The Chameleons Vox – Sala Rock Kitchen (Madrid)
The Chameleons Vox es el nombre que Mark Burgess y Jhon Lever, vocal y batería respectivamente eligieron para la resurrección de la banda de Manchester en el 2009. Quién sabe si por respeto a los otros miembros implicados en The Chameleons, y que han preferido mantenerse al margen de esta nueva etapa.
Con tan solo dos fechas en España, el ahora sexteto se presentaba con buenas referencias por conciertos en otros países, y con un público deseoso de ver de nuevo sobre el escenario a Mark Burgess. De hecho, el concierto de Madrid tuvo que ser cambiado de sala La Boite a Rock Kitchen por entradas agotadas. De todos es sabidos que los de Manchester nunca obtuvieron el éxito masivo de otras bandas “Postpunk” de su generación, léase: The Cure o Echo & The Bunnymen. Pero sí que han sido considerados un grupo de “culto” con una nutrida legión de admiradores fieles e inasequibles al paso de los años.
Con una sala aún ni a una quinta parte de su capacidad, comenzarían a tocar los teloneros Eôn. Banda madrileña de nuevo metal, que apuestan por una estética oscura, sonido poderoso y buena técnica a la hora de manejar sus instrumentos. Quizás algo sobrados de pose como si quisieran imitar en demasía bandas como Sober.
Con puntualidad británica, nunca mejor dicho, a las 21:55 ya estaban sobre el escenario, Mark Burgess con la nueva formación de The Chameleons Vox. Tres guitarras, sí habéis leído bien, batería (John Lever), bajo y el propio Mark libre de cualquier instrumento y sólo a las voces.
Ambientación fantasmagórica, gracias a las luces y a esa máquina, excesiva en algunos casos, de humo, y un gran tema para empezar que originariamente se edito como single; “A Person isn´t Safe Anywhere this Days”, fueron suficientes para ponernos en nuestro sitio, “Paper Tigers” también del primer álbum sería la siguiente. Con un Mark Burgess muy cómodo sobre el escenario y arropado por una banda más que solvente, inundando hábilmente la sala con ensoñaciones y atmosferas en forma de guitarrazos y líneas rítmicas contundentes, el set siguió como cabía de esperar con clásicos como: “Pleasure & Pain”, “Thursday Child” o “Nostalgia”, de las más celebradas.
A estas alturas no creo que hubiera nadie en la sala arrepintiéndose de haber ido al concierto, y en las primeras filas algunos atrevidos se atrevían a agarrar de las manos a Mark Burgess, y las fans mas cegadas a llamarle guapo ¿Le habrán visto bien?
El resto del set, algo corto quizás, estuvo compuesto de temas de los primeros tiempos de la banda: “Second Skin”, “Singing Rule Britannia”, “Soul in Solation”, o la estupenda “Tears”, con la que pudimos comprobar la efectividad de las tres guitarras, y lo engrasada que esta la nueva etapa de The Chameleons Vox. Cabe reseñar también la buena labor de los encargados de la sala, que parecen haber hecho los deberes en cuanto a luces y sonido se refiere, mucho mejor que al principio de la andadura del Rockitchen.
Unos días antes del concierto había oído todo tipo de comentarios, y la mayoría; escépticos sobre la nueva formación. Ahora puedo decirlo sin miedo a equivocarme, lo del concierto de Madrid fue algo muy emocionante. Nunca los veremos en el Rock & Roll Hall of Fame, y sí es cierto que habría que ver cuánto de alimenticio hay en llevar el nombre de The Chameleons de gira hoy día. Me da igual, mientras tengamos a Mark Burgess sobre el escenario disfrutando y con la voz en forma y rodeado de una banda que sobrepasa con creces el termino aceptable, allí estaré.
ESCUCHA en Spotity a The Chameleions