The Damned – Razzmatazz 2 (Barcelona)
Nunca es tarde para redescubrir a las leyendas del punk británico de primera hornada, aunque sea más de 20 años después de su aparición y rápida desaparición. Esta fue nuestra segunda oportunidad en tres años para rememorar el legado de un grupo que según se dice, fueron el primer grupo inglés en publicar un single de punk. Incluso antes que sus contemporáneos como The Clash, Sex Pistols o The Buzzcoks.
Pero eso fue hace mucho; demasiado si pensamos que ese fenómeno esencial sólo duro 3 o 4 años y más allá de esos años, esa actitud se esfumó por donde vino; por las cloacas. The Damned son un claro ejemplo de esto, ya que gravaron muy buenos discos entre 1977 y el 1980, pero una vez pasada la explosión de rabia adolescente, los egos y la inspiración no jugaron a su favor y todo se perdió en discos segundones I prescindibles. Eso es lo que les pasó a los carismáticos Dave Vanian y su media naranja musical, Captain Sensible, cuando rompieron peras allá por 1980 para perderse en la mediocridad.
Pues han tardado más de 15 años para reunirse e intentar recuperar ese espíritu irrecuperable, incluso publicando material nuevo; el discreto Grave Disorder en el 2001. Ahora nos presentan Smash it Up.Anthology 1976-1987, otra obligada recopilación para perpetuar una agonía musical que debería ya tocar a su fin. Con todo, los The Damned de 2002 mantienen la dignidad gracias a que tanto Vanian como el loco del Capitán se conservan sus cualidades, y que su banda se complementa bien con el refuerzo del batería de los Lords of the New Church, un teclista freak y Patricia Morrison al bajo, – sí sí, la que fuera la bajista con la mirada más felina del rock oscuro con los Gun Club y The Sisters of Mercy -.
Empieza el entretenimiento con un Capitán disfrazado de escocés gamberro y hortera con algo colgando de su entrepierna y con un Vanian elegante y entregado a la faena. Su set, como era de esperar, se centró en sus tres primeros discos y esa mezcla de punk-rock fiestero y hooligan que aún desprenden canciones como “Plan 9 Looking at you”, el conocido “Neat, Neat, Neat”, o “I just can’t be happy today”. No olvidaron intercalar a medio set los temas de su último álbum de estudio Grave Disorder; unas composiciones potables y basta como “She”, “Democracy, “Absenthie”. Incluso se acordaron de “Phantasmagoria”, el devaneo siniestrillo de Vanian sin Sensible con “Street of Dreams”, para contentar al puñado de cucarachas que acudieron para pescar algo de la poca esencia oscura que queda.
Llegado el final del repaso a su antología llegan los hits con ese tema petardo que es la versión de “Eloise”, – a todos se nos apareció el maqueado de Tino Casal por la cabeza -, para regresar a sus míticos y primerizos “New Rose” y “Smash it Up”. No se podía ni se esperaba más de lo que sucedió, pero pese a todo, son unos clásicos. Bonito y nostálgico sin más.