Death In Vegas – Scorpio Rising (BMG)
Hace un par de años y gracias al magnífico Contino Sessions, Death In Vegas se convirtieron -junto a bandas como Primal Scream– en uno de los abanderados del rock electrónico del siglo XXI. La propuesta que nos ofrecía Richard Fearless en el que fue su segundo trabajo, estaba plagada de sonidos futuristas donde la electrónica, el rock y unos invitados más que acertados se fundían en una unidad sin desperdicio en la que momentos como “Aisha”, “Aladdin’s Story” o “Dirge” pusieron el listón muy alto.
Ahora nos llega la continuación con Scorpio Rising, título que hace referencia a una homónima película de culto de apenas 29 minutos del director «maldito» Kenneth Anger (gran influencia para Scorsese, Cassavetes, Spike Lee etc) en 1964.
Para la ocasión los británicos se han vuelto a rodear de colaboradores de los más variado para confeccionar una de las referencias más esperadas de este 2002. Así, podremos encontrarnos desde a un Paul Weller versioneando a Gene Clark en “So You Say You Lost Your Baby” (impresionantes sitares) hasta al mismísimo Liam Gallagher cantando en el tema que da título al álbum, un torrente de psicodelia de la que sale airoso, (apuesta arriesgada la de Death In Vegas cuando últimamente todo lo que tocan los hermanos Gallagher no es que se convierta en oro precisamente).
Mención aparte merecen las auténticas maravillas del álbum: “Killing Smile” protagonizada por unos arreglos de cuerda sobrecogedores y una Hope Sandoval en estado de gracia, al igual que el tema que cierra el disco al que también pone la voz, un impresionante “Help Yourself” de más de doce minutos cuyo apoteosis final nos recuerda a la simbiosis Mercury Rev Vs. Chemical Brothers de «Private Psychedelic Reel».
Impresionante a su vez el retropop ochentero de “Hands Around My Throat” con reminiscencias a Devo o Sigue Sigue Sputnik, en el que todo cuadra, desde la voz de Nicola Kuperus (Adult) hasta la agobiante línea de bajos. Sin olvidarnos de la instrumental “Leather” o el trip hop de “23 Lies”.
Un disco notable, que responde a las expectativas que ha generado en el que a pesar de que la sombra de Contino Sessions sigue siendo alargada, va a dar mucho que hablar este año.