Sr. Chinarro – Presidente (Mushroom Pillow)
Quizá el primer pensamiento que se nos venga a la cabeza a muchos de los que seguimos la trayectoria de Sr. Chinarro desde hace (¡uf!) 16 años, cuando escuchamos por primera vez las canciones de su nuevo trabajo Presidente, es el de extrañeza.
El sevillano, que continúa con la senda luminosa emprendida desde El Ventrílocuo de Sí Mismo (sí, antes de su etapa en Mushroom Pillow o El Ejército Rojo había momentos como “Tosdarora On” o “Todo el mundo al suelo” que le acercaban más a The Go-Betweens y The Smiths que a The Cure o Joy Division) y nos entrega quizá su disco más pop, sin que esta palabra tenga que tener connotación negativa alguna. No es que haya notables variaciones con lo que podíamos encontrarnos en la trilogía que supuso su camino a la accesibilidad: El fuego amigo (2005), El Mundo Según (2006) o Ronroneando (2008), pero la nuevas canciones de Sr. Chinarro suenan diferentes.
Es cierto que se aprecia un aperturismo en las melodías, en las letras y en la producción,… una forma de vocalizar que rehuye del habitual recitado monocorde marca de la casa para acercase por primera vez a lo que es un cantante al uso –esta última frase quizá suene rara, pero cualquier chinarrista que se precie entenderá a lo que me refiero–. Por ello, sorprende el simplismo del mito canario de “San Borondón” o cosas tan inocuas como “El Boxeo” o “La Lección”, donde camino de la tuna se acerca a Pauline en la Playa.
Pero que nadie se eche las manos a la cabeza, Presidente no es un mal álbum, dentro podemos encontrarnos momentos de gran altura como el pop deslumbrante de un hit en potencia como “Una llamada a la acción”, el lirismo de una inmensa “Babieca” llena de desarrollos, la emotiva “María de Las Nieves” o la luminosidad sin complejos de “Vacaciones en el mar” en la que cae una velada crítica a la contaminación de las aguas. Todas ellas, una colección de favoritas que se codean con los mejores momentos de este Chinarro 2.0.
Presidente quizá esté un paso por debajo de los tres discos anteriores, pero sigue muy por encima de la media en nuestra escena.