Lecturas musicales: Comentamos tres de las últimas novedades de la editorial 66pm
En los últimos meses han llegado a nuestra redacción diversos libros de la floreciente editorial 66rpm, especializada en textos musicales. Después de haber disfrutado de su lectura, llega el momento de presentarlos y recomendarlos a nuestros lectores.
Berlín Capital Alaska (Doce miradas al Berlín de Lou Reed) Varios autores.
66rpm Edicions
Poco queda que contar, a estas alturas, que no se haya contado ya de la historia de Jim y Caroline. Berlin, un álbum incomprendido en su época, demasiado duro incluso para los duros 70, ha acabado convertido en objeto de culto y veneración. No son pocos los artistas, escritores e intelectuales que lo tienen como disco de cabecera. Uno de ellos, Carlos Zanón, decidió celebrar el 40 aniversario deBerlin escribiendo un libro. Dos cosas tuvo claras: la primera, que no iba a ser otro libro más que hablara de la música, de las canciones, de la trágica historia de sus personajes; la segunda, que necesitaba hacerlo con otra gente, buscar otras visiones, acompañarse de otras almas que, como él, hubieran descarrilado al ritmo de las canciones de Lou Reed.
El resultado es un compendio de diversos géneros literarios, doce historias escritas por doce escritores / músicos que encuentran su inspiración en las canciones que componen Berlín. Hay poesía (David Castillo – «Caroline Says»), reflexiones sobre las canciones y su entorno (Roger Wolfe – «Berlin»), historias cortas (Josele Santiago – «Oh Jim», Javier Pérez-Andújar – «Lady Day», Carlos Zanón – «Sad Song»), historias más largas (Oriol Llopis – «The Kids», Sabino Méndez – «The bed»), intensos monólogos (Alfred Crespo – «Men of Good Fortune»), fábulas surrealistas (Dogo – «Caroline Says II») y diálogos punzantes (Cristina Fallarás – «How Do You Think It Feels»).Ignacio Julià contribuye con un prólogo y un epílogo que sitúan el álbum en su contexto histórico y cultural, mientras que la historia número 12 hay que buscarla en las ilustraciones de Rai Escalé.
Un monumento erigido, usando como única herramienta la imaginación de los autores del libro, a un álbum audaz, primitivo, molesto, claustrofóbico, trágico, demoledor. Como cuentan Julià y Zanón en la introducción, un viaje al Berlín de la mente hecho por niños que acaban perdidos en el bosque. Un libro que atrapa, y acongoja por momentos, casi tanto como lo hace el álbum al que rinde homenaje.
Balas Perdidas (Qué fue del siglo XX) Xavier Mercadé.
66rpm Edicions
Xavier Mercadé es un fotógrafo que lleva muchos años recorriendo, con su cámara a cuestas, los mejores escenarios donde actúan los mejores músicos. Su catálogo de fotos debe ser de los mejores en el mundo de la fotografía rock, pero ahora Xavier se ha decidido a escarbar en su fondo de armario para sacar a la luz esas otras vivencias, esas fotos hechas a grupos efímeros, que no llegaron a alcanzar el éxito, o al menos que no formaron parte de esa, digamos, primera división comercial de la música española. No se puede hablar de fracasos porque realmente muchas de estas bandas poco o nada tenían que perder. Y si perdieron, fue haciendo lo que realmente les gustaba, algo que no todos podríamos afirmar.
Las fotos, en blanco y negro, vienen acompañadas de breves biografías y discografías, necesarias en algunos casos para situar a los grupos en su contexto histórico y geográfico, pues muchos de ellos resultarán desconocidos para la mayoría de lectores. Sí que es cierto que, sobre todo en la sección «Indie y Noise» aparecen nombres familiares sobre todo para los seguidores de la música independiente española de los últimos años del siglo XX: Nosoträsh, El Niño Gusano, Surfin` Bichos, Manta Ray o Sexy Sadie. También, en un apartado dedicado al pop, aparecen La Buena Vida, Los Flechazos o Los Fresones Rebeldes. En general se presta atención a grupos que, alcanzando cierta fama, se movieron a un nivel ligeramente superior al underground pero siempre bastante discreto respecto a los medios de masas: Los Enemigos, 091, Lagartija Nick, Los Sencillos, Los Romeos, Sex Museum, Os Resentidos, Doctor Explosion… En el apartado «Los Desheredados de la Movida» se recuerdan nombres como Alphaville, PVP,Ciudad Jardín, Esplendor Geométrico o Esclarecidos, pero también aparecen otros que llegaron bastante más alto: principalmente,La Mode y Aviador Dro.
