Entrevistamos a Nick Waterhouse, que nos regala una playlist
No necesita presentación. Sobre todo en nuestro país, el californiano Nick Waterhouse tiene una más que sólida reputación, que ha ido cincelando a través de frecuentes visitas para dejar boquiabierta a la afición española a base de unos directos siempre efervescentes y superlativos. Su trabajo discográfico, por si fuera poco, no va en absoluto a la zaga de dicha fama. El sexto de sus álbumes de estudio se titula The Fooler, ha sido grabado en su país bajo la batuta del reputado Mark Neill y es realmente sensacional. Ha realizado una gira europea que ha recalado en varias ciudades españolas, con excelentes reseñas, como siempre (así te contamos su paso por Madrid).
El artista habla con nosotros de todo eso y atención, spoiler: al final de la entrevista nos regala una selección de canciones añejas que es una verdadera exquisitez. Avisadas y avisados estáis.
“Sólo me considero parte del gran río de la música”
The Fooler es tu sexto álbum de estudio y da la impresión, tanto por su portada como por su tono general, de que es más introspectivo que otros de tus trabajos, aunque mantiene la coherencia con el resto de tu catálogo. ¿Podríamos considerarlo un pequeño cambio de dirección?
Cada disco lo consideraría una continuación de mi cuerpo de trabajo y una historia propia… Creo que simplemente está al otro lado de la periferia con respecto al mundo de Times All Gone o Never Twice, pero no tan lejos…
Has dicho que el disco tiene una especie de concepto detrás que tiene que ver con San Francisco y el paso del tiempo. ¿Podrías contarnos un poco sobre eso?
Fue durante una experiencia particularmente importante, caminar por una calle de San Francisco tan surrealistamente vacía que parecía un sueño. Fue ahí cuando todo The Fooler comenzó a materializarse. La ciudad había sido un lugar del que había abandonado física y emocionalmente algún tiempo antes y ahora lo sentía como una Pompeya emocional; el abandono físico finalmente reflejó mi imagen interna del lugar: un escenario vacío donde las cosas se habían desarrollado de manera tan vibrante en algún momento. Y sin embargo tiempo atrás esta calle de la ciudad tenía exactamente el mismo aspecto al mediodía que a medianoche.
El álbum muestra una variedad estilística muy erudita y es bien sabido que trabajaste en una tienda de discos y también como DJ en el pasado. ¿Te consideras un amante/coleccionista de música? ¿Crees que es bueno serlo y tener un amplio conocimiento de la música para poder crearla?
Sólo me considero parte del gran río de la música, nunca me coloco en ninguna jerarquía pero sí creo que uno debe tomar en serio su oficio cuando se trata de eso, un oficio. Sin embargo, eso no quiere decir que uno deba ser demasiado serio… es arte, no es ciencia.
Como digo llama la atención la variedad estilística de las canciones de este disco, pero también los arreglos que adornan muchas de ellas, que me han parecido muy imaginativos. Hay toques de psicodelia en «Looking for a place», pop barroco a lo Brian Wilson en la maravillosa «Was it you», soul sofisticado en «Are you hurting». ¿Cómo trabajasteis en los arreglos del disco? ¿Fueron bien pensados antes de entrar al estudio?
Tiendo a escuchar las canciones completamente arregladas en mi cabeza, o al menos formas de arreglos, como si fueran nubes, mientras compongo. Escuché clavicémbalo, campanas, vibráfono, toques rítmicos, pero uno nunca sabe hasta que se agregan todos esos elementos si realmente funcionan. Tiendo a tener un 90% de acierto, hasta el momento, en mi carrera, pero nunca me duermo en los laureles. Mark Neill fue excelente a la hora de entablar el diálogo sobre cómo ejecutar mejor su enfoque de producción.
Volviendo a la canción «Looking for a place», mirando su título uno no puede evitar pensar en el hecho de que recientemente te has mudado de tu California natal a Francia. ¿De qué manera ha influido esto en el proceso de creación de ‘The Fooler’? ¿Consideras que por fin has encontrado “tu lugar”?
No, no creo que lo haya hecho. La canción “Looking for a place” trata simplemente sobre la paz que uno encuentra al recorrer en bicicleta lugares y otros recuerdos.
Grabasteis el disco con la ayuda de Mark Neill en Valdosta (Georgia). ¿Qué te llevó a colaborar con él y en qué medida intervino en el sonido final del disco? ¿Te resulta fácil dejar la producción en manos de otra persona?
Durante mucho tiempo estuvimos en contacto. Este disco es el resultado puro de la colaboración con Mark como mi productor; Acepté hacerlo para ver cómo se sentiría y qué resultaría de ello.
