Young Thug, en una canción del nuevo disco de Kanye West

Young Thug es uno de los colaboradores de Kanye West en el nuevo disco de este, “ye”. Concretamente, su voz suena en “Wouldn’t Leave”, el cuarto de sus siete temas. Esta aparición estelar se suma a otra que anunciamos hace unos días: que Young Thug también estará presente en el próximo álbum de Childish Gambino, cuyo “This Is America” se ha convertido en el hit global del momento. Dos pruebas del algodón de la relevancia de Young Thug, a quien podremos disfrutar en directo dentro de tan solo tres semanas: concretamente, en Barcelona el 28 de junio (Razzmataz 1) y en Madrid el 29 (La Riviera). En la capital catalana contará con Sticky M. A. como telonero y en su concierto madrileño ese rol lo llevará a cabo Kidd Keo. Dos citas de primer orden para ver en directo por primera vez en nuestros escenarios a uno de los puntales del hip hop y el trap actuales. Uno de los grandes iconos de ese mundo -en su caso, en la versión sureña de la escuela de Atlanta-, cuya voz lleva formando parte activa de la banda sonora de ese mundo desde hace siete años. Es decir, desde que sacó la cabeza. Fue en 2011 con la mixtape “I Came From Nothting”. Desde entonces Young Thug ha subido como la espuma y se ha instalado en un pedestal donde su nombre convive, como anfittrión o colaborador, con la crema del género: Rich Homie Quan, Birdman, Cash Out, Shawty, Gucci Mane, Migos, Chance The Rapper, Future… Y con la diva pop Camila Cabello, con quien mezcla voces en la omnipresente “Havana”.

Pocos como Young Thug (de verdadero nombre Jeffery Lamar Williams) equilibran tan bien en su territorio musical -que él va mostrando cada vez con menos caos y con más formalidad- el erotismo con la calidez, destilando las turbias aguas de los amores jóvenes y el deseo lujurioso hasta convertirlas en un pop vital, bien nutrido de estribillos. Su primera referencia, la antes mencionada “I Came From Nothing”, llegó en 2011. Disparo de salida de una carrera que querría ponerse pronto bajo los focos y hacerse notar: solo entre 2014 y 2015 publicó nueve más. Empezaron entonces a llegar las nominaciones a premios con cierto eco (en los BET Hip Hop Awards y BET Awards), aunque han sido sus cinco últimas mixtapes –“I´m Up” (2016), “Slime Season 3” (2016), “Jeffery” (2016), “Beautiful Thugger Girls” (2017) -con Drake, para quien abrió en su gira europea de principios de 2017, de productor ejecutivo- y “Super Slimey” (2017), esta postrera compartida con Future– las que han acabado de consolidarle en la cima de su territorio -como guinda, el premio al mejor vídeo editado en los MTV Video Music Award de 2017 por el tema “Wyclef Jean”, y el debut de tres de esas mixtapes en el Top 30 del Billboard-. En abril ha publicado el EP “Hear No Evil”, con tres canciones nuevas y las colaboraciones de Nicki Minaj, 21 Savage y Lil Uzi Vert: atención, en solo mes y medio el videoclip del single de ese EP, “Anybody”, el del tema que comparte con Nicki Minaj, ya ronda los veinte millones de visionados en YouTube. En mayo de este año estaba previsto que Young Thug publicara un LP de estudio, pero ha decidido posponerlo para 2019 y dejar todo este ejercicio, según ha asegurado en una entrevista en febrero, sin música nueva suya (salvo colaboraciones en obras ajenas ya grabadas, ha dicho; algunas de ellas han salido estos últimos meses, caso de Young Scooter, A-Trak, o sin ir más lejos la que ocupa el titular de este boletín, ese “Wouldn’t Leave” con Kanye West. Otras lo harán los próximos, como la citada colaboración con Childish Gambino. Su (presunto) silencio discográfico en 2018 lo realiza en solidaridad, afirma, con un hermano suyo que padece sordera.