The Pains Of Being Pure At Heart – Teatro Circo Price/Festival Greenspace (Madrid)
The Pains of Being Pure at Heart es sin duda una de las bandas que en los últimos tiempos más expectación ha suscitado en la escena pop. No es para menos, sus tres primeras referencias (dos eps y un largo homónimo), son simplemente deslumbrantes.
Aprovechando la estela de su merecido éxito y de las buenas sensaciones que trasnmitieron en su debut en directo en nuestro país allá por el Primavera Sound, The Pains volvían a España como uno de los mayores atractivos de la quinta edición del mini festival itinerante de Heineken, el Greenspace. Sin embargo, y contra todo pronóstico, la primera impresión que daba la sala que acogía el concierto era que no estaba precisamente llena, y eso que en teoría, se habían agotado las entradas.
Los neoyorquinos comenzaron educadísimos, saludando con ganas su primera visita a Madrid, sorprendiéndose por el tamañao del Teatro Circo Price, y alabando con sinceridad el concierto que acababa de ofrecer Atlas Sound. Sin embargo, saturados por un exceso de timidez y lastrados por el bajo volumen al que sonaban tanto las voces de Kip Berman y Peggy Wang-East, como las guitarras (incluso incorporando en directo una adicional), desperdiciaron nada más comenzar dos de sus mejores armas construidas a base de luminosa distorsión, “This Love Is Fucking Right!” y “Young Adult Friction”. Tras un par de canciones más sonando a medio gas (“103” y “Say no” creo recordar), y buena parte del público tan frío como si estuviera en el Teatro Real, alguno que otro se empezó a impacientar y gritó en un momento de silencio, “play it fucking loud”. Kip, con cara de no haber roto en su vida una cuerda de una guitarra en directo y media sonrisa, respondió “no somos ese tipo de banda de rock and roll”, y con toda naturalidad, siguió a lo suyo.
Afortunadamente, la gente del equipo de sonido pareció recoger el guante y poco a poco su energía se hizo más presente, e incluso la voz de Kip, que ese momento no había pasado de un susurro, comenzó a dejarse notar con más claridad. Fue el momento de disfrutar de la inocencia contagiosa de temas como “Come Saturday”, “Higher than the Stars” o “Falling Over “, y de entender el porqué de que los cinco chicos que, con humilde actitud de amateur, estaban tocando sobre el ecenario, sean uno de los grupos del año.
En el bis y manteniendo el nivel que permitió a casi todos salir del Teatro con buen sabor de boca, “Everything With You” y “Gentle Sons”. Digo casi todos, porque, a pesar de que sin dudarlo repetiría y sobre todo, recordando aquella fiesta que fueron The Pains en el Primervera, yo esperaba bastante más.