Y es que su primer disco es un gratificante ejemplo de cómo hacer las cosas y el porqué de las mismas. Musica hecha por fans y para fans, una colección de trallazos Punkpop simples y sinceros que no sentaran las bases de lo que será el Rock & Roll en el futuro, ni influirán a multitud de bandas, pero que están ahí; sudando el rock con sinceridad y sin importarles el resultado final.
Y eso fue lo que hicieron básicamente el cuarteto de Oslo, conformado además de la pareja anteriormente mencionada, por: Glen Glitter al bajo y Ole Nesset a la batería. Con una sala Wurlitzer a medio gas en lo referente al aforo, los cuatro noruegos no parecieron dar importancia a este detalle y decidieron salir desde un principio a darlo todo sobre el escenario. Su carta de presentación en todos los directos, “Hey Hey We are Caroline & The Treats” sería la primera de las canciones con la que castigarían al personal, tocaron el álbum entero sin dar tregua y al más puro estilo “Ramone”, sin apenas paradas entre tema y tema, como deberían mandar los buenos cánones del Rock.
A Caroline a pesar de ser su primer grupo de Rock & Roll se la notan las tablas en lo referente al “Show Bussines”, viéndola te das cuenta de que los escenarios son lo suyo, con una excelente voz y actitud rebosante por todos los poros de su piel blanca nuclear. Armada con un micro, con un vestido tan corto que rozaba los límites de la legalidad, y unos tacones inversamente largos al vestido, no paro de empatizar con el público ni un solo instante, mientras detrás suyo se desataba la tercera guerra mundial en versión instrumental.
Además de las imprescindibles de su primer disco grande, como: “Chocolate Ice Cream”, “Make Out With You”, “The Punk”, o esa versión maravillosa del clásico “punk nuevaolero” de The Acelerators, “It´S Cool to Rock”, les dio tiempo a repasar su primer single editado en vinilo en Italia. Lo dicho, todo una fiesta en homenaje al Rock & Roll. Caroline & The Treats no han inventado nada, pero hacen canciones efectivas y bonitas, cortas y directas, y seguro que si vas a verlos saldrás de su concierto con una sonrisa de oreja a oreja. Y eso, según los tiempos que corren es mucho.