Ramón Miñano – Divino Matadero (Autoeditado)
El barcelonés Ramón Miñano consigue algo que es muy difícil de alcanzar: hacer canciones preciosas y complejas, y parecer que sean sencillas de hacer. En su aparente sencillez reside la espontaneidad y el poder armónico de unas partituras que, quizás, pasen inadvertidas para una gran parte de público, pero que desde aquí las reivindico por ser un lote de canciones de una belleza inusual en el pop hecho por estos lares.
Miñano hace un tiempo era teclista en el grupo Skaparapid; edito con posterioridad dos obras bajo el alias de Ramonet. Desde el 2008 escribe tonadas bajo su nombre y apellidos, y con este Divino Matadero (Autoeditado, 2019) estoy seguro que encandilará a más de uno que se acerque a rastrear.
Con un título que hace referencia a las dualidades que van tensionando la dialéctica de la vida cotidiana, este es un álbum de pop de estructuras límpidas y narrativas que se afanan por sorprender al oyente en continuos requiebros inesperados, y puentes y estribillos muy bien proyectados. Muestra de ello es la genial “Dame Una Señal” que abre esta travesía con aires ochenteros a lo Radio Futura en el timbre de voz de Miñano, y el gozoso espíritu fabulador de Golpes Bajos.
Una estampa del ir y venir de la gente por la calle es sobre lo que versa “Funambulistas” con una caja de ritmos y una manta electrostática que mece una melodía con cierto regusto caribeño. Un guiño a Buñuel, “El Ángel Exterminador”, pero también a grupos como Magazine con una letra tan críptica como repleta de sugerencias queda esculpida para el recuerdo; el pop que articula imágenes itinerantes en “Europa”, es a su vez una retahíla de filias en las que a la manera de Sisa en “Qalsevol Nit Pot Sortir El Sol” se dan cita Goethe, Benidorm, Pessoa, el Rock & Roll, y hasta San Pascual.
El poso de Carlos Berlanga en “Algo En Común” (título recogido de una canción de Décima Víctima), es una de la grandes cimas del disco, aunque los ecos bossa de “Alma Sin Cuerpo” me transporta a uno de los mejores artistas pop que tenemos, por desgracia sigue en un silencio prolongado, Miguel Ángel Villanueva. Un gran disco, y cómo dice Stephin Merritt en su canción “Don’t Look Away”: “No Mires Hacia Otro Lado, No Lo Soportaría. Por Eso, No mires Hacia Otro Lado Porque Mi Corazón No Lo Aguantaría. En Tu Mirada Hay Un Fuego Que Está Derritiendo El Hielo De Mi Corazón”. Ramón Miñano tiene ese fuego.
Escucha Ramón Miñano – Divino Matadero