La banda Hail Darkness no existe, es una IA
El pasado año nacía Hail Darkness, una supuesta banda de doom rock que bebía de los totems de la psicodelia y que cuenta con su propio Bandcamp. Un trío formado por Jez, Emmet y Joshua, que el pasado mes de agosto editaron su disco de debut, Death Divine. Poco después se ha descubierto que el grupo no existe y sus canciones están creadas con inteligencia artificial, IA.
Ha sido la «propia banda» o la mente que está detrás del proyecto quien lo ha dado a conocer a través de un comunicado. Un texto que empiezan: «sabíamos que el experimento que estábamos llevando a cabo no solo nos haría sentir incómodos a nosotros, sino probablemente también a muchos, si no a todos, los oyentes que quedaron encantados con Hail Darkness…».
El grupo se disculpa y argumenta su experimento aduciendo a otros proyectos del pasado que han tenido detrás una mano oculta como Malcom McLaren con los Sex Pistols, Damon Albarn con Gorillaz o todo lo que hubo detrás de Milli Vanilli.
Hail Darkness comentan que querían sumergirse en las posibilidades que da la IA y crear su proyecto de arte conceptual: «¿Sería posible crear una banda de IA y hacer que se ‘infiltre’ en la realidad física?». Sus objetivos pretendían ir más allá, ya que pretendían grabar cinco discos de esta forma y si la tecnología lo permitía, hacer conciertos generados por IA.
La inteligencia artificial en el límite de lo ilegal
Esta misma primavera la asociación sin ánimo de lucro Artist Rights Alliance emitió una carta abierta titulada «Dejen de devaluar la música» sobre el auge de la Inteligencia Artificial (IA) en la música, firmada por más de 200 nombres destacados de la industria como Billie Eilish, Robert Smith, Stevie Wonder, Nicki Minaj, Katy Perry, Sam Smith, Kim Petras, R.E.M., Jon Bon Jovi, Mumford & Sons, Imagine Dragons, d4vd, Jon Batiste, Finneas, Fletcher, Pearl Jam y un largo etcétera.
Poco después fueron las propias discográficas (Universal Music Group, Warner Music Group y Sony Music Group), quienes demandaron a generadores de música con IA como Suno y Udio por violar derechos de autor y apropiarse de la música existente para elaborar sus propias canciones.
El tema de Hail Darkness abre varios interrogantes. ¿Cuántas bandas más habrá generadas por IA y desconocemos? ¿Hasta qué punto la IA se cuela en las nuevas producciones reemplazando la creatividad humana? ¿De qué manera puede regularse algo así?