Sin embargo, quizás lo más atrayente del libro pueden ser dos capítulos especialmente interesantes: el primero es ese momento en el que Xavier Mercadé se pone a husmear en sus archivos de la Barcelona pre-Olímpica, antes de que el vanguardismo, la pulcritud, el diseño y el cosmopolitismo de salón lo invadieran todo. Una Barcelona en la que destacaban Brighton 64, pero por donde pululaban también Wom! A2, Telegrama, Aurelio y Los Vagabundos, Doctor Love, Las Flores del Mal, La Esencia, Ultratruita, Orgullo de España, etc. El segundo es el rastreo de los orígenes del punk / hardcore y del rock estatal / rock radikal vasco, donde junto a nombres conocidos como Eskorbuto o Hertzainak aparecen otros como Cicatriz, RIP o Potato, míticos para determinados seguidores de aquellas corrientes subterráneas ajenas a los principales programas de radio y TV.
Aunque puede que el principal reclamo del libro sean las fotos, espléndidas todas ellas, la verdad es que no tiene precio poder recordar nombres perdidos en el fondo de la memoria como Oficial Matute, Más Birras, Los Cardíacos, Morcillo el Bellaco, Sindicato Malone, Los Hermanos Dalton, 21 Japonesas, Dinamita Pa Los Pollos o Un Pingüino en Mi Ascensor, por nombrar los que a un servidor le traen más recuerdos.
Los Días Azules (Ficciones del Blues) Anechina & Poy.
66rpm Edicions
Los Días Azules es un libro de relatos inspirados, de una u otra manera, en la vida de diferentes cantantes de blues. Son relatos de ficción pero que, nunca se sabe, podrían haber ocurrido en la realidad. El blues, posiblemente más que ninguna otra música, siempre se alimentó de ficciones y leyendas, y en este libro se rinde homenaje tanto a los personajes como a esas historias apócrifas sobre bares de carretera, calles oscuras, maltrechas habitaciones de hotel, trabajos de mala muerte y sueños de gloria.
Los textos corren a cargo de López Poy, periodista, guionista, conferenciante y gran conocedor del mundo del blues, ya que forma parte de diversas sociedades dedicadas a su estudio, al tiempo que ha producido algunos documentales sobre el tema. Cada capítulo, dedicado a una figura del blues, está ilustrado con un retrato (pinturas en realidad, aunque en el libro aparecen en blanco y negro) realizado por Susi Anechina y que representando al artista cuya obra y vida han inspirado el texto. Una brevísima biografía introduce cada capítulo, aunque sólo lo indispensable para saber el por qué esa vida fue capaz de inspirar una historia como las que componen estas «Ficciones del blues». Historias que son como pequeños relatos sacados de una novela negra, donde asistimos a los pequeños triunfos y los clamorosos fracasos de personajes que, aunque inventados, reflejan con angustiosa realidad el entorno en el que los sujetos reales, cuyo nombre encabeza cada capítulo, se movieron, emergieron o sucumbieron.
Louis Armstrong, Bessie Smith, Etta James, Big Mama Thorton, Koko Taylor o Willie Dixon son, entre otros, los nombres que inspiran los trece relatos (dicen los autores que no creen en las supersticiones) que dan forma al libro. Unos relatos para leer acompañados de buena música blues o jazz, mientras alguien toca discretamente el piano en un cuarto adyacente y unos tintineos de vasos llegan desde el salón.