Low – Ones And Sixes (SubPop / Popstock!)
Despista que un disco de Low se abra con un tema como «Gentle», de sutiles tintes electrónicos y que en la cuidada interpretación de Mimi Parker bien podría haber pertenecido a los mismísimos Massive Attack. De algún modo cabe entender esta peculiaridad como una advertencia, porque el undécimo álbum en la carrera de los de Duluth resulta sensiblemente más hermético y nocturno que entregas inmediatamente anteriores en el tiempo.
Alan Sparhawk y la propia Mimi vuelven a turnarse en la emotiva función de vocalista principal, papel que en el presente trabajo adquiere importancia mayúscula al lucir siempre por encima de una instrumentación con tanta tendencia a la austeridad como en realidad necesariamente detallada. Una obra diseñada con la habitual delicadeza del trío, pero que deriva en pretendida densidad durante buena parte de la misma. Es el efecto provocado por composiciones como «No Comprende», «Landslide» y su épico final, «The Innocents» o «DJ». Una circunstancia que requiere de toda la atención por parte del receptor, para focalizar así el auténtico sentido del conjunto y degustar su (enorme) capacidad evocadora. Asimilación de cierta complejidad a cuya consecución ayudan temas de espíritu más amable como «Kid In The Corner», «What Part Of Me» o «No End».
El elepé puede situarse medio escalón por debajo de clásicos como Long Division (1995), The Great Destroyer (2005) o los más recientes Drums And Guns (2007) y C’mon (2011), y sin embargo Ones And Sixties (2015) es sentido, bello, delicado en forma y ampliamente conmovedor en fondo. Sin alcanzar su mejor nivel la banda vuelve a sobrepasar la etiqueta del slowcore e incluso coquetea con la tecnología, certificando que cualquier disco con su impronta sigue superando a la media en cuanto a desborde de sentimientos se refiere.