VVAA – Descanso Dominical: Tributo A Mecano (Warner Music)
En menos de dos días se juntan en la calle el libro Mecano, el grupo español más grande de la historia (Plaza y Janés) de Javier Adrados, del que doy cuenta en estas páginas, y el trabajo que os comento donde se revisa, homenajea y estiliza la componenda del disco titular que, por cierto, también cumple 30 años en este 2019.
Hay una máxima no escrita sobre los tributos por la cual si el artista no se lleva a su terreno el track versionado, la propuesta se puede considerar fallida. No es el caso del que nos ocupa; al contrario, dan en el clavo casi todas. Para hacer mi pequeño homenaje mecanero, (sí, es un grupo que me mola) con este disco recién publicado de por medio he decidido un ejercicio de contraposición; pasado y presente, y por ende futuro, unidos en la misma columna.
Bien sabido es que antes de entrar a grabar los hermanos Cano apenas se hablaban. Y Ana, en medio, aguantando el chaparrón. O azuzando porque, según ha dejado caer Josema en una entrevista reciente, la Torroja ni era tan inocente ni tan bonachona.
Y TÚ ME DIJISTES QUE NO
Este tributo no es el primero que la escena musical indie le rinde al trío, pues en 2005 se editó EN TU FIESTA ME COLÉ, TRIBUTO A MECANO (El Diablo España), pero que versaba sobre los éxitos en general del grupo. ¿Cómo podemos olvidar esta cover trallazo?
Lo que hace diferente a este de aquel es que se dedica, en cuerpo y alma, a cada uno de los tracks del Descanso Dominical. El original se grabó en los míticos estudios Abbey Road, algo poco habitual en los 80. Casi nadie cruzaba el charco para esos menesteres, y menos en el pop. Claro que con tanto control como hubo todavía nos sorprende que se colase el famoso “y tú me dijistes que no”. Menos mal que LoL e Iván Ferreiro corrigen la falta gramatical más controvertida del pop español y usan el “contestaste”. Aunque para mí es la cover más flojeras. Será que la voz de Santi Balmés no la veo yo muy mecanera que se diga, a qué engañarnos.
YO SOY UNO DE ESOS AMANTES
Los jefazos de Ariola alucinaron en su primera escucha y se tomó la decisión de meter lo mismo de cada brother y, de esta manera, calmar las aguas entrambos. Nacho ya iba mostrando interés por el misticismo y se pilló un chabolo en las Alpujarras donde creó, junto a Tomatito, el instrumental “Por la cara” que aquí suena adaptado por Daniel Casares, Juan Sueiro y Miguel Lara, con cierta reminiscencia a aquellos remix maniobrados por Raúl Orellana allende los 90, ¿Os acordáis?
Mientras Nacho estaba en su neo misticismo, Josema andaba más terrenal; hasta el punto de componer “¡Ay, qué caray!” para Saritísima Montiel. Cuando la disquera se decidió por “No hay marcha en Nueva York” como primer single Nacho pilló un rebote y, de nuevo, la gresca. Sí, es ese donde rima Nueva York con jamón de York; los pareados de Josema como dice Alaska. Los toledanos Veintiuno se encargan de ella y la derivan a un rock sin fisuras, sin estridencias y, ciertamente, resultón.
Cuando miras el disco tanto la portada como el título dan sensación de sosiego y relax, vacaciones en Cancún, verano… El diseño de Alejandro Cabrera mostró los rostros posterizados con loritos alrededor, pero la lucha de egos era tan extraordinaria que exigieron –sí, Ana también, aunque parezca mentira- que las cabezas midiesen los mismos centímetros. El título del álbum no es un single, sino una frase incluida en El blues del esclavo, la misma que Aleks Syntek adapta en un pop sintético hasta las cejas muy en la ondita que tanto pregona por sus fueros, dejando de lado el rhythm & blues – conga original.
DD lo mismo te habla del amor que de la conquista del espacio, la llegada del capitán Scott a la Antártida y hasta homenajea a Dalí. Este último, ya anciano y con mano temblorosa, le envió firmado toda su obra a José María. La banda bilbaína Mäbu adaptan la dedicada al de Figueres obsequiándonos una versión más estilosa, más 2.0 y menos sonrojante que la original.
Los Miss Caffeína, uno de los grupos más trallazos de la actualidad, se adentran en el «Héroes de la Antártida» con un ritmo y sonido in crescendo conforme avanza el tracking llevándolo a un clímax épico. Claro que la voz de Alberto González mejora, y muy mucho, a la de Josema, que era la voz vehicular del single.
A ver si en vez un millón pueden ser dos; con este lema montaron una fiesta en la Oh! Madrid para celebrar la venta de doscientos mil ejemplares. Venderían más con el paso del tiempo. Participaron en la Exposición Universal de Autralia en 1988, con la televisión estatal retransmitiendo el concierto allí y en Japón. Según datos oficiales tuvo una audiencia de quinientos millones de personas. Del track Un año más se encarga en Zahara, que comienza usando el balleno de Skakira y se epicentra en una potentísima batería que, a veces, tapa la vocecita escuálida de la Gordillo Campos. Eso sí, después de las uvas quedará genial en la rave para haceros levantar los mecheros. O el móvil, que es lo que ahora prima.
