Muñeco (Moby Dick) Madrid 09/12/16
En el concierto que dieron los Vampire Weekend en el Fuji Rock de 2010, su líder Ezra Koenig pedía más sangre y gracia morena a un público japonés estático para que al menos movieran un pié al ritmo de la siguiente canción.
Algo así consiguió Muñeco en su última visita a Madrid, durante la cual se metieron en las tripas de la sala Moby Dick para presentar su último trabajo de forma casi íntegra e intentar enamorar a un público madrileño que apostó tímidamente por el festival que organizaba la discográfica El Genio Equivocado con los grupos de su sello durante el jueves y el viernes.
No tocaron las canciones de su Teoría del Cielo de forma correlativa, ya que decidieron arrancar con “Astro”, la más breve de su segundo LP, que sirvió de introducción para una actuación con la que atrajeron la atención de los que habían ocupado la mitad más cercana de la pista. Con “El Espectador” ofrecieron el espejismo de que este quinteto no es meramente instrumental, mientras que con “Santos” y “Caballo de Troya” sacaron todo el músculo que se le pide a la banda.
Entre el público, Muñeco ya se iba encontrando con sonrisas, cabezas que seguían el ritmo de sus temas y piececillos punteando el suelo con satisfacción. Sonó especialmente bien “Selva”, con su entrada melancólica, percusión latina y las eclosiones que ofrecía entre fase y fase de la canción. Antes de cerrar con “Gracia”, el batería pedía al público que se animase a mover un poco el esqueleto, pero si no lo conseguían con la canción que acababan de tocar, poca fuerza iban a sacar a los asistentes con el tema de despedida.
Con una concentración casi matemática, los miembros de Muñeco iban lanzando sonidos que formaban una masa con mucho cuerpo para hacer temblar las maderas de la Moby Dick. Convencieron, pero se hizo muy corto y rozaron el shoegazing ante un público que distó mucho de ese ‘Espectador’ revolucionario que describen en el primer single de Teoría del Cielo.