Los Estanques – Los Estanques (The John Colby Sect / Inbophonic)
Expuesto llanamente, nos encontramos ante uno de los mejores y más insignes discos, de 2019, fabricado por un grupo español de rock y expreso esto cuando solamente nos encontramos en febrero. Los Estanques, de manera homónima, es como se denomina la tercera gema de estos santanderinos, afincados en Madrid.
Como capitán de la consistente embarcación se halla uno de los, para mí, nuevos e indiscutibles genios del orden rockero peninsular como es el prolífico compositor, además de peculiar cantante, teclista y multi-instrumentista, Iñigo Bregel. Los virtuosos lugartenientes que le secundan son Germán Herrero (guitarra), Fernando Bolado (bajo) y Andrea Conti (batería), conformando los cuatro una ecléctica maquinaria, perfectamente preparada la misma y de asombrosa cohesión entre sus componentes. Como guinda, despuntan también cada uno por separado pero, insisto, jamás sin extraviar la mencionada sincronicidad grupal.
Parecía complicado que superasen sus dos anteriores apuestas de nota sobresaliente, ambas editadas en 2017, Contiene Percal y sobre todo, II, de las cuales mi compañero Fidel Oltra y el que aquí escribe, ya habíamos tratado en Muzikalia en forma de artículo de presentación y de entrevista. Sin embargo, con esta nueva obra incluso han conseguido una mejora de lo anterior, completando así un triángulo de LPs que absorbe a todo exigente melómano que le apasionen los sonidos y los detalles de superlativa calidad.
Siempre fieles a su identidad sónica como es el pop progresivo-psicodélico cantado en castellano, unos habilidosos Estanques han añadido, en su tercer trabajo, mayores cantidades de rock and roll, funk, jazz, soul etc,etc, consiguiendo hacer notar y evidenciar, meritoriamente, una todavía más amplia gama de sensaciones coloristas que las expuestas en álbumes anteriores. En otros términos, su impactante escalada continua como intérpretes que saben amalgamar, con sumo cuidado, varios nítidos ingredientes muy propios con diversos ecos revivalistas. El resultado final indica también que han medido, sabiamente y al milímetro, las dosis de riesgo; además de expresar letras siempre astutas y algo herméticas.
La sustanciosa labor de Bregel, Conti, Bolado y Herrero empieza, pasa y termina con murmullos ininteligibles y enigmáticos como si estos fueran una especie de fino y empírico hilo conductor de excelsas y, a la vez, endurecidas canciones como la prodigiosa, hipnótica y completísima “Amor-Odio”, la sutil, pero a la vez, agresiva “¡Joder!” o el vigoroso despliegue, con refracciones rock setentero, de “Ahora el tiempo te sobra”: una narración ésta última sobre la lucha dialéctica entre distintas generaciones. Son éstos tres cortes muy prototípicos del tan trabajado y atractivo “Sonido Estanques”.
Por su parte, el sedoso single “Clamando al error” parece ser la que se inclina más por lo más puramente “popero”. Si Los Estanques hubieran surgido durante La Movida de los años 80, esta misma banda hubiera llegado ya al éxito hace tiempo y al nivel de los más grandes.
En otro orden, momentos de cultivada delicadeza, plena además de exploración, también poseen cabida en el susodicho LP como, por ejemplo, “Deceso Inmortal”, la cual recuerda lejana y agradablemente a la melodía de George Harrison , de los años 70, “My Sweet Lord”. Con los mismos parámetros de exquisitez hallamos, por un lado, la extraordinaria “La loa que añoré”, donde el piano y la voz del propio Iñigo Bregel tratan, con gentileza, el tímpano del receptor o también la atmosférica “Vincenzo, il caminante”, en uno de esos sorprendentes títulos con que nos obsequia, en ocasiones, el talentoso combo de origen norteño. Concluye el acertado repertorio con el calmado y romántico instrumental “Mientras tanto”. La profundidad melódica de Los Estanques es otro de sus puntos más musculosos y recalco que los filtros, por los que desfilan todas sus influencias, son de holgada precisión.
Deliciosos coros y una mayor presencia de la sección de viento de lo que habitualmente venían planteando, aumentan la defendible complejidad de su proyecto.
Como guinda, el cuarteto domestica, con absoluta decisión, las siempre serpenteantes curvas funky en “Desde ahora hasta el final”. La furiosa, y a la vez, pulcra guitarra rock de Germán Herrero, a mitad del minutaje, explota de manera emocionante, para imponer su ley en esta misma pieza.
Algo siempre complicadísimo de conseguir para las bandas es dar con un potentísimo sentimiento especial en su música, el cual pueda hacer conmovernos, para luego identificarlo como algo singular. Pues bien, Los Estanques clavan su bandera en dicha escurridiza y anhelada tierra prometida, plena ésta de singular oro musical. El hecho de tocar su música con elevadísimas dosis de groove, clase y criterio les ha hecho conquistar esas playas, aparentemente utópicas, pero posibles de alcanzar. En definitiva, que en España existen pocos grupos de su calibre, de su riqueza expresiva y de sus recursos plenos de vitalidad.
Haciendo un parafraseo de uno de sus novedosos temas: “que nadie les subestime” porque este cuarteto de muchachos cántabros son capaces de poder con todo y ellos van obteniendo más y más victorias cada vez que repites la escucha de su diamantífero terceto de discos.
Como reza el encabezado de otra de sus melodías: “Suerte” a Los Estanques.
Escucha Los Estanques – Los Estanques
En efecto, mucha «Suerte» para este grupo que avanza poderosamente hacia su consagración. Muchos estilos, sí, tocan, y muy bien, tal como se escucha y queda magníficamente descrito en el entusiasta y detallado artículo de Txus Iglesias para la bienvenida de este tercer y significativo álbum que sí, miraremos como destaca a lo largo de esta año 2019. Gracias, Txus y Muzikalia, por divulgarlo.
Muchas Gracias a ti, F. Xavier, por tu comentario, aquí en MZK, hacia mi artículo sobre esa sensacional banda que son Los Estanques, los cuales son ya para mí uno de los mejores grupos españoles de la actualidad.
Un saludo.
Con cierto aire a los primeros Lori Meyers. Las comparaciones son inevitables, pero no malintencionadas. Grupazo, con entidad propia y con gran calidad. Las estructuras de sus temas son fantásticas, un verdadero trabajo. Comprado, no bajado, y dispuesto a reproducirlo mil veces y a recomendarlo otras mil más. Enhorabuena, chavales. Prometéis. Ya tenéis otro fan. Os veo en Sevilla.