En la Navidad de 1988, con “Mujer contra mujer”, superaron al mismísimo Michael Jackson en las listas francesas. Y de allí a Alemania, Holanda, Bélgica, Luxemburgo…En el tributario Los Elefantes adaptan este himno LGTB, y aunque empiezan con una guitarrica acústica, Shuarma, con sus ojitos pintados se me viene arriba a mitad dándole a la eléctrica. Entonces es cuando se mete de lleno en esos altos y bajos vocales tan característicos.
Y LO QUE DIGAN LOS DEMÁS ESTÁ DE MÁS
El tour que emprendieron fue presenciado por más de un millón y medio de personas. Como anécdota recordar lo que sucedió en el Rockódromo de Madrid el 16 de setiembre de 1989. Cabían setenta mil personas. Bueno, pues la policía comunicó que, además de aquel llenazo, cerca de veinte mil se habían quedado sin entradas. Tuvieron que colocar pantallas de vídeos en los alrededores. Con DD comenzó la “mecanomanía”. Un miembro del club de fans lánguido y canijeras, de nombre Mario Vaquerizo, años después se casó con Alaska y montó esa cosa llamada Nancy Rubias (no se sabe si es grupo, show o ninguna de las dos cosas) para ondear su tecnobarroquismo ilustrado en la cover de Los Amantes y no le queda mal la cosa, ojo.
Antes de finalizar la década habían vendido la friolera del millón de copias. Incluso aparecieron en el Libro Guinness de los Récords como la banda hispana que más tiempo había permanecido en lista de superventas; 83 semanas consecutivas. Les dedicaron un reportaje en Informe Semanal y como se dice en España, no eres nadie hasta que no te imitan; el dúo Martes y Trece los parodió en el especial de Nochevieja que daba entrada a la década de los 90.
Debo admitir que ha sido un grato placer escuchar el disco y retornar a ese día en que adquirí el original del mismo en el Sevilla Rock. Incluso Conchita, a la que he prestado nula atención musical, da otra visión al Quédate en Madrid –mariconez inclusive- de la que puede estar orgullosa.
Vega, por ejemplo, lo mejor que ha salido de OT, engrandece «Laika» y lo hace con voz de estar con la bajona y justo es eso lo que le da calidad al track, parafraseando a Ángel Sanchidrián.
Mola mucho también Reyko en su susurrante «El Cine», que parece estar cantándola en una sala cinematográfica y la gente mandándola a callar. Claro que con el machacón chimpún de fondo que guía a la cover, más que callarla, creo que la echarían a empujones. Pero el homenaje le queda bien, lo digo como lo pienso.
Tampoco puedo olvidarme de Shinova ante «Hermano Sol-Hermana Luna»; empieza como una suerte de himno neocatecumenal pero, tranquilos, nada que ver; luego meten su potente rock alternativo y fluorescente y ya queda constatada la diferencia.
Y para cerrar este repasete abran oído al «Fábula» que se marcan los Chico y Chica; un guiño dicharachero que si le encajas tres chilliditos más, dos ruidos y un sampler manga al fondo bien parecería otro hit de PutoChinoMaricón.
Así que ya tienen en las tiendas y en los streamings de Dios Descanso dominical. Tributo a Mecano (Warner Music, 2019). Homenaje a un grupo que, te gusta o detestas, forma parte de nuestra historia musical. Eso es indiscutible. Pero sobre gustos no hay nada escrito.
Pues habrá que escucharlo, claro. Muy entretenida crónica/crítica.
Lo de Martes y Trece me ha hecho soltar una carcajada tan tempranete. Gracias.
El trallazo de Luxury 54 no lo conocía. Ni tampoco que habían hecho un disco tributo en 2005 a Mecano. Con ustedes se entera una de todo.
Voy de viaje en tren y me he puesto los vídeos que acompañáis a la crónica como playlist. Oye, muy divertida la crónica, enhorabuena.
Ya está a la venta? No lo sabía. Pues mira, me viene genial enterarme; tengo un cumple este finde y es muy mecanero, así que ya tengo solucionado el regalo.
Me he reído mucho con algunos comentarios del articulista. Lo de El cine se ha superado, jajaja
Acabo de escuchar el disco y me ha molado, es un tributo guapo, sí.
El disco es malo para chillar, solo se salvan las versiones de Chico y Chica y Shinova, luego hay mucha morralla y también está lo de las Nancy Rubias, que no hay por donde cogerlo.
Cualquier cosa de Mecano tiene interés, aunque este disco tributo es regulero, pa que vamos a mentir.
Leí hace un rato la crítica y lo estoy escuchando en Spotify… ¡Muy bueno!
Querrá decir todas estas señales mecaneras que habrá reunión y gira del trío? Lo dudo, pero mira, de ilusiones también se vive
Mecano al PS o al FIB ya de ya!
Un disco muy completito, me ha molado.