Zabriskie – Latitud (La Viejita Música / DiscMedi)

Zabriskie es una banda leonesa formada por Juan Marigorta (voz y guitarra), Alberto de Gabriel (guitarra eléctrica), David Franco (órgano hammond y coros), Carlos Arede (bajo) y Alex Modia (batería). Juntos desde 2003, en su música mezclan soul, rock, pop alternativo y algo de psicodelia. Recientemente han lanzado Latitud, su tercer álbum, producido por Juan Marigorta en los Estudios Tripolares de León. Un disco que ha sido grabado a conciencia, durante los últimos cuatro años, y en el que han contado con la colaboración de Alex “Cooper” y Dani Charras “Vacazul”.

Quizás el hecho de que el álbum haya sido cocinado a fuego lento, en un proceso de años, es lo que determina el carácter atemporal de este trabajo, ajeno a modas y caprichos. El sonido de Zabriskie en Latitud puede rememorar lo mejor de los 80, el pop alternativo de los 90, y también algunas músicas actuales alejadas de las listas clónicas de éxitos. Aunque en su nota de prensa hablen de Grateful Dead o Pink Floyd, yo creo que es innegable la influencia de bandas de pop patrio de los 80 como Nacha Pop o Pistones. Solo hay que dar una escucha atenta a temas como el single “Donde nunca haya estado” para darse cuenta de que aquí hay referencias de calidad. Referencias que, además, la banda sabe destilar adecuadamente ofreciendo un producto ni caduco ni plegado a las corrientes imperantes ni derivativo. Personal e intransferible.

Las armonías vocales y las melodías imaginativas y pegadizas juegan un papel importante en canciones como “Daño”, “Nada extraño”, y en general a lo largo de todo el disco. Zabriskie no caen en la euforia llena-estadios ni atrae-festivales, pero han sabido crear un álbum al que es difícil resistirse. En “Ingravidez” además muestran su faceta más lisérgica, saliendo igualmente triunfantes. Y en las canciones más lentas es fácil encontrar ecos del pop nacional más elegante y cuidado de los últimos años, el de gente por ejemplo como Fabián, por no irnos muy lejos geográficamente hablando. Incluso hay combinaciones excelsas de pop, rock garagero y aromas latinos, como en “Abrigo”, que podría haber firmado Santana.

En definitiva, este tercer álbum de Zabriskie es un disco que raya la perfección, sin un minuto de relleno. Un caramelo para los amantes del pop directo pero elaborado y con personalidad.

Escucha Zabriskie – Latitud