Danko Jones + Young Guns – Heineken (Madrid)

La joven banda Young Guns, que toman su nombre y logotipo del western de 1988 dirigido por Christopher Cain, son los encargados de abrir para Danko Jones en su gira europea. El quinteto británico, practica algo parecido al “new metal” insustancial que tanto gusta en las radio formulas anglosajonas, mezclado con pop insustancial, bases electrónicas insustanciales, melodías insustanciales…

Eso sí, los chicos son muy bien parecidos, una perfecta mezcla entre Backstreet Boys y Green Day, no había más que ver la primera fila de la sala, llena de quinceañeras y jóvenes a punto de lanzarles su ropa interior. Decididamente no les doy ni dos años más de existencia.

Con puntualidad casi británica, salía a escena Danko Jones y los suyos, luego de haber calentado debidamente al respetable por mediación del “Highway to Hell” de AC/DC, a través de los monitores y altavoces del escenario. El bueno de Danko con su inseparable guitarra Gibson Explorer, John Calabrese a las cuatro cuerdas, y Dan Cornelius a la batería, parecía que venían con ganas de guerra, por la manera de comenzar el concierto. El hecho de que vinieran a presentar su nuevo trabajo, Bellow the Belt, no les impidió descargar unos cuantos temas ya clásicos en su repertorio; “Forget my Name” de su aclamado álbum We Sweat Blood, a un volumen que a mí se wwwme antojaba un poco bajo (menos mal que luego se fue arreglando) “Sticky Situation”, “Code of the Road” para delirio del personal, y “First Date”.

Danko Jones goza de una merecida fama de bromista y simpático, pero no hacía falta que lo demostrara tanto, la verdad. A partir de ese momento hubo partes del concierto que bien podrían haber sido un monologo de humor por parte del canadiense. Preguntas al publico tipo “¿Qué canción tocamos ahora?”, para posteriormente vacilar al interlocutor, y arengas muy vistas y muy pasadas, para animar al personal; “¡Odio a la música de baile, a Lady Gaga y a los jodidos Black Eyed Peas!”.

El segundo bloque del setlist lo comenzaron con su nuevo hit “Had Enough”, atención al videoclip con la participación de Lemmy, para continuar con otro tema del 2006, “Baby Hates Me”. “Full of Regret” fue la segunda canción que tocaron del nuevo álbum, y a partir de aquí otra tanda de bromas, y el consabido numerito de la horchata.

Sí, el rockero canadiense pierde los papeles por la horchata valenciana, según sus propias declaraciones; “Cada vez que vengo a España aprovecho para ponerme morado de horchata, ya que en otros sitios es muy difícil encontrarla”. Así que, ni corto ni perezoso, Danko se mete un litro de zumo de chufas entre pecho y espalda, mientras sus fans le jalean, para posteriormente bromear (como no) durante un buen rato sobre la cantidad de flatulencias que le produce dicha bebida.

Cuando ya todo parecía perdido, el trío ataco con la estupenda “Sugar High”, estos tíos es lo que tienen, te sueltan unos riffs asesinos como con “Invisible” y casi que les perdonas todo. Ya casi al final del concierto, aún le quedaría tiempo para (cualquier cosa excepto tocar canciones) rendir homenaje a sus ídolos caídos del Rock; Bon Scott, Joey Ramone, Jimmy Hendrix, Joe Strummer, pero sobre todo al más grande, según sus propias palabras, Ronnie James Dio, y continuar con los temas: “Lovercall” y “Mountain”.

En los consabidos, y en este caso de “Manual”, bises, la banda se decanto por comenzar con otro tema nuevo; “Tonight is Fine”, y terminar con “She´s Drugs”, y “Samuel Sin”.

No sé muy bien el por qué de la actitud esgrimida por Danko Jones en la sala madrileña, más propia de un festival que de un concierto en recinto cerrado. ¿Nadie le ha explicado, que la gente cuando va a un concierto de un artista en particular, paga por escuchar o saltar Rock & Roll?  Lo dicho, todos sabíamos las influencias y armas del músico de Toronto; Thin Lizzy, AC/DC, The Clash… lo que no sabíamos es que también estaba influenciado por Will Smith en su etapa “Fresh Prince of Bel-Air”. Si hubiera tenido que elegir un titular para esta crónica lo hubiera tenido claro; “Ese humorista llamado Danko Jones”.