Regina Spektor – Teatro Circo Price (Madrid)
Regina Spektor no suele pasearse por España muy a menudo y un concierto de ella en el Teatro Circo Price se antoja imprescindible si casas con su música y su peculiar estilo. Se palpaba que había expectación, las entradas de pista estaban agotadas y prácticamente todos los asientos de tribuna llenos. También ayudó que su último disco, What We Saw from the Cheap Seats (2012) recupera parte de la calidad y el talento que demostró con Soviet Kitsch (2004) y Begin to Hope (2006); y que en su penúltimo disco de estudio, Far (2009), solo asomaba tímidamente en escasas composiciones.
Abrió la velada a capella con “Ain´t no Cover” con la única ayuda de sus dedos golpeando suavemente el micrófono para marcar el ritmo. Le siguió “The Calculation” y antes de liberar del setlist una de sus canciones más populares y festivas, “On the Radio”, compartió con los asistentes que había comido en el Mercado de San Miguel y que se había cebado. Sin ningún remordimiento ni arrepentimiento, como debe ser. A partir de este momento empezó a presentar sus nuevas canciones con la primera canción de su último disco, la melancólica y contagiosa “Small Town Moon”. Las solemnes “Ode to Divorce” y “Blue Lips” tomaron el relevo para volver en seguida sobre sus pasos y entregar tres temas seguidos de What We Saw from the Cheap Seats (2012): “Patron Saint”, “How” y “All the Rowboats”. Jugó con los variados registros de su voz en “Eet” y justo después apareció el vocalista de los teloneros, Only Son, para interpretar junto a ella “Call them Brothers”, bonus track de su último trabajo. Sorprendió a todos cantando en ruso “The Prayer of François Villon”, uno de los temas que forman el single exclusivo que publicó este mismo año en homenaje al músico ruso Bulat Okudzhava.
La recta final del concierto estuvo formada por sus composiciones más notables. Tras el homenaje al cantautor ruso retomó el pulso con “Dance Anthem of the 80´s”, la emotiva “Better” y con otras tres “novatas”: su nuevo single “Don´t Leave Me (Ne Me Quitte Pas)”, “Oh Marchello” y “Ballad of a Politician”. Cerró el grueso del concierto con “Sailor Song” y “The Party”, muy celebrada por el público. Tras varios minutos haciéndose de rogar e impulsada por los aplausos, volvió a salir para finiquitar su estupendo concierto con cuatro pesos pesados de su discografía: “Us”, “Fidelity”, “Hotel Song” y “Samson”.
Regina Spektor demostró el lunes que no solo tiene una amplia ristra de canciones sobresalientes, sino que sabe defenderlas en directo con una profesionalidad descomunal. Daba la impresión que no necesitaba más que su piano y su prodigiosa voz para conquistar Madrid, aunque hubiese músicos de acompañamiento. Que no tarde mucho en volver, por favor.