Zeidun + Grind FK – Sala Magic (Barcelona)
Con el retraso habitual de la sala, pero con una buena acogida de público (una media entrada poco más o menos), sucedió una de esas noches de Magic. Diferentes, siempre diferentes.
En cuanto accedí a la sala acababan de empezar su «show» los Dead Man on Campus… me quedo sin palabras cada vez que intento describirlo… una palabra que sí que podría decir seria «demencial» … demencialmente divertido y entretenido, eso sí. Tres personas con actitud, sin vergüenza de subirse a un escenario sin saber tocar instrumento alguno, y con «hit-singles» a berrido suelto… Yo me quedo con su «Pakistan Rules», pero por una historia personal que no viene a cuento sobre la Plaza del Sol, un diskette, unas setas…
Luego dieron paso a Zeidun, que tras su salida de BCore continuan por una linea que han trazado ellos mismos («autoreferenciales» rezaba la promoción del concierto), cada dia con más personalidad, alejándose poco a poco de la mala imagen que han podido ofrecer en algunos conciertos pasados (pese a que estuvieron dispersos entre canción y canción como siempre), y tan geniales y divertidos como es habitual. Quizás no se les preste la atención que merecen debido a su actitud pero siempre me han parecido uno de los grupos más auténticos, menos pose, vamos.
Tocaron un setlist ajustándose al tiempo del que disponían, la gran mayoría temas nuevos. Me quedo con «La tragedia» (tema con el que abrieron y que, tras terminarlo, reflexionaron que quizás no fué el más adecuado para empezar) y «La funki», un tema con cambios constantes y que es una clara muestra de los recursos estilísticos de los que hacen uso últimamente. La misma fuerza, mucho sentimiento, mucha paranoia. Muxo arte…
Como temas conocidos sonaron «At war with the world» y «Kill the president» (dedicada al lehendakari) de su disco La nauseé (Bcore, 2003), y una versión del Gitano de Balaguer «Carajillo, canuto y raya», que fué la guinda perfecta de una espléndida actuación en la que dentro y fuera del escenario la gente se sintió y se lo pasó bien.
El último concierto programado era el de Grind FK, canarios que practican «hardcore sabrosón», me parecieron cercanos en algún aspecto a Zeidun, un poco más rockeros, (aunque tan solo los ví un par de temas). Quizás menos atrevidos que los de Sant Celoni.
Cerraron Magic de nuevo la troupe de Dead Man on Campus, aunque en esos momentos un servidor se encontrara ya en mi 7o sueño. Debo decir que después de todo, me fuí a dormir con una gran sonrisa y muy satisfecho.