Siguiendo con la pregunta anterior, eres muy conocido como productor de otros artistas. De hecho, no hace mucho estuviste involucrado en la producción del disco de Lana del Rey Did You Know That There’s a Tunnel Under Ocean Blvd, concretamente en el tema «Candy necklace», en el que también participa Jon Batiste (en cuyo último disco, de la tú también colaboraste). ¿Cómo surgió trabajar con ella y cómo fue la experiencia?
Jon y yo hemos estado trabajando de una manera increíblemente prolífica durante los últimos cinco años, gran parte de la cual es inédita. Él y Lana habían hecho una demo de la melodía y ella llegó al estudio lista para poner voz. La cosa se desarrolló de una forma natural a partir de ahí. Fue una sesión muy ensoñadora y nocturna que sólo duró unas horas; El proceso creativo de Lana es algo digno de contemplar.
En ‘The Fooler’ hay una canción (fantástica), «Hide and seek», que es puro Burt Bacharach, tanto en composición como en producción. ¿Buscabas rendir homenaje al maestro o es algo que simplemente salió de esa manera? Me imagino que debe haber sido todo un desafío hacer algo tan fiel al sonido de esa época.
Ese tipo de cosas simplemente salen de mí, y ser comparado con Bacharach es más que halagador; creo que hay muchas maneras de abordar una melodía y él es el maestro en ello; Debo decir que no hice ningún cambio de tiempo inteligente de 6/8 como lo haría él. También estaba pensando en Joe South, pero, sobre todo, escribiendo inconscientemente lo que tenía en la mente y en el corazón.
En relación a lo anterior, aunque tu música es muy variada, lo que la hace inclasificable, siempre ha tenido una orientación y un sonido muy vintage. ¿Cuando grabas buscas retratar de alguna manera el sonido de tiempos pasados? ¿Nunca se te ha pasado por la cabeza recurrir a un sonido más, digamos, moderno?
No. Simplemente toco y grabo de la forma en que quiero escuchar música. La mayoría de la música moderna me suena terrible.
De hecho, el disco está en mono, algo tremendamente vintage. Y debo decir que suena espectacular. ¿Eres de los que, como Phil Spector, prefiere ese formato al estéreo?
Simplemente prefiero mono, es más directo.
Todo lo anterior contrasta, de hecho, con el hecho de que el remix electrónico de «Katchi» que hizo Ofenbach tuvo mucho que ver con darte a conocer a un público más amplio. ¿Tienes planes de repetir la experiencia de llevar tu música al club?
La verdad es que no, ellos fueron quienes la llevaron (mi música) ahí.
Para promocionar The Fooler te has embarcado en una gira europea que ha tenido nada menos que cinco paradas en España, donde ya cuentas con un público fiel que te espera con los brazos abiertos cada vez que vienes. ¿Cuál crees que es el secreto de la buena relación que tienes con el público español?
Creo que los españoles tienen una manera especial de “soplar las brasas” de mi corazón de intérprete. Nos encontramos en un terreno común que se remonta a los divertidos espectáculos underground de R&B de mi adolescencia. Siempre ha habido aquí una cultura muy rica y un espíritu todavía más rico en torno a una serie de referencias compartidas, no obstante siempre están dispuestos a aceptarme como el artista individual que soy.
Por último, y no sin antes felicitarte por este fantástico disco y desearte mucha suerte en tu gira, me gustaría pedirte que hagas una pequeña lista de discos. Pero no la típica lista de “álbumes de la isla desierta” o favoritos de tu vida, sino más bien, una lista de cinco álbumes (o tantos como quieras) que crees que te han traído a ese preciso momento musical y personal en el que te encuentras. tú mismo. Los que te han acompañado en el proceso de creación de ‘The Fooler’, podríamos decir. Y si puedes explicarnos el por qué de cada uno, sería un fabuloso regalo que nos harías.
¡Gracias! La verdad es que no pienso en términos de álbumes, así que es difícil decir algo al respecto, o sería algo más para tomar tranquilamente unas cervezas y debatir sobre ello.
No obstante, aquí te dejo unas cuantas canciones:
Playlist especial de Nick Waterhouse
Discrepancy (The Bonniwell Music Machine)
Trains and Boats and Planes (Dionne Warwick)
The Best Years (Charlie Rich)
The Days Of Wine And Roses (Julie London)
I’m Gonna Find Myself A Girl (Gene Pitney)
Hush (Joe South)
Rose Garden (Lynn Anderson)
Out In The Country (Three Dog Night)
Remind My Baby Of Me (Gene Pitney)
There’s Always Something There To Remind Me (Lou Johnson)
That’s Not the Answer (Dionne Warwick)
I Gotta Be Somebody (Joe South)
How Could I Help But Love You? (Aaron Neville)
Moon River (Jerry Butler)
It’s All Right (You’re Just In Love) (The Tams)
Goin’ Out Of My Head (Little Anthony & The Imperials)
I Keep Forgettin’ (Chuck Jackson)