Turin Brakes – Razz 3 (Barcelona)
Barcelona estaba fría. Soplaba el viento. La calle estaba prácticamente vacía. Pero en la sala Razz 3, el ambiente era de lo más cálido y acogedor. Era como estar delante de una chimenea, rodeado de amigos, mientras tres de ellos amenizaban la velada con preciosas canciones. Así fue el concierto de Turin Brakes, un recital sencillo, sin artificios, sin pretensiones. Tan solo los dos componentes del dúo, Olly Knights y Gale Paridjanian, con sus guitarras, en un taburete, y un teclista de apoyo para dar forma a sus bellas composiciones.
El concierto fue básicamente una presentación acústica de los temas que forman parte de su próximo álbum, Ether Song, que saldrá a la venta el próximo mes de marzo. Son temas en la misma línea de su primer trabajo, donde la presencia de la guitarra impregna todas y cada una de las melodías, con una novedad que estuvo presente a lo largo de todo el concierto, y fue la presencia del teclado, que modelaba cada uno de los temas con gran sutileza.
Lo que son las cosas, como un concierto de tal sencillez puede tener la fuerza que Turin Brakes emanaron durante la hora que duró la actuación. La voz de Olly desprende una gran energía, una gran luz, que en directo no pierde nada de la grandiosidad que demuestra en el álbum. Canciones como “Stone!”, “Self Help” o “Blue Hour”, de su segundo trabajo, sonaron muy bien con muy pocos artificios. El primer single de su nuevo álbum, “Long Distance”, el tema que le siguió, “Underdog” y luego “Pain Killer”, fueron los tres que más entusiasmo causó entre el público. El derroche vocal de Olly, que en algunos momentos me recordó a algunos gorgoritos made in Thom Yorke, consiguió arrancar inacabables aplausos, mientras los últimos segundos de los temas acababan de consumirse.
Acabaron con un bis, sólo un tema, suficiente para dejar a la audiencia más que satisfecha, “Emergency 72”, uno de los más conocidos de su anterior álbum, un tema básicamente de guitarras, en el cuál el piano sonó como mero accesorio. Fue, sin duda, un concierto precioso, confortable, ideal para la noche que hacía.