Niecy Blues + Maalem Mohamed Khtira (El Pumarejo) L’Hospitalet 04/04/24
Uno de los discos más especiales del año pasado, y que, por desgracia, pasó bastante inadvertido entre los medios musicales, fue el debut de la cantante y productora de Carolina del Norte Neicy Blues. Editado por el legendario sello Kranky (Grouper, Low, etc.), el álbum Exit Simulation es una joya centelleante de pop y R&B ingrávido repleto de atmosferas sensuales a la par que fantasmagóricas. Un debut de una artista con un talento poco común, y que venía a España por primera vez a presentarlo en directo.
Pero antes de su aparición, los encargados de telonearla fueron la banda de Maalem Mohamed Khtira, un artista -hasta este momento desconocido para quien esto escribe- de gran éxito en la tradición musical gnawa marroquí. Son sonidos que provienen ya de mucho tiempo atrás: ya desde el S. XVI los pueblos marroquís descendientes de esclavos se reunían en cofradías para cantar letras que mezclaban lo sagrado con lo profano, y que forma parte de la tradición árabe y musulmana. En la actualidad se sigue utilizando como invocación en los ritos terapéuticos durante jornadas maratonianas al compás de ritmos sincopados, y que tienen una clara intención de inducir al trance.
Apareció en escena el maestro Khtira junto a su guembri (un tipo de laúd de tres cuerdas), y su compinche que tocaba el qraqeb (castañuelas metálicas). Estos instrumentos de percusión accionan unos sonidos que bien podrían asociarse al blues tuareg o a los mantras en donde las repeticiones tonales crean la sensación de un fluyo incesante de repeticiones hipnóticas. Una experiencia reveladora y muy excitante en la que dejarse transportar.
La joven Niecy Blues apareció en escena con un vestido negro, tomó el micro para agradecer a los no más de cincuenta personas que nos congregamos esa noche, y muy contenta expresó la ilusión que le hacía pisar terreno nacional. Advirtió al público que su música no se entiende si no es a través de un ejercicio de introspección en donde olvidar el cuerpo para expandir la mente.
Fue un set corto -no más de una hora que se hizo corta- en la que toco los temas de su trabajo de debut, y nos sobrecogió con la habilidad para crear espacios íntimos y atemporales a base de loops de voz, samplers, y field recordings. Temas admirables como “Lament”, “U Care” o “Violently Rooted” nos hicieron navegar por afluyentes que desembocaban en el soul, R&B, y baladas cantadas tan sólo con el sugerente y tenue rasgueo de su guitarra a media